EU vincula a García Luna con ex policía protector de los Beltrán Leyva
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Viernes 24 de Enero de 2020 5:15 pm
+ -Iván Reyes Arzate, “La Reina”, excomandante de la Policía Federal condenado en Chicago por pasar información al cártel de los Beltrán Leyva.
El caso del
exsecretario mexicano de Seguridad Pública, Genaro García Luna, ante la
justicia de Estados Unidos implicó todavía más al exfuncionario con una trama
delictiva para favorecer a los cárteles narcotraficantes.
La madrugada
del viernes, la fiscalía de EU vinculó a García Luna con las actividades
criminales de Iván Reyes Arzate, "La Reina", ex comandante de la
Policía Federal condenado en Chicago por pasar información al cártel de los
Beltrán Leyva.
El gobierno
estadounidense apuntó en un documento judicial que García Luna supervisaba,
entre otros, la unidad especial de la polícia federal mexicana entrenada por la
Agencia Antidrogas de EU (DEA), que comandaba Reyes Arzate. Por tanto, ambos
casos de corrupción y colusión con los cárteles narcotraficantes están
relacionados.
El jueves se
reveló que Reyes Arzate tiene un caso pendiente en la corte del distrito este
de Nueva York, acusado de tres delitos por tráfico de cocaína, y que muy
probablemente que serán juzgados en la misma corte que García Luna y, también,
Joaquín "El Chapo" Guzmán.
Reyes Arzate
está actualmente cumpliendo condena en Estados Unidos por pasar información de
la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) al cártel de los Beltrán Leyva. A
pesar de que la fiscalía pedía 10 años de cárcel, en noviembre de 2018 fue
condenado a solo 3 años de prisión.
Entretanto,
García Luna sigue bajo custodia de los Estados Unidos después de su detención
en Dallas (Texas) y su posterior traslado a una cárcel de Nueva York. Esta
semana, tras una audiencia previa a juicio celebrada en Brooklyn, su abogado de
oficio, César de Castro, aseguró que no están negociando con el gobierno un
acuerdo de culpabilidad y que la intención de García Luna es ir a juicio sin
aceptar su responsabilidad en los cuatro delitos (tres por narcotráfico, uno
por falsedad de declaración) que se le imputan, y que podrían condenarle a
entre 10 años y cadena perpetua.
Reyes Arzate, un protector de los Beltrán
Leyva
En el 2018,
Un juez federal en Chicago sentenció a más de tres años de prisión a Iván Reyes
Arzate, ex comandante de una unidad de inteligencia mexicana que fue declarado
culpable de compartir secretos de investigadores estadounidenses a capos de la
droga en México, una traición que, según declaró un agente de la DEA ante la
corte, echó abajo pesquisas sobre narcotráfico y costó vidas.
Iván Reyes
Arzate, de 46 años, era el principal contacto para intercambiar información
entre las agencias estadounidenses y la Policía Federal mexicana. Arzate
utilizó información de inteligencia de Estados Unidos para ayudar a revelar la
identidad de un informante del cártel, quien posteriormente fue torturado y
asesinado, de acuerdo con los fiscales.
Arzate se
entregó a las autoridades estadounidenses en 2017 y en mayo cambió su
declaratoria de inocente a alguien que prefiere abstenerse de responder a las
acusaciones de obstrucción y de conspirar para obstruir la justicia.
Sergio
Villarreal Barragán, alias "El Grande", quien por mucho tiempo fue
confidente de los líderes del cártel de los Beltrán Leyva, testificó en la
audiencia de sentencia del jueves. Ante el juez federal de distrito Harry
Leinenweber, Villarreal describió la forma como los grupos criminales se apoyan
fuertemente en policías corruptos como Arzate para expandir sus operaciones
ilegales y vencer a sus rivales.
Barragán
cumple una sentencia por cargos federales de narcotráfico después de aceptar
cooperar con agentes de Estados Unidos.
Dijo que era
común que los cárteles tuvieran a policías federales de México en sus nóminas,
y que con frecuencia los sobornaban para que los operativos policiacos se
realizaran contra grupos rivales.
Joseph Lopez,
abogado de Arzate en Chicago, le preguntó en un momento dado si los pagos
"llegaban hasta arriba en la cadena, casi hasta el presidente".
"Sí, señor", respondió Barragán. "Así es como lo hacen".
Los fiscales en Estados Unidos interrogaron en
aquel momento a varios testigos durante una audiencia de cinco horas en un
intento por respaldar sus argumentos de que Arzate merecía una sentencia en
prisión de 10 años.
La fiscal
Katherine Sawyer dijo a la corte que la sentencia que la defensa pretendía, 17
meses de prisión, equivaldría a un darle "un manotazo".
En una
declaración al juez, Arzate defendió su labor policial, pero Leinenweber lo
interrumpió en cierto momento para preguntarle: "¿Es su postura afirmar
que usted no hizo absolutamente nada malo?"
Si bien
Arzate aseveró que era no era su postura, nunca admitió haber cometido un
delito ni ofreció disculpas durante su declaración de 10 minutos.
El juez dijo
que algunas partes de la declaratoria de Arzate le parecieron
"inquietantes", pero agregó que la sentencia de 10 años recomendada
por la fiscalía era "demasiado alta".
El agente de
la DEA Matthew Sandberg, quien llegó a trabajar con Arzate en México, testificó
con un tono parco y prosaico durante la mayor parte de su tiempo en el estrado
el jueves. Pero se le quebró la voz cuando empezó a describir la manera en que
la divulgación de Arzate a quien llegó a considerar un amigo puso en peligro la
vida de agentes como él e incluso de sus familias.
"Esas
cosas no pueden pasar a menos que haya agentes corruptos", afirmó Sandberg
en aquel momento.