Juez impide libertad de Guillermo Padrés, ex gobernador de Sonora
Viernes 01 de Febrero de 2019 1:40 pm
+ -Un juez había otorgado la libertad para Padrés abandonara el Reclusorio Norte pero otro impidió su salida
Cuando
Guillermo Padrés podía quedar libre en el juicio por lavado de dinero, el juez
que le instruye el otro proceso por defraudación fiscal impidió su salida.
Ayer, los papeles se invirtieron.
En el juicio
por defraudación fiscal que se instruye en la Ciudad de México, el juez federal
Guillermo Urbina Tanús aceptó ayer la hipoteca de unos inmuebles por 100
millones de pesos, propiedad de familiares en Sonora y Baja California, para
que el ex Gobernador de Sonora abandone el Reclusorio Oriente.
Sin embargo,
Padrés no va a salir de la cárcel en las próximas horas porque Juan Miguel
Ortiz Marmolejo, juez de Toluca que lleva su proceso por lavado, canceló las
hipotecas que cubrieron la garantía de 40 millones y ordenó retirarle el
brazalete electrónico. Esta medida la tomó precisamente porque su homólogo no
lo dejaba salir.
El juicio
que instruye Urbina Tanús en el Juzgado Décimo Segundo de Distrito en Procesos
Penales Federales de la Ciudad de México había sido hasta el jueves el más
complicado para destrabar la liberación del ex Mandatario.
En un
proceso por defraudar al fisco con 70 millones de pesos, el juez le concedió
pasar de la prisión preventiva a la libertad provisional, a cambio de cubrir
una garantía de 100 millones de pesos.
Cuando Diego
Fernández de Cevallos ofreció la hipoteca de un inmueble de su propiedad en
Acapulco, valuado en 402 millones de pesos, Urbina la rechazó. Por eso algunos
familiares ofrecieron otros bienes que finalmente ayer fueron aceptados.
El problema
para Padrés es que hace unos días Juan Miguel Ortiz Marmolejo, Juez Séptimo de
Distrito en Procesos Penales Federales de Toluca, responsable del proceso por
lavado de 11 millones 186 mil 895 pesos, echó abajo todo lo que había hecho
para quedar libre.
Por un lado,
instruyó cancelar las dos hipotecas de 40 millones de pesos que habían
garantizado la libertad provisional, ya concedida, y ordenó el retiro del
brazalete electrónico que le habían colocado en el interior del Reclusorio
Oriente.
También dejó
sin efectos las medidas cautelares impuestas, es decir, la obligación de
presentarse quincenalmente en el juzgado para firmar el libro de procesados y
la prohibición para salir del País sin permiso del juez.
El juez
Ortiz decidió lo anterior porque, según su acuerdo, dichas medidas eran
ineficaces dado que en el otro juicio que se le instruye por fraude al fisco
aún no obtenía la libertad, situación que cambió ayer.
Para el ex
Gobernador y su libertad, ya concedida, ahora es un riesgo permanente el hecho
de que no estén empatados los plazos entre los dos jueces que llevan sus
procesos.
Esto porque,
eventualmente, Urbina también podría cancelar la hipoteca aceptada el jueves y
las medidas cautelares, argumentando que su colega Ortiz mantiene a Padrés sin
los trámites cubiertos para abandonar la cárcel.
Es decir,
podría repetir las mismas razones que alegó su homólogo.
No obstante,
su defensa puede hacer las promociones para volver a presentar en Toluca en el
menor tiempo posible las hipotecas y solicitar que otra vez le coloquen el
brazalete electrónico al ex Gobernador para hacer valer de nueva cuenta el
beneficio de la libertad que ya le fue concedido.
Si lo
anterior ocurre en el menor tiempo posible, la liberación de Padrés dependerá
de que Urbina Tanús permita a los abogados hacer sus gestiones en Toluca y no
cancele las medidas cautelares que estableció en la capital del País. Sólo de
esta manera Padrés podría abandonar el Reclusorio Oriente en los próximos días.