Paramédica de Cruz Roja pide justicia

Viernes 21 de Junio de 2019 8:08 am

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Luego de trabajar 12 años en la Cruz Roja Manzanillo, María de Jesús Morán Álvarez señala que fue despedida de manera injustificada, por lo que pide a las autoridades laborales se haga justicia en su caso

Luego de trabajar 12 años en la Cruz Roja Manzanillo, María de Jesús Morán Álvarez señala que fue despedida de manera injustificada, por lo que pide a las autoridades laborales se haga justicia en su caso.
Entrevistada por la Subdirectora General de Diario de Colima, Patricia Sánchez Espinosa, Morán Álvarez pidió justicia y revisión de las autoridades de la Junta de Conciliación y Arbitraje de Manzanillo.
María de Jesús Morán se desempeñó como coordinadora local de Socorros, y luego paramédico de la Benemérita institución, pero el 12 de noviembre de 2017, ella y una amiga –asegura- fueron despedidas injustificadamente.
“Tenemos audios, videos, oficios, todo para comprobar que violaron nuestros derechos como voluntarios de Cruz Roja, como personas”, aunque no los presentó en la demanda, la prueba está ofrecida.
Por los hechos, interpusieron una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia (hoy Fiscalía General del Estado), por agresiones y amenazas; otra demanda en la Junta de Conciliación y Arbitraje de Manzanillo, por despido injustificado.
En la Procuraduría la valoración psicológica salió a su favor, y el siguiente paso era llamarlas para su declaración, pero el expediente quedó abierto, por así convenirle a ella.
Mientras, en la demanda laboral, durante un año y 8 meses, ellos no se presentaron en el proceso, en septiembre se dictaría el laudo, pero en enero de este año les dijeron que no podían hacerlo por falta de personal, que fueran a mediados de marzo.
“No se dictó el laudo, Cruz Roja Manzanillo se enteró que habían perdido la demanda por rebeldía, me hablan por teléfono que me presentara en la delegación para ver cuánto se debía, pero no hicieron nada”, indicó.
Posteriormente, la resolución determinó que tendrían que reiniciar la demanda, porque no se señalaba a que se dedicaba el patrón, lo cual el abogado consideró una anomalía, y le recomendó no reiniciar la demanda y no firmar nada.
Además, “metimos un amparo indirecto, pero mi amparo lo desecharon y el de mi amiga lo aceptaron, aunque eran iguales”. El de su amiga entró en el Juzgado 1º, y él de ella en el 3º.
Luego de que le desecharon el amparo, interpuso una queja en el Tribunal Colegiado, y está en espera de la respuesta, pero puede tardar meses. Sin embargo, a partir del 10 de mayo, le asignarán al magistrado que resolverá la queja, en caso que deseche la queja tendrá que reiniciar la demanda.
Acusó que hay falta de profesionalismo de la Junta de Conciliación y Arbitraje, “todo el tiempo están comiendo, planchándose el cabello, comprando ropa, no tienen tiempo para esto y para lo otro sí, 6 meses para dictar un laudo, no lo hace y saca una resolución a favor del patrón, lo cual es inexplicable”.
Sostuvo que varios voluntarios han renunciado por descuentos injustificados, porque si se enferman les descuentan el día y otras violaciones a sus derechos, por lo que pide que las autoridades realicen su trabajo con profesionalidad e imparcialidad, permitiéndole el acceso a la justicia.

Elena DEL TORO

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