Por ataques informáticos, empresas italianas sufren daños millonarios
agencias
Sábado 20 de Mayo de 2017 5:42 pm
+ -Italia fue el décimo tercer país más afectado por el virus.
Aunque el ciberataque global de la semana pasada llegó desde un primer momento a Italia, no causó graves daños a los sistemas informáticos o las redes telemáticas del país europeo, cuyas empresas sufrieron en 2016 daños por nueve mil millones de euros por ese tipo de embates.
El Centro Nacional Anticrimen Informático para la Protección de las Infraestructuras Crípticas (CNAIPIC), dependiente de la policía postal, informó que, si bien el ataque con el virus “ransomware” llamado Wannacry afectó a Italia desde la tarde del 12 de mayo, los daños en realidad fueron limitados.
En una nota de prensa confirmó que analizaba constantemente el fenómeno e intensificaba el monitoreo y las medidas adecuadas para garantizar la máxima seguridad a las infraestructuras informáticas italianas.
Un reporte de la firma de seguridad digital Eset señaló que Italia fue el décimo tercer país más afectado por el virus, aunque en la nación europea los efectos no alcanzaron los niveles vistos en Reino Unido, donde puso en jaque al sistema de salud, o en Taiwán, en el que paralizó una central eléctrica.
Según la dirigente de la policía postal, Nunzia Ciardi, ese organismo ya había invitado varias veces a los ciudadanos a actualizar el sistema operativo de Windows, pues el “ransomware” se infiltra por dos fallas de Microsoft, por lo que es suficiente esa actualización para neutralizarlo.
Confirmó que hasta el 16 de mayo los “hackers” habían obtenido apenas 50 mil euros de rescate y, por lo tanto, es necesario entender cuál fue en realidad el objetivo de un ataque que provocó mucho clamor mundial, pero pocos resultados económicos.
Y es que el “ransomware” causa un secuestro exprés de datos y pide un rescate para liberar el sistema. Se propaga también a través del “phishing” (un modelo de abuso informático caracterizado por intentar obtener información confidencial de forma fraudulenta), por lo que Ciardi llamó a poner más atención en los correos electrónicos sospechosos.
Para el experto en seguridad cibernética, Andrea Zapparoli Manzoni, el ciberataque con el virus Wannacry hace pensar más bien en una acción de guerra psicológica que en un delito para obtener ganancias, pues respecto a las computadoras infectadas, la cantidad de dinero ganado por los “hackers” fue “rídicula”.
Dijo que una de las hipótesis es que la difusión del “malware” fue obra de un intento de guerra psicológica, para difundir incertidumbre e inestabilidad, aunque aclaró que llevará meses entender verdaderamente lo sucedido.
Un reporte del Instituto de Estudios Políticos Económicos y Sociales (Eurispes) señaló que en 2016 los ataques informáticos causaron daños por nueve mil millones de euros a las empresas italianas, pese a lo cual solamente 19 por ciento de ellas tiene una visión estratégica sobre la seguridad cibernética.
La Asociación Italiana para la Seguridad Informática (Clusit) confirmó que el año pasado Italia entró en la lista de las 10 naciones con mayor número de ataques cibernéticos y más víctimas.
Por su parte, un reporte del Banco de Italia subrayó que en el país de la bota una de cada tres empresas es o ha sido objeto de ataques informáticos y que las más afectadas son las de mayores dimensiones.
Consideró que las compañías grandes son apetitosas para los “hackers” porque manejan muchos datos, son conocidas, están mayormente conectadas a internet -con redes más amplias- y cuentan con alto número de proveedores externos que pueden tener acceso a sus infraestructuras tecnológicas.
Un factor a considerar es también el geográfico, dado que, en el sur, menos desarrollado, las posibilidades de ciberataques son menores y solamente 24.4 por ciento de las empresas declara haber enfrentado esa amenaza, contra 28.5 por ciento del noroeste, 32.5 por ciento del noreste y 35.3 por ciento del centro.
Ello, dijo el reporte, porque las compañías del sur tienden a contar con menores niveles de productividad, contenido de conocimientos y uso de la tecnología.
En el centro, en cambio, se registra el más alto porcentaje de ataques debido a que Roma es la sede de las más importantes empresas públicas, como las ferrovías o el sistema postal, que son las más apetitosas tanto porque operan en sectores estratégicos, como por sus dimensiones.
Existe también una relación entre los ciberataques y la internacionalización.
Según el informe, las empresas que exportan entre uno y dos tercios de su producción son mayormente afectadas pues pesa su exposición, ya que quien intercambia informaciones con socios internacionales tiene mayores probabilidades de convertirse en blanco de ataques informáticos.