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Resurge MC



MANUEL GODINA VELASCO


Miércoles 15 de Agosto de 2018 8:20 am


SI bien a nivel nacional, Morena, con la cantidad de votos recibidos, es ya la primera fuerza política, en Colima se observan algunas variantes. La ola de Morena resultó indiscutible en cuanto al triunfo electoral de Presidente, senadores, diputados federales y hasta diputados locales, al quedarse con 15 de los 16 escaños de mayoría relativa.

Sin embargo, en materia de gobernanza municipal, donde los ciudadanos tienen más cercanía con los servidores públicos de ese primer nivel, las cosas no reflejaron el sentir nacional. Aquí se ejerció verdaderamente el voto diferenciado y por supuesto razonado, más en función del personaje que del partido que lo abanderó en este proceso.

Así las cosas en toda la franja costera, pero incluyendo a Ixtlahuacán, Morena no sólo arrasó con el triunfo de todos los cargos federales, sino que en estas cuatro demarcaciones municipales quiso cambiar de tajo a gobernantes avalados por el PAN, el Verde y el PRI.

En confirmación a mi apreciación, de que en estos casos locales pesaron más los personajes que sus partidos, se dio el hecho del repudio a la pretendida reelección de tres actores cuyo papel al frente de las alcaldías no merecieron la confianza de los votantes, me refiero a Héctor Insúa, Yulenny Cortés y Horacio Mancilla, que por hoy todavía gobiernan Colima, Villa de Álvarez y Minatitlán, respectivamente.

Los casos de Comala, Coquimatlán y Cuauhtémoc se cuecen aparte. En Comala, los electores siguen con la costumbre electoral de la alternancia; desde hace años, o gana el PRI o el PAN, pero no dejan que un mismo partido siga gobernando. En Coquimatlán sucede una cosa parecida, fue el primer municipio gobernando en Colima por el PAN, ha tenido alternancia con personajes de las dos fuerzas, pero ahora cuestionó la labor del alcalde Orlando Lino, quien pretendía brincar de nuevo a una diputación local. El triunfo fue para Guadalupe Benavides, no obstante las desgastadas siglas del partido que lo abanderó.

En Cuauhtémoc se dio un fenómeno diferente, la gente optó más por las siglas partidistas que por las figuras individuales, de otra manera no se explica que hubiera sido el único municipio que opta por la reelección de su Alcalde, al mismo tiempo que vota a favor de un diputado local que no es de ese terruño.

Pero al partido donde las cosas le resultaron a pedir de boca es a Movimiento Ciudadano, que estatalmente dirige Leoncio Morán. Resulta que este partido que por años conformó alianza electoral con fuerzas de la izquierda, en Colima, para las elecciones de 2015 y 2016, decide jugar solo, patrocinando a sus propios candidatos. Si bien es cierto que en esas elecciones no pudo conseguir una sola posición electoral por la vía de la mayoría relativa, en este sorpresivo proceso electoral de 2018, Locho decide jugarla de nuevo, postulando MC sólo ahora a las mejores cartas individuales.

A nivel estatal, Movimiento Ciudadano logra hoy un total de 45 mil 763 votos, pero en el caso de Colima capital, donde la elección se dividió entre cuatro, Locho obtiene más de 19 votos, mil arriba de Insúa, que era el contrincante más fuerte. En el caso de la Villa, Felipe Cruz logra vencer finalmente por más de 500 votos a Perla Vázquez Montes, impulsada por la ola Morena.

Lo cierto del caso es que además de Morena o el PT en Colima, MC logra un gran crecimiento exponencial que lo hará gobernar al 51 por ciento de la población total colimense. Al conquistar las dos más grandes ciudades de la zona capitalina conurbada, Movimiento Ciudadano y sus candidatos ganadores tienen la gran oportunidad de realizar una buena administración para seguir avanzando; Locho, por segunda ocasión como alcalde, y Felipe, quien por tercera vez gobernará la Villa.

En automático, Locho se convierte en el virtual candidato natural a la gubernatura de Colima, a cuyo cargo ha aspirado varias veces, muy por encima de la capacidad o popularidad del resto de alcaldes. De su éxito o fracaso dependerá su futuro político.

 

*Analista político