LUNES POLÍTICO
LUNES POLÍTICO
Lunes 17 de Septiembre de 2018 7:34 am
Mala señal ANTEPONIENDO intereses políticos personales,
el gobernador de Chiapas y senador plurinominal con licencia por el Partido
Verde Ecologista de México, Manuel Velasco Coello, ha hecho gala de cinismo y
de nulo respeto a la ley y a las instituciones, pues desde su posición de poder
y con la complicidad de incondicionales con quienes pactó alianzas, ha
dispuesto a placer del Poder Legislativo estatal y federal, para modificar leyes
y atropellar principios constitucionales. El 30 de junio, horas antes de la elección
del 1 de julio, el Instituto Nacional Electoral (INE) avaló la inclusión de
Velasco Coello en la posición dos de la lista plurinominal al Senado por el
PVEM. El 24 de agosto, le aprobó el Congreso de Chiapas una propuesta para
modificar la Constitución local y renunciar al cargo de Gobernador para estar
en condiciones de asumir su escaño en el Senado, después pedir licencia a esa
Soberanía y regresar a la gubernatura a terminar su periodo (8 de diciembre)
como “Gobernador sustituto”. En ese cargo está, por ahora. El 4 de septiembre, Manuel Velasco, junto con
la bancada mayoritaria de Morena protagonizó un evento vergonzante. El
chiapaneco solicitó licencia para separarse de la curul y regresar a gobernar
su estado, dado que el artículo 125 constitucional refiere: “Ningún individuo
podrá desempeñar a la vez dos cargos federales de elección popular ni uno de la
Federación y otro de una entidad federativa que sean también de elección; pero
el nombrado puede elegir entre ambos el que quiera desempeñar”. En una primera votación, el permiso le fue
negado, pero al someterla a consideración del Pleno, por segunda vez y en la
misma sesión, Velasco Coello consiguió licencia con el apoyo de la mayoría de
la bancada de Morena, el partido que ha ofrecido al pueblo de México una Cuarta
Transformación libre de corruptelas e ilegalidades. Horas más tarde del mismo día 4, en la Cámara
de Diputados se anunció la integración de cinco diputados del Verde a la
fracción de Morena, con lo cual el morenismo logró la mayoría absoluta, a la
vez que confirmó los acuerdos pactados, en lo oscuro, entre Velasco Coello con
los principales dirigentes de Morena, empezando por el presidente electo, Andrés
Manuel López Obrador. La alianza de AMLO-Manuel Velasco se inició
desde la campaña, cuando el Verde rompió la coalición con el PRI y fue por la
gubernatura con un candidato propio, Fernando Castellanos Cal, sin fuerza para
disputarle el cargo al abanderado de Morena, Rutilio Escandón Cadena, quien
ganó la contienda gracias a la escisión. Días previos y posteriores a todo este
desorden de componendas, complicidades e ilegalidades, en Chiapas empezaron a
renunciar diputadas locales y regidoras plurinominales electas, que por
principio de paridad encabezaban las listas de representación proporcional de
todos los partidos políticos, pero en mayor cantidad del Verde. La estrategia
era quitar mujeres para que, por prelación, pudieran llegar más hombres a los
Cabildos y al Congreso local. El hecho llegó al Congreso de la Unión y al
INE, pues las mujeres políticas renunciaban obligadas por sus dirigencias
partidarias, especialmente por el propio Manuel Velasco, de ahí que se les
motejara Manuelitas, en alusión a las lamentables e históricas Juanitas. Para evitar que se violentaran los derechos
políticos de las mujeres, el INE atrajo el caso y ordenó al Instituto de
Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) de Chiapas, garantizar que las
candidatas electas no cedieran sus lugares a varones. Ejemplar lección le dio el IEPC al Gobernador
de Chiapas el pasado jueves, pues no asignó ninguna diputación plurinominal al
PVEM, debido a que poco más de 30 candidatas a diputadas y regidoras por el
principio de representación proporcional habían renunciado a sus cargos, según
constaba en las listas registradas ante ese órgano electoral, lo que también
afectó Cabildos. Por tanto, los consejeros electorales
repartieron las pluris entre mujeres de otros institutos políticos, por lo que
el Congreso estará conformado por 25 mujeres y 15 varones, mientras que en los
Cabildos habrá mayoría de mujeres, es decir, Velasco Coello no pudo, por más
que lo intentó, pasar por encima de los derechos políticos de las mujeres. Desde sus inicios, el PVEM se ha destacado
por actuar al margen de la legalidad y servir de comparsa de partidos y
gobiernos, según sus intereses políticos y partidarios. Sin embargo, es muy
mala señal la que manda Morena cuando deja clara su alianza con Manuel Velasco
Coello, uno de los peores especímenes que ha puesto el Partido Verde en el
ámbito público, quien nada bueno puede aportar a los cambios de fondo que, de
palabra, han prometido López Obrador y el morenismo. Dos mujeres
priistas DOS mujeres priistas han tomado su carril en
la carrera por la sucesión gubernamental de 2021. Ellas son la diputada federal
Ximena Puente de la Mora y la ex senadora Mely Romero Celis, secretaria de
Gestión Social del CEN del PRI, apenas nombrada la semana pasada. Puente de la Mora llegó a la curul por la vía
plurinominal. Doctora en Derecho, ex comisionada presidenta del Instituto
Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos, comenzó su ascenso
político en la capital del país en el sexenio que está por concluir. En
ocasiones, estuvo en el centro de la polémica de partidos, dada su posición
ante asuntos claves como el caso Odebrecht. En la campaña electoral reciente, tuvo escasa
presencia en Colima. Si bien los candidatos a curules plurinominales no
requieren hacer campaña, Puente de la Mora desaprovechó la oportunidad de darse
a conocer más en las bases priistas y a entrar en contacto directo con los
ciudadanos a quienes eventualmente podría verse en necesidad de solicitar el
sufragio. Única diputada federal priista por Colima,
tiene terreno aprovechable si trabaja bien por el estado desde su curul. Puede
hacer mucho por la entidad, si gestiona beneficios para la población y se
coordina con otros legisladores y con el gobierno estatal. Son 2 años y medio
cruciales, si Ximena Puente se interesa en ser candidata a Gobernadora en 2021. La carrera de Mely Romero es más larga.
Licenciada en Contaduría Pública y en Enseñanza de Matemáticas, cursó una
Maestría en Educación Matemática en la Universidad de Columbia, en Nueva York. Diputada local de 2009 a 2012, contendió por
el Senado y ganó. Ahí, participó en las comisiones de Desarrollo Municipal,
Comercio y Fomento Industrial, Comunicaciones y Transportes, Educación y
Desarrollo Social. También ocupó el cargo de subsecretaria de Desarrollo Rural
de la Sagarpa a partir del 5 de abril de 2016, para renunciar en enero de 2018
para contender como candidata a diputada federal por el primer distrito,
elección que perdió por el efecto AMLO que derivó en resultados atípicos. Fue secretaria de Acción Femenil del CEN de
la CNC y presidenta de la Conferencia de Mujeres Rurales de México. La semana
pasada, con respaldo cenecista, fue nombrada secretaria de Gestión Social del
CEN del PRI, que detentará al menos hasta agosto de 2019, cuando se convoque a
la renovación de la dirigencia nacional. Desde su puesto en el CEN puede trabajar por
Colima y de cara a posicionarse en el ánimo popular, si desea ser candidata a
Gobernadora en 2021. En caso de que en 2019 deba salir del CEN del PRI, tendría
que buscar otros caminos para llegar a la candidatura. Si permanece en ése u
otro cargo, reforzará su plataforma de lanzamiento. Ximena Puente y Mely Romero son dos mujeres
destacadas en este momento, cuando el PRI en Colima está descabezado, sin
figuras prominentes y en la necesidad de reconstruirse sin que se conozca hasta
ahora, 2 meses y medio después de la elección, el derrotero que tomará el
tricolor en el estado. En abandono político su partido, que carece
de guía y destino, a ambas mujeres les toca un puesto importante en momentos
muy difíciles para su organización. Es al mismo tiempo una circunstancia
interesante para crecer políticamente, si logran superar la adversidad de la
coyuntura. Los mejores políticos se forman precisamente en circunstancias de
infortunio, cuando las condiciones les son desfavorables. Si se sobreponen,
llegarán forjadas a la contienda de 2021, cuando su partido necesitará
inteligencia, fuerza, carácter y mucho trabajo para ganar. Desde Griselda Álvarez, el PRI en Colima no
ha tenido candidata a Gobernadora, a pesar de que fue el primer estado
gobernado por una mujer. Estuvo a punto de lograrlo cuando el tricolor efectuó
un proceso interno entre Carlos de la Madrid y Socorro Díaz, pero ésta último
perdió. Por lo pronto, aunque falta mucho tiempo todavía, Ximena Puente y Mely
Romero están habilitadas. En las circunstancias actuales, tomaron la delantera
a los demás aspirantes varones, que pelearán por la candidatura. PAN, sube o se
hunde EN el Comité Ejecutivo Nacional del PAN han
logrado los primeros acuerdos para la renovación de la dirigencia nacional que
se llevará a cabo el próximo 11 de noviembre, sin embargo, siguen los jaloneos
y las pugnas intestinas por el control del partido. Hasta ahora, el más perfilado para ocupar la
presidencia del partido es Marko Antonio Cortés Mendoza, quien pertenece al
grupo del ex candidato presidencial, Ricardo Anaya, y del actual líder panista,
Damián Zepeda. Los otros dos fuertes aspirantes al cargo
eran el ex senador Héctor Larios y el ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno
Valle, quienes habían formado una mancuerna para buscar la Presidencia y la
Secretaria General, pero sorpresivamente se sumaron a Marko Cortés, previamente
a la emisión de la convocatoria para la renovación del CEN. Larios Córdova será
registrado secretario general en la planilla. Otros que apoyan esa postulación son los
gobernadores Martín Orozco, de Aguascalientes; Carlos Mendoza, de Baja
California Sur; José Rosas Aispuro, de Durango; José Antonio Gali y la recién
electa, Martha Erika Alonso, de Puebla; Francisco Domínguez, de Querétaro;
Carlos Joaquín González, de Quintana Roo; Francisco Cabeza de Vaca, de
Tamaulipas, y del mandatario electo de Yucatán, Mauricio Vila. Antes ya habían expresado su respaldo
Francisco Vega, de Baja California; Miguel Ángel Yunes, de Veracruz, y Diego
Sinhué, gobernador electo de Guanajuato. El ex candidato presidencial, Anaya Cortés,
llevó al partido al precipicio, por lo que si llega a la presidencia panista un
miembro de su grupo, sin nivel alto, como Marko Cortés, el PAN quedará debilitado
con una directiva que tendrá que enfrentar las elecciones locales del próximo
año en varios estados donde se renuevan Ayuntamientos, Congresos y la
gubernatura de Baja California, así como las intermedias de 2021, donde además
de comicios estatales, se elegirán diputados federales. Luego de la declinación de Héctor Larios a
favor del michoacano Marko Cortés, el ex presidente, Felipe Calderón, consideró
que dicha fórmula “será el fin del PAN”. Manuel Gómez Morín Martínez del Río, nieto de
Manuel Gómez Morín, fundador del PAN, también disputará la dirigencia nacional.
Acusó a Larios Córdova de “mantener las prácticas corruptas y antidemocráticas
del PRIAN”; pero tras la unión con Cortés Mendoza, dijo que “ahora es hasta más
fácil vencerlos”. Gómez Morín tiene razón cuando afirma que el
PAN se ha vuelto extremadamente pragmático, pues busca ganar elecciones con
quien sea y como sea. Indicó que en el panismo actual, el fin
justifica los medios, “y entonces nos llenamos de alcaldes corruptos y diputados
que nada más van a ver cómo usufructúan el cargo. No es ganar por ganar, es
ganar con la gente correcta, con la que va a cumplir y a seguir la doctrina del
partido”. Tiene el respaldo del ex presidente Felipe
Calderón, del ex líder del PAN, Gustavo Madero; del gobernador de Chihuahua,
Javier Corral, y los ex mandatarios Alberto Cárdenas, Carlos Medina, Fernando
Canales, Francisco Barrio, Patricio Patrón, Francisco Ramírez, Marcelo de los
Santos y Guadalupe Osuna. José Luis Espinosa Piña, quien también aspira
a la Presidencia del PAN, pero que no tiene mayor capital político, manifestó
que el partido se encuentra en un proceso de enfermedad terminal y por ello le
urge sanar. También busca la dirigencia nacional el ex
gobernador de Baja California y actual diputado federal plurinominal, Ernesto
Ruffo. Ayer, en un comunicado de prensa, Manuel
Gómez Morín, José Luis Espinosa y el legislador Ernesto Ruffo dieron a conocer que impugnaron ante la Sala
Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación la
convocatoria para la contienda interna del partido, porque los requisitos son
“excesivos e irracionales”. Además de que la elección interna debe posponerse
hasta que se garantice certeza en el padrón de militantes. Los aspirantes indicaron que la convocatoria
fue publicada para beneficiar a la planilla encabezada por Marko Cortés y
Héctor Larios, por lo que se presume “inequidad en el proceso y parcialidad”
por parte de la Comisión Electoral. Los panistas no aprendieron la lección,
porque si Ricardo Anaya dividió al partido y perdió la elección presidencial,
las cúpulas no deben imponer al anayista Marko Cortés. Si a nivel nacional Anaya Cortés es el
culpable de haber arrastrado al PAN a la lona, en Colima el responsable es
Jorge Luis Preciado, por lo que cuando se renueve la dirigencia estatal, en
diciembre próximo, lo mejor para el panismo es sacudirse al lastre que
representa Jorge Luis Preciado y otros panistas perdedores, como Héctor Insúa y
su camarilla. Acción Nacional está en el mejor tiempo para
reagruparse, construir de nuevo la unidad interna, retomar sus valores
fundamentales, doctrina, ideología, principios y elegir a los mejores
dirigentes a nivel nacional y local, pues no será nada fácil recobrar la
confianza que le perdieron los mexicanos. Alcalde cínico IRRESPONSABLE y cínico, el presidente
municipal de Cuauhtémoc, Rafael Mendoza Godínez, se burla de la autoridad
judicial local y nacional, así como del Legislativo y de la misma ley, al
interponer un nuevo amparo para que no se aplique la sentencia en el Juicio
Político en su contra y se le destituya e inhabilite 7 años para ocupar un
cargo público local, por el delito electoral cometido en enero de 2016, cuando
intervino en el proceso electoral extraordinario a favor del entonces candidato
del PAN a la gubernatura, Jorge Luis Preciado Rodríguez. El miércoles de la semana pasada, Mendoza
Godínez obtuvo un amparo del Juzgado de Distrito contra la inminente ejecución
de la resolución dictada por el Congreso del Estado y que implicaba su
destitución. No es más que una artimaña del edil para ganar tiempo (señala el
presidente del STJE, Bernardo Salazar Santana, que serán aproximadamente 8
meses). Logró esa nueva protección de la justicia
federal, a unos días de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN)
notifique la resolución al STJE sobre la Controversia Constitucional que el
Ayuntamiento presentó para que el Congreso del Estado no pueda sancionar al
edil. Dicha resolución señala que el STJE, como
Jurado de Sentencia, no podría modificar la sanción impuesta al Alcalde y sólo
tenía que ejecutarla. Al verse perdido, Rafael Mendoza se aferra a
mantenerse en el puesto, no sólo para terminar esta administración municipal,
sino para iniciar la otra, a partir del 15 de octubre. Es simplemente alargar su agonía y dilatar lo
más posible la aplicación de la justicia, que irremediablemente lo alcanzará y
será destituido e inhabilitado, de eso no hay duda. Si en todas las instancias ha perdido, desde
el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que ordenó
al Congreso sancionarlo; el mismo Poder Legislativo local y hasta la SCJN, nada
justifica que Mendoza Godínez siga dando patadas de ahogado para postergar lo
más que pueda la aplicación de la sanción. Es de esperarse que cuando el Juzgado de
Distrito entre al fondo del asunto y resuelva, determine que no hay materia y
le negarán el amparo de protección, es decir, como en otras tantas instancias,
el edil perderá este asunto, aunque estará algunos meses al frente del Ayuntamiento. Es absurdo que sabiendo que cometió un delito
electoral, como ha sido señalado por diversas instancias legales, Mendoza
Godínez se niegue a aceptarlo y pagar las consecuencias. Todo lo hizo obedeciendo órdenes del entonces
candidato a la gubernatura, Jorge Luis Preciado, a quien no le importó
sacrificar a un compañero en la búsqueda de satisfacer su interés personal. Es un caso sobradamente analizado por
diversas autoridades judiciales –e incluso resuelto por la Suprema Corte de
Justicia de la Nación– y legislativas, que data de enero de 2016 y Rafael
Mendoza aún no quiere entender que cometió un delito electoral. No es aceptable que el Alcalde, su partido
(PAN) y el propio Preciado Rodríguez se hayan empecinado en registrarlo para
buscar la reelección, cuando había un proceso abierto en su contra que tenía
todos los elementos para que perdiera. Pero Mendoza Godínez ha mostrado, en varias
ocasiones, que el respeto a la ley no es lo suyo, por eso cometió el delito
electoral y también permite en su municipio el funcionamiento de los mototaxis,
que violan la Ley de Movilidad. Tampoco se entiende que los cuauhtemenses lo
hayan respaldado, sabiendo que pesaba sobre él ese Juicio Político y que era
muy probable su destitución e inhabilitación. Estaba y sigue en capilla, aunque
haya ganado un poco más de tiempo, pero a final de cuentas perderá. Finalmente, los habitantes de ese municipio
serán gobernados por Julio Borjas Cárdenas, suplente de Rafael Mendoza, quien,
al asumir el cargo, no debe dejarse manejar por aquél. Los regidores de oposición deberán estar al
pendiente de que Mendoza Godínez no quiera ser el poder detrás de Julio Borjas,
pues si tanto se ha aferrado a que no lo destituyan e inhabiliten, es capaz de
cualquier cosa con tal de seguir aferrado al erario y la función pública.
Incluso no será raro que cuando le nieguen el
amparo y proceda la sanción en su contra, vaya a usar otras marrullerías para
victimizarse, inclusive hasta ponerse en huelga de hambre afuera de Palacio
Municipal.