Dolor y muertos en las calles; Guayaquil está en “shock” por Covid-19
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Jueves 02 de Abril de 2020 9:23 pm
+ -Ecuador registra 2,800 contagios, incluidos 98 muertos; la paralización detuvo el trabajo de cementerios y funerarias.
Rosa se quedó
con el cuerpo de su esposo en casa por un día antes de lograr que lo retiraran.
En las calles también los cadáveres esperan. La pandemia trastocó el trato a
los muertos en Guayaquil, alimentando la sensación de horror en la ciudad más
poblada de Ecuador.
El puerto de
Guayaquil tiene la mayor tasa de mortalidad del país por la Covid-19 y la más
alta de Latinoamérica: 1.35 muertos por cada 100,000 habitantes, por encima de
la de Sao Paulo (0.92), según el médico salubrista Esteban Ortiz, de la
Universidad de las Américas de Ecuador.
En medio del
avance de la enfermedad, que en todo Ecuador deja casi 2,800 contagios,
incluidos 98 muertos -la peor estadística regional después de la de Brasil-,
Rosa Romero enfrentó la pérdida de su pareja, Bolívar Reyes, aparentemente por
un infarto no relacionado con el virus.
La ama de
casa de 51 años debió esperar hasta el día siguiente del deceso para que el
servicio forense retirara el cadáver de su vivienda. Una semana después, no
sabe dónde está.
“En
criminalística nos dijeron que lo habían llevado al Hospital del Guasmo, fuimos
a averiguar, pero no estaba registrado por ningún lado”, dijo Romero a la AFP.
El toque de
queda de 15 horas que rige en esta ciudad de 2,7 millones de habitantes le ha
dificultado todavía más la búsqueda.
La
paralización detuvo el trabajo de cementerios y funerarias, que además se
muestran reacias a lidiar con los muertos en sus viviendas por miedo a que
hayan perecido por el nuevo coronavirus y sean fuente de contagio.
Las autopsias
están restringidas y en un principio el gobierno, que también prohibió los
tradicionalmente concurridos ritos funerarios, optó por imponer la cremación de
las víctimas de la enfermedad, pero debió dar marcha atrás ante las críticas
recibidas.
La pandemia “complicó
el funcionamiento del sistema mortuorio de la ciudad, es entendible cuando
existe un incremento de fallecidos, una limitación de personas para poder
trabajar en todos los sectores”, reconoció el portavoz oficial Jorge Wated.
CRUZADA POR LOS MUERTOS
El virus está
castigando con fuerza a la provincia de Guayas y su capital, Guayaquil, donde
se concentra el 70% de los casos y más de la mitad de los 98 fallecidos del
país. En todo el planeta se cuentan cerca de un millón de infectados y más de
47,000 muertos.
El sistema de
salud de Guayaquil está bajo máxima presión mientras su alcaldesa, Cynthia
Viteri, cumple con la cuarentena tras haber contraído el virus.
Al mismo
tiempo se viralizan videos que muestran a gente con tapabocas desplomándose o
cuerpos botados en las vías.
El pánico ha
dado paso a una sensación de horror por el trato que están recibiendo los
cuerpos en esta calurosa y húmeda ciudad, en medio de la desinformación e
imágenes sin filtro que se propagan por redes sociales más rápido que la
enfermedad.
Blanca
Moncada, una periodista de 31 años del diario Expreso de Guayaquil, se hizo eco
del drama de los muertos desamparados. Lanzó una campaña en Twitter y en dos
días ha difundido 50 casos, aunque no se sabe cuántos están relacionados con la
pandemia.
“Recibíamos
videos, fotografías, videos de desesperación, audios de desesperación, llamadas
de desesperación de personas, ciudadanos guayaquileños que querían que sus
muertos sean recogidos”, dijo a la AFP.
El gobierno
de Lenín Moreno activó una fuerza compuesta por militares y policías para que
se ocupe de la gestión de los cadáveres en Guayaquil. Entre lunes y miércoles
levantó 150 cuerpos que yacían en casas.
LO PEOR ESTÁ POR VENIR
Los
guayaquileños están en “shock”, dice a la AFP Pablo Andrade, experto en
política pública de la Universidad Andina Simón Bolívar. Y todo por “la
displicente, humillante forma con la que el gobierno central ha tratado el
asunto” de los cuerpos.
Hasta marzo
se contaban unos 35 muertos diarios en Guayaquil por múltiples causas, y por la
emergencia “ha habido retardo en la recogida de los cuerpos”, admitió el
ministro de Salud, Juan Carlos Zeballos.
Eso, según el
funcionario, alimentó la sensación de que los muertos están aumentando
exponencialmente en plena emergencia sanitaria.
Pero lo
cierto es que por primera vez pasaron días antes de que decenas de cuerpos
fueran sacados de las viviendas.
En un mensaje
público, Wated pidió “disculpas” a las familias y advirtió que lo peor está por
venir: “Los expertos médicos lamentablemente nos han dicho y estiman que
fallecidos en estos meses llegarán a entre 2.500 a 3.500 por Covid, solo en la
provincia del Guayas. Para eso nos estamos preparando”.