Cargando



Contextos



RAÚL JUÁREZ ALBARRÁN

Proyectos


Sábado 14 de Julio de 2018 9:12 am


I/II


UNA vez que las aguas volvieron a su cauce normal, la clase política que llevó a AMLO al poder se apresta a elaborar el proyecto de Nación prometido al pueblo, a los que creyeron en él y votaron para que se haga realidad. En un tramo de 5 meses, el llamado periodo de transición, de lo que se trata es de limar asperezas con los sectores representativos de los poderes fácticos. En primer lugar, con el gobierno actual, pero también con los sectores empresariales y políticos: diputados, senadores y gobernadores.

En Colima, como en casi todo el país, el territorio se vistió de Morena. El PRI y sus huestes serán oposición responsable. Eso dijeron Ignacio Peralta, Rogelio Rueda y Fernando Moreno. Seguramente serán interlocutores con quien será la coordinadora de los programas federales en Colima. Me refiero a Indira Vizcaíno, diputada federal electa por el segundo distrito. La joya de la corona colimote.

La coordinación federal tendrá estrecha relación con el gobierno estatal. Con los recursos federales se complementarán obras para el reforzamiento multimodal en Manzanillo. El gobernador Peralta Sánchez conoce a Indira y sabe que la unión hace la fuerza. Sin embargo, en la práctica sabemos que el “dinero es poder”. De la aplicación transparente de los recursos va a depender que la recomposición de fuerzas se oriente hacia el nuevo proyecto de Nación de AMLO.

Llegó a mi celular un documento que me envió Miguel Acosta, sobre que Alfonso Romo y su equipo dan a conocer las líneas generales en los principales rubros de lo que serán las políticas de gobierno sectoriales. En dicho documento también están los nombramientos que le corresponderá realizar a Romo en el gobierno central, en las comisiones y en las judicaturas durante su mandato.

Destaco la parte de educación, salud, seguridad, energía, tecnología, agropecuario, política exterior, etcétera, pero también hacia el interior el planteamiento de reingeniería del aparato estatal. Por ejemplo, la reubicación de casi todas las dependencias federales a los estados, y la desfederalización de éstas hacia los estados. La política de austeridad en mandos superiores y el aumento del salario mínimo. La coordinación es la clave.

En la parte de salud, la incorporación de una mayor población al Seguro Popular y de servicios de salud. En educación, es prioritaria la capacitación magisterial y los apoyos para estudiantes. En la parte agropecuaria, lograr autosuficiencia alimentaria, apoyos a proyectos agroindustriales y fijación de una base en los precios de los productos. Se creará un sistema de almacenamiento. Habrá precios de garantía para básicos. Se revisarán subsidios para mejorar la productividad. La idea es llegar a ser autosuficientes en productos agrícolas.

La seguridad pública es prioridad con AMLO. El Mando Único será inevitable. La creación de la Secretaría de Seguridad Pública como responsable de la seguridad y el compromiso de los municipios a acatar la Ley de Seguridad Interior. 

En el sector energético destaca la nueva política impositiva para que Pemex reinvierta propios recursos. La operación de tres refinerías que ayudarán a equilibrar el subsidio que tiene el precio de la gasolina. Los aumentos serán únicamente de acuerdo a la inflación. Se revisarán licitaciones anteriores y se fomentará el uso de energía limpia.

En política exterior, no es nada fortuito que el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, venga a ver qué onda con AMLO. Dos cosas les interesa de momento: la primera, sellar la frontera sur; la segunda, la seguridad en la frontera norte. El negociador principal de México, Marcelo Ebrard, quien tiene bajo sus alas a Mario Delgado y a Vidal Llerenas, dos colimotes bien posicionados, pero el más directo es César Yáñez. Los tres en primera línea. El TLCAN continuará con revisión cada 5 años, igual nuestra relación con los países de Asia-Pacífico.

El perfil del equipo de AMLO es de primer nivel, gente con experiencia y sobre todo con sentido común. Se trata de mejorar las cosas hacia el interior. Mejorar el mercado interno y a la vez aumentar la productividad en el sector industrial. (Continuará)