El mensaje ciudadano
RAYMUNDO GONZÁLEZ SALDAÑA
Martes 10 de Julio de 2018 8:51 am
TRANSCURRIDA más
de una semana desde que vivimos el ajetreo de la jornada electoral, en la que
una abrumadora mayoría de 62 por ciento de los votantes decidió que Andrés
Manuel López tomara las riendas del país a partir del próximo 1 de diciembre,
podemos empezar a visualizar las causas reales de tan inesperado fenómeno. No cabe duda que
el principal mensaje emitido por la ciudadanía el pasado 1 de julio fue
devastador para el PRI y su máximo representante, el presidente Peña Nieto, ya
que sólo 16 por ciento de los electores ratificaron su raquítico desempeño al
frente de este gobierno que agoniza. Sin duda alguna que la corrupción desmedida
cometida por los gobiernos emanados del PRI, así como la indignante impunidad,
fueron los actos castigados en esta elección. La contienda dejó
a un PRI devastado y no se ve por dónde pueda recuperarse. Sin embargo, no hay
que perder de vista que muchos priistas emigraron muy a tiempo al partido
Morena, robusteciendo la idea de que el PRI no desaparece, simplemente se ha
transformado o enquistado en un nuevo partido. A nivel nacional, podemos ver
cómo varios connotados priistas rodearon al futuro Presidente, ayudándolo a
concretar su proyecto. Es más, fue muy evidente el pacto de impunidad acordado
por éste con el mismo presidente Peña Nieto. No se nos debe olvidar cómo al
inicio de la campaña, López Obrador amenazaba con terminar con la mafia del poder,
refiriéndose, por supuesto, al Presidente de la República y su protector Carlos
Salinas de Gortari, pero una vez concretado el referido pacto, AMLO se desvivió
en dejar claro que no era rencoroso y que perdonaría a estos dos famosos
priistas, dejando de criticar en automático a esa mafia del poder. Esta
sospecha toma fuerza, y sin ir muy lejos, vemos cómo aquí en Colima hubo
priistas que se encargaron de promover como candidatos de Morena a sus cercanos
colaboradores. Sin duda que la
recuperación del PRI se antoja como una misión imposible, por eso no es
descabellada la idea de una simple mutación. Por su parte, el otro gran
perdedor en esta inolvidable contienda fue el PAN, aunque hay que reconocer que
a diferencia del PRI, este partido pudo, por lo menos, asomar la cabeza ante
descomunal embestida. Vemos que el
albiazul tuvo algunos alicientes, pues ganó de manera contundente la gran
mayoría de cargos disputados en territorio guanajuatense. Además de refrendar
las gubernaturas del mismo Guanajuato y Puebla, se adjudicó también Yucatán. El
número de legisladores para el PAN en la Cámara, a pesar de haber menguado en
esta elección, no deja de ser representativa. Sin embargo, hay que saber que
los panistas nacieron en la adversidad y están adoctrinados para ir como los
salmones, contra la corriente. Por ello, no debemos descartar que este partido
se levante desde los escombros y sepa reconstruirse con la fuerza que le dan
sus principios y valores. La tarea se aprecia titánica, pero no imposible. Nueva Alianza y
Encuentro Social sufrieron la fulminante indiferencia ciudadana. A pesar de que
éstos fueron en coalición con el PRI y con Morena, han perdido su registro a
nivel federal, por no alcanzar el 3 por ciento de la votación. ELECCIÓN SUI GÉNERIS En el ámbito
local, la elección en el municipio de Colima es digna de un profundo análisis.
Si bien ganó la Presidencia Municipal Movimiento Ciudadano, con su candidato
Leoncio Morán, la distancia entre éste y el segundo lugar, el panista Héctor
Insúa, es mínima. El tercer lugar lo ocupó el candidato de Morena, y el cuarto,
el otrora invencible PRI. Sin embargo, hay que reconocer que la diferencia
entre el primero y cuarto lugar no rebasa los 2 mil 500 votos. Un aspecto que
llama poderosamente la atención es que a pesar de que el actual alcalde, Héctor
Insúa, cuenta con una buena aceptación ciudadana debido a su extraordinario
trabajo al frente del municipio, su derrota, sin duda, nos lleva a pensar que
obedece a diversos factores, mismos que vale la pena analizar en otra ocasión.
*Ex dirigente y
actual consejero estatal del PAN