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Los rarámuris



PETRONILO VÁZQUEZ VUELVAS


Viernes 21 de Septiembre de 2018 7:46 am


HACE unos días, el gobernador del estado, José Ignacio Peralta Sánchez, dio a conocer la cartelera artística para el palenque y el Teatro del Pueblo en la edición 81 de la Feria de Todos los Santos. Es una cartelera de muy buena calidad y para todos los gustos. Fue confeccionada con mucho cuidado y tratando de satisfacer a todos los sectores sociales.

De entre las variedades que se anunciaron, quiero destacar dos que aluden a deportistas y artistas de origen rarámuri, la etnia que vive en condiciones desfavorables en lo alto y más inhóspito de las montañas de Chihuahua.

 

LOS PIANISTAS DE LA MONTAÑA

 

Romayno Wheller, pianista norteamericano, nació en Santa Elena, California, se formó en las mejores escuelas del mundo, como el Conservatorio de Viena; ha ofrecido conciertos en más de 50 países y en las principales salas de Europa; es concertista, maestro y filántropo. Llegó un día, desde su estudio en la iglesia Votiva de Viena hasta Retosachi, municipio de Batopilas, en Chihuahua. Primero vivió en una cueva y al filo de un acantilado hizo su estudio. Convivió con los tarahumaras y se identificó tanto con ellos, que se ganó el aprecio y cariño de toda la etnia. Formó una asociación civil con la que ayuda en la salud y educación de los niños tarahumaras; durante medio año ofrece conciertos para financiar su asociación y la otra parte del año lo pasa en la sierra. Un día, Juan Gutiérrez, el mejor violinista de la comunidad, le pidió permiso para, cuando tuviera un hijo, ponerle el nombre del músico. Él acepto, y cuando nació el niño le pusieron Romeyno (sic).

Al crecer el niño indígena, el maestro lo enseñó a tocar el piano, resultando con tanta vocación que pronto aprendió, y de la misma manera empezaron a recorrer su estado dando conciertos y asombrando por las virtudes de ambos. Romeyno tiene entre 27 ó 30 años, se presenta con su traje indígena y junto con su padrino han recorrido toda Europa. Estos músicos extraordinarios se presentarán el sábado 27 de octubre, a las 7 de la tarde, en el Teatro Hidalgo, en el marco de la Feria de Todos los Santos.

 

PIES LIGEROS

 

Ellos viven en lo más intrincado de la sierra, en un lugar llamado Ciénega de Noragachi, en el municipio de Guachochi. Su padre, Santiago Ramírez, se dedica a las labores del campo y el pastoreo. Tiene cuatro hijos: Mario, Lorena, Juana María y Talina; las mujeres apenas pueden hablar el español, don Santiago y Mario lo hacen con mayor fluidez y desde siempre les ha gustado correr, no por afición personal, sino porque el correr es parte de la cultura de su etnia y de su supervivencia.

Desde hace unos años han participado en diferentes carreras, maratones y ultramaratones en su estado y algunas partes del país y del mundo. Han ocupado puestos de privilegio en el pódium de los triunfadores, sin dejar de lado su humildad, pues corren con sus huaraches de plástico y su ropa de diario. El más reciente triunfo lo obtuvo Lorena, en el maratón de Tenerife, España.

Un ejemplo de vida y autenticidad en sus valores, han rechazado ofertas cuantiosas de diferentes marcas deportivas para continuar con su vida sencilla en la sierra de Chihuahua. Ellos van a estar aquí, en Colima, el 4 de noviembre, y correrán 10 kilómetros, partiendo de La Campana, en una carrera de exhibición. Así que, amigos deportistas, corredores y aficionados, no se pierdan de participar activos o espectadores en esta demostración de los pies ligeros en este impactante evento en el marco de la Feria de Todos los Santos. Pronto daremos el itinerario completo.

Esto son dos eventos que no se debe perder la familia, porque el ejemplo de vida de estos hombres y mujeres es una enseñanza palpable para nuestros hijos de cómo se puede triunfar por encima de todas las barreras físicas y culturales.