Policía de Nicaragua reprime a opositores que pretendían protestar
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Domingo 14 de Octubre de 2018 8:48 pm
+ -La Policía de Nicaragua reprimió este domingo a un grupo de opositores y detuvo a cerca de 40 personas cuando pretendían protestar en las calles de Managua contra el presidente Daniel Ortega.
La Policía de Nicaragua reprimió este domingo a un grupo de opositores y
detuvo a cerca de 40 personas cuando pretendían protestar en las calles de
Managua contra el presidente Daniel Ortega.
El episodio, enmarcado en la crisis sociopolítica que vive Nicaragua
desde abril pasado y ha dejado centenares de muertos, fue repudiado por
organismos internacionales, que instaron a Ortega a respetar los derechos de
los ciudadanos y la libertad de manifestación.
Los hechos se produjeron, según constató Efe, cuando un grupo de
personas estaba a la espera de sumarse a una protesta convocada para este
domingo por la coalición opositora Unidad Nacional Azul y Blanco, que
finalmente no se realizó.
Decenas de agentes antimotines y policías se presentaron en el lugar y
comenzó un enfrentamiento con los opositores. La Policía confirmó en un
comunicado que detuvo a 38 personas, de las 8 ya fueron liberadas.
La institución indicó que “realiza las investigaciones para determinar
niveles de responsabilidad penal de los detenidos y los remitirá a las
autoridades competentes para su enjuiciamiento”.
Esta mañana se “garantizó el orden y la seguridad en la capital ante los
intentos de agrupaciones terroristas, golpistas y criminales que en los últimos
meses han estado desarrollando acciones que violentan la paz y la
tranquilidad”, aseguró la Policía.
Según pudo captar la prensa, los agentes policiales arrastraron a varios
de ellos hasta los vehículos de patrulla.
Entre los detenidos está la directora en Nicaragua de la ONG Techo
Internacional, Ana Lucía Álvarez, denunció la organización en un comunicado.
También fueron apresados Suyén Barahona y Ana Margarita Vigil, ambas del
Movimiento Renovador Sandinista (MRS); José Antonio Peraza, miembro del
Movimiento por Nicaragua, y Tamara Dávila, hija del fallecido coronel en retiro
Irwin Dávila, opositor al Gobierno.
Otro de los detenidos fue José Dolores Blandino, padre de Xiómara
Blandino, la actual pareja de Juan Carlos Ortega Murillo, hijo del presidente
Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo, quien es uno de los liberados según
informó la Policía.
El periodista Uriel Velásquez del rotativo local El Nuevo Diario,
también estuvo detenido y fue puesto en libertad.
Los “blanquiazules” prometieron seguir adelante con las protestas,
clamando a voces por una “Nicaragua Libre”, mientras la Policía reitera que no
va a permitir “manifestaciones o movilizaciones en la vía pública que no
cuenten con el debido permiso”.
Este sábado, la oposición suspendió movilizaciones en la región de
Blufields y en Managua, donde este domingo contingentes de agentes policiales
de operaciones especiales, antimotines y grupos afines al Gobierno se
desplegaron en distintos puntos.
En el lugar donde estaba previsto el comienzo de la marcha, cuyo lema
era “Unidos por la libertad”, también resultó lesionado Oswaldo Rivas,
fotógrafo de la agencia internacional Reuters, tras ser arrollado por un
paramilitar motorizado.
Este domingo, el secretario general de la Organización de Estados
Americanos (OEA), Luis Almagro, exigió a Ortega que libere a los manifestantes
detenidos, respete su derecho a la protesta pacífica y cese la “represión”.
El secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH), Paulo Abrão, lamentó los hechos y consideró “inaceptables” las
“actitudes represivas y autoritarias”.
El cardenal de Nicaragua, Leopoldo Brenes, también lamentó los choques
entre la Policía y manifestantes al señalar que “estas actitudes (…) no abonan
en nada a la paz” e insistir en la necesidad de un diálogo para superar la
crisis.
La mesa de diálogo entre la Alianza Cívica, compuesta por sectores
civiles, y el Gobierno de Ortega, está suspendida desde julio, después de que
grupos oficialistas agredieran a miembros del Episcopado que participan en
calidad de mediadores.
Nicaragua vive una crisis sociopolítica que comenzó en abril pasado y
que ha dejado según organizaciones humanitarias locales e internacionales entre
322 y 512 muertos, mientras que el Ejecutivo cifra los fallecidos en 199
fallecidos y denuncia un intento de golpe de Estado.
El 18 de abril pasado comenzaron las protestas contra Ortega por unas
reformas de seguridad social, anuladas en un intento por contener la crisis, y
que se convirtieron en la exigencia de la renuncia del mandatario.
Ortega rechaza las denuncias de abusos y asegura que la crisis es
impulsada por grupos a los que califica de “golpistas” y “terroristas”.