Los humanos orillan al borde de la extinción a un millón de especies
Lunes 06 de Mayo de 2019 2:01 pm
+ -La reducción del hábitat, el cambio climático y la contaminación amenazan a más del 40% de los anfibios, al 33% de los arrecifes y a más de la tercera parte de los mamíferos marinos
Un millón de
las ocho millones de especies del planeta están en peligro de extinción por
culpa de los humanos, así lo advirtieron científicos este lunes en el estudio
más completo sobre la pérdida de flora y fauna que se ha hecho hasta ahora.
Su informe
histórico pinta un panorama sombrío de un planeta saqueado por la población
humana cada vez más abundante y cuyo consumo insaciable destruye el mundo
natural.
El ritmo
mundial de extinción de especies "ya es cientos de veces mayor de lo que
ha sido, en promedio, en los pasados diez millones de años", según la
Plataforma Intergubernamental Científico-normativa sobre Diversidad Biológica y
Servicios de los Ecosistemas (IPBES), una comisión de la ONU en cuyo informe
intervinieron 145 expertos de 50 países.
La reducción
del hábitat, la explotación de los recursos naturales, el cambio climático y la
contaminación son las principales causas de la pérdida de especies y amenazan a
más del 40% de los anfibios, al 33% de los arrecifes de coral y a más de la
tercera parte de todos los mamíferos marinos, según el informe de la IPBES.
"La
salud de los ecosistemas de la que dependemos nosotros y las demás especies se
deteriora más rápido que nunca", dijo Sir Robert Watson, presidente de la
IPBES. Agregó que se necesitan "cambios transformadores" para salvar
al planeta.
El informe
se presentó seis meses después de que el Grupo Intergubernamental de Expertos
sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) advirtiera que el
mundo tiene menos de doce años para evitar niveles catastróficos de
calentamiento global.
Así como el
informe del IPCC dio relevancia política a la crisis climática, los autores del
informe de la IPBES esperan que el mundo preste atención a la pérdida de flora
y fauna.
LA GESTIÓN DE LA TIERRA
El informe indica
que, como pasa con el cambio climático, los humanos son los principales
causantes del daño a la biodiversidad, de la alteración del 75% de los
ecosistemas terrestres y el 65% de los ecosistemas marinos desde tiempos
preindustriales.
En el
informe se enfatiza el impacto desastroso del crecimiento de la población y del
aumento de la demanda. Se señala que la población del mundo ha aumentado más
del doble en los pasados 50 años (de 3,700 millones a 7,600 millones) y que el
producto interno bruto por persona es cuatro veces mayor.
El informe
añade que más de una tercera parte de las tierras y del 75% de los suministros
de agua dulce se usan para producción agrícola o ganadera.
"En el
planeta queda poco que no hayamos alterado considerablemente", dijo a CNN
Sandra Díaz, coautora del informe y profesora de Ecología de la Universidad de
Córdoba. "Tenemos que actuar como guardianes de la vida en la
Tierra".
Díaz dijo
que los países del hemisferio norte son particularmente responsables del daño a
la naturaleza por sus niveles "insostenibles" de consumo,
particularmente en la pesca y la tala.
En 2015, se
pescaba una tercera parte de las reservas marinas a niveles insostenibles; la
producción de madera aumentó casi la mitad desde 1970 y la tala ilegal
representa hasta el 15% de dicha producción, según el informe.
La
contaminación del mar por plásticos ha incrementado diez veces desde 1980: en
promedio los mares reciben entre 300 y 400 toneladas de desechos al año.
La
contaminación que entra a los ecosistemas costeros ha generado más de 400
"zonas muertas" en los océanos que en total tienen una superficie
mayor a la de Reino Unido. En estas áreas falta tanto el oxígeno que apenas
pueden sostener la vida marina.
CIFRAS CLAVE DEL INFORME
Alrededor
del 10% de las especies de insectos está en peligro de extinción.
La
producción de cultivos alimentarios ha incrementado un 300% en todo el mundo
desde 1970.
En el 23% de
las zonas agrícolas se han reducido la productividad por la degradación de la
tierra.
Alrededor
del 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero son consecuencia del
desmonte, la agricultura y la fertilización.
Alrededor de
la mitad de los arrecifes de coral vivos se ha perdido desde la década de 1870.
Las áreas
urbanas han crecido más del 100% desde 1992.
Se espera
que para 2050 haya 25 millones de kilómetros más de caminos pavimentados.
NO ES DEMASIADO TARDE
Pese al
panorama poco alentador, "no es demasiado tarde para hacer la diferencia,
pero solo si empezamos ahora, en todos los niveles, desde el local hasta el
global", dijo Watson, quien agregó que para esto se necesitaría un cambio
en los sistemas económicos y una transformación en la mentalidad política y
social.
Díaz señaló
que los gobiernos deberían implementar cambios drásticos ahora para evitar un
"futuro funesto" dentro de diez o veinte años, cuando "su
seguridad alimentaria y climática esté en juego".
El cambio
climático ha contribuido a la pérdida de biodiversidad porque desencadena
eventos climáticos más extremos y aumenta el nivel del mar; la crisis se
exacerbará en las próximas décadas, según el informe.
En el
informe se señala que podemos mejorar la sostenibilidad en la agricultura a
través de la planificación, con el fin de que los terrenos proporcionen
alimentos mientras sostienen a las especies que los habitan. Entre otras de las
recomendaciones está la reforma de las cadenas de suministro y la reducción del
desperdicio de alimentos.
Para tener
océanos saludables, en el informe se recomienda implementar cuotas de pesca
efectivas y áreas protegidas, así como reducir la contaminación que escurre de
la tierra al mar, entre otras acciones.
Rachel Warren,
profesora de Cambio Global y Biología Ambiental de la Universidad de East
Anglia, dijo a CNN que los gobiernos deberían centrarse en "la
restauración de los ecosistemas destruidos o degradados con especies nativas
[porque esto] sirve para abordar tanto la pérdida de biodiversidad como el
cambio climático".
"La
biodiversidad sostiene servicios de los ecosistemas como la polinización, la
prevención de inundaciones, la purificación del agua y el aire y la
conservación del suelo. Estamos en peligro de perder sistemas de ecosistemas
vitales, lo que tendrá consecuencias negativas importantes para la civilización
humana", añadió.
Guenter
Mitlacher, director de Regulación de la Biodiversidad Internacional del Fondo
Mundial para la Naturaleza (WWF), dijo: "Nuestra generación es la primera
que tiene las herramientas para ver cómo la gente ha cambiado la Tierra en su
prejuicio. Somos también la última generación que tiene la oportunidad de
influir en el curso de muchos de esos cambios. Este es el momento de actuar, no
a medias y poco a poco, sino drástica y audazmente".
El informe
de la IPBES precede a dos cumbres de alto nivel que se celebrarán en 2020, en
las que los líderes mundiales incrementarán sus objetivos para el clima y la
protección al ambiente. China será la sede de la convención de la ONU sobre biodiversidad
en la que se establecerán objetivos a 20 años y en la que los signatarios del
Acuerdo de París de 2015 revisarán sus compromisos para mantener el
calentamiento global por debajo de los dos grados Celsius.