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Tarde gris y triste en la despedida de El Conde



Alberto Medina

Miércoles 13 de Febrero de 2019 10:35 am

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Brillan los caballos de Andy Cartagena, otorgan oreja; la falta de un buen alumbrado en el ruedo, empaña faena de Fabián Barba, le dan oreja


No quisiera ser pesimista, y nos gustaría reseñar otra cosa, pero ésta es la triste realidad de la fiesta de toros en La Petatera.

Había leído la columna de Armando Martínez de la Rosa, defendiendo los animales, y en este caso los toros de lidia, me animó a defender taurinamente a los seis astados de dos ganaderías con prestigio, nombre y fama. Pero no puedo defender lo indefendible, el ganado bravo mexicano se está extinguiendo, los toros de Fernando de la Mora y de Barralva, a pesar del peso y edad, hicieron brillar por su ausencia la casta, la bravura y el trapío.

En general, la lidia ha sido un desbarajuste total, los cuatro astados de Barralva llegaban menguados al último tercio y los estoqueadores no pudieron realizar más que trapazos y remedos de series desdibujadas ya con el capote o con la pañosa.

Hablemos de Andy Cartagena. El centauro Alicantino, cuyo nombre real es Andrés Céspedes González, encantó con siete jacas entre lusitanos, Árabes y Meñorquinos, destacando “Luminoso”, un caballo albino portugués que deleitó con sus bailes y atravesar y caminar sobre sus cuartos traseros parte del enorme ruedo petatero, rejones de castigo, banderillas cortas y largas, toreando a la grupa y templando al estribo, se ganó una oreja tumbada al segundo de su lote de nombre “Tequilero”.

Alfredo Ríos El Conde, vestido de obispo y oro, vino a triunfar y se fue en silencio en sus dos toros, su despedida del ruedo más grande del mundo, fue un desencanto para los aficionados que llenaron el tendido de La Petatera, y esperaban más de uno de los triunfadores de la Plaza México.

Fabián Barba, el hidrocálido que lució un terno azul turquesa y oro, enfrentó a “Don Memo”, un toro de 480 kilos que fue desperdiciado por su picador, llegando sin fuerza al último tercio y lo despacha con una defectuosa estocada.

En el último de la tarde, en total penumbra, con un público ajeno a su lidia, Fabián cuajó y ligó cortas, pero buenas series con la muleta, una faena que si hubiese habido una buena iluminación, otra cosa hubiera sucedido. El toro de nombre “Memo Mena”, un negro zaino de 420 kilos, realizó la faena ya descrita líneas arriba, mucho que desear dejó.

Un tipo al que le gritaban ¡torero! en los tendidos y con micrófono y cámara de una televisora de la Ciudad de México arengaba a los asistentes a la plaza, mientras el matador en el ruedo arriesgaba la vida, e ignoraba la buena faena de Fabián Barba.

De por si, nos falta mucha afición real por la fiesta brava y con estos espectáculos extrataurinos, le dejamos un mal ejemplo a tanto aficionado taurino que nos visitan de muchas partes, por lo menos, cuando salía de la plaza, dieron quejas sobre la falta de seriedad dentro de una corrida formal.

Finalmente, un homenaje y reconocimiento a los Forcados Mazatlecos, que enfrentaron a un toro de más de 500 kilos, no lograron ni una pega y sí un saldo de cuatro lesionados.

El próximo martes 19, un cartel modesto del que esperamos que los toros de San Miguel Mimiahuapan den juego y hagan lucir a El Zapata, al español Antonio Ferrara y la alternativa de matador de Carlos Rodríguez.

Roberto GEORGE GALLARDO



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