Mueren dos adultos mayores de un asilo de Nuevo León tras complicaciones derivadas por el COVID-19
Lunes 11 de Mayo de 2020 9:50 am
+ -Murieron dos adultos mayores en un asilo de ancianos en Guadalupe, Nuevo León, a causa del COVID-19, confirmó la Secretaría de Salud estatal
La Secretaría de Salud de Nuevo León informó de la muerte de dos de los 47 residentes del asilo de ancianos ubicado en el municipio de Guadalupe tras permanecer hospitalizados tras las complicaciones derivadas del coronavirus COVID-19.
“Dos pacientes que fallecieron pertenecían al asilo de Guadalupe. Los pacientes que fallecieron del asilo, es un paciente masculino de 76 años de edad, falleció en el hospital Metropolitano, con antecedentes de hipertensión y diabetes y una paciente femenina de 92 años con antecedente de hipertensión y falleció en el IMSS, son los dos pacientes”, detalló el secretario de Salud de Nuevo León, Manuel de la O. Cavazos.
Agregó que hay un total de 66 casos confirmados de dicho refugio, de los cuales 47 son residentes y 19 empleados del lugar. Tres están en situación crítica.
La dependencia informó que, en 24 horas, se confirmaron 38 contagios más de COVID-19 y cuatro pacientes fallecieron, con lo que suman 647 casos confirmados y 37 muertes por la enfermedad en la entidad.
De la O Cavazos detalló que hay otros 340 casos confirmados en laboratorios y 67 en hospitales privados, que aún no son confirmados por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDre).
Hay, además, 33 casos considerados como sospechosos, quienes presentan síntomas similares a los de esta enfermedad pero están a la espera del resultado de sus exámenes clínicos.
El grupo de mayor contagio continúa siendo el de 25 a 44 años.
El funcionario explicó que el 60 por ciento de los casos confirmados se ha recuperado, mientras que el 40 por ciento continúa con su tratamiento.
El 89 por ciento lleva un tratamiento ambulatorio y el 11 por ciento se encuentra en hospitalización.
Sobre las cuatro defunciones, dijo que se trata de tres hombres de 57, 76 y 52 años y una mujer de 92 años. Todos ellos tenían antecedentes de hipertensión y diabetes.