Colima, paraíso de la biodiversidad
Domingo 17 de Julio de 2016 10:18 am
+ -Recorrer Colima es también recorrer México
RECORRER Colima es también recorrer México, que además de sus tradiciones, cultura, gastronomía y la amabilidad de su gente, es también un museo vivo, a la vista de todos, por su biodiversidad.
Se ha reconocido que hay 17 países que guardan una vasta diversidad biológica en el mundo, entre ellos está México, y de nuestro país se desprende Colima, uno de los cinco estados de la República con mayor presencia de organismos biológicos y, en proporción, en algunos rubros, el que mayor especies registra por kilómetro cuadrado.
“Colima contiene una variedad de ecosistemas, dentro de un área restringida que lo hace idóneo para darle seguimiento y monitorear cómo se está usando la biodiversidad”, explica Miguel Ortega, investigador del Instituto Nacional de Biología de la UNAM, que a la par del investigador Manuel Balcázar, de la Universidad de Colima, coordinó la compilación, edición técnica y científica de la publicación que recabó estudios de 49 universidades e instituciones de México y el mundo, que han visto a Colima como un observatorio ambiental.
SÓLO .3 POR CIENTO DE LA SUPERFICIE DE MÉXICO
Colima, en cuanto a superficie, es el cuarto estado más pequeño del país, sólo después de la Ciudad de México, Tlaxcala y Morelos; un pequeño terruño que se pierde, en proporción, con los estados vecinos, Jalisco y Michoacán, así como por el Océano Pacífico, que limita con sus costas, pero donde se tienen contabilizados 6 mil 84 organismos vivos.
Uno de los factores que el investigador de la UNAM considera que permite la riqueza de especies en Colima es la cantidad de sub-climas, derivado de la pendiente que guarda desde el cono del Volcán de Colima hasta el nivel del mar.
“A pesar de comprender 0.3 por ciento de la superficie de México, sus climas facilitan la presencia de una importante diversidad de ecosistemas en los que habitan gran variedad de organismos. Colima se caracteriza por su importante exposición a fenómenos naturales, como sismos, erupciones volcánicas y huracanes, que pueden tener un impacto sobre la biodiversidad estatal”, destaca el texto de la publicación, en su presentación escrita por los científicos Andrea Cruz Angón y Héctor Perdomo Velázquez.
“Lo que tenemos en Colima difícilmente se puede encontrar en otras partes de México; podemos pasar rápidamente de los bosques de maderas finas, a las playas con organismos de selvas tropicales y zonas de manglar”, comenta Miguel Ortega, quien asegura que a partir de este documento, será posible generar una estrategia para conservar la biodiversidad del estado, que es la meta principal de la publicación impulsada por la Comisión Nacional para el conocimiento y uso de la Biodiversidad (Conabio) y el Gobierno del Estado.
En este sentido, para el Instituto de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable del Estado de Colima esta publicación y sus resultados representarán una herramienta para su seguimiento. “Es un trabajo muy valioso, porque ahora sabemos qué tenemos y dónde está lo que tenemos, y dónde nos hace falta trabajar más”, comentó Patricia Ruiz, directora del Imades.
SANTUARIO DE AVES, REPTILES Y MAMÍFEROS
De acuerdo a los resultados que se obtuvieron de esta compilación, destaca la importancia que tiene Colima para la conservación de especies migratorias, en el caso de las aves, y reporta que el 40 por ciento de las aves que hay en México, se pueden encontrar en nuestro estado.
“Sí es interesante ver que Colima contiene el 25 por ciento de las especies de mamíferos y el 40 por ciento de aves. Es una muestra de cómo un estado pequeño puede tener una muestra representativa de la biodiversidad de la región y, en este caso, del país”, expresó el académico de la UNAM, también integrante de la estación de biología Chamela, de la misma Casa de Estudios.
De esta forma se presentan datos importantes sobre la existencia de organismos vivos, y el porcentaje de representatividad a nivel nacional, como son el caso de las gramíneas, o hierbas como el sorgo, arroz, trigo y otra vegetación, con 22 por ciento, respecto al total nacional.
Trasciende el caso de las especies de mamíferos, que equivalen a 24.4 por ciento, es decir, una cuarta parte de éstas pueden encontrarse en Colima; dato similar al de las libélulas, que reportan que una de cada cuatro de las que habitan en México, viven en la entidad.
En cuanto a reptiles, 15 por ciento de las especies que existen en México habitan en Colima, destacando las poblaciones de tortugas, iguanas y cocodrilos.
Pero la cifra más relevante, que advierte de la importancia de la conservación de la biodiversidad en la entidad, es el dato que afirma que aquí se ha contabilizado el 40 por ciento de las especies de aves de México, que radican por temporadas, especialmente en las regiones de esteros en la laguna de Cuyutlán, pero también en zonas boscosas como la Sierra de Manantlán y las faldas del Volcán de Colima.
“Es importante identificar por qué tenemos ese avistamiento de aves. Somos un paso obligado de aves migratorias y la laguna de Cuyutlán es un lugar que se convierte de tránsito obligado que tienen de norte a sur”, platica sobre este tema la directora del Imades.
ÁREAS NATURALES PROTEGIDAS
A partir de los resultados de diversas investigaciones, Miguel Ortega reflexiona sobre la importancia que tiene el generar medidas que prevengan y anticipen daños a la biodiversidad, cuya principal amenaza sigue siendo la actividad humana.
“En un punto de vista muy personal, debe, Colima, su gobierno, su gente, alentar la creación de Áreas Naturales Protegidas desde el ámbito local. Por ahora sólo existen reservas con protección desde el aspecto federal, como el Volcán de Colima, cuya atención se da en Jalisco; la Sierra de Manantlán, que también comparte responsabilidades con esa entidad, y la laguna de Cuyutlán”, refiere Ortega.
Al respecto, Patricia Ruiz admite que no existe una legislación que contemple establecer Áreas Naturales Protegidas desde el ámbitolocal, ni se tiene considerada alguna. Lo que ha impulsado Gobierno del Estado ha sido generar áreas de conservación, para garantizar que el crecimiento urbano e industrial puedan tocar estas regiones.
Una de las ventanas de oportunidad que se abren, señalan los especialistas, es hacer posible que la gran riqueza biológica que tiene el estado pueda generarse en un polo de atracción turística e inversiones que apuesten a la sustentabilidad. Habrá que trabajar en ello.
