Huracán “Iota” azota Nicaragua y ahora avanza hacia Honduras
Martes 17 de Noviembre de 2020 11:40 am
+ -El huracán 'Iota' toca tierra como huracán de categoría 4 en Nicaragua, y ahora se mueve tierra adentro hacia Honduras con fuerza de categoría 1
Iota mantenía vientos con fuerza de huracán de categoría 1
este martes por la mañana y se movía tierra adentro sobre el norte de Nicaragua
con vientos máximos sostenidos de 135 kilómetros por hora.
Se espera que la tormenta atraviese el sur de Honduras el
martes por la noche.
Iota tocó tierra como una peligrosa tormenta de categoría 4
a lo largo de casi exactamente el mismo tramo de la costa caribeña de Nicaragua
que fue devastada por el poderoso huracán Eta 13 días antes.
Iota se había intensificado hasta convertirse en una
tormenta de categoría 5 extremadamente peligrosa durante el lunes, pero el
Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que se debilitó levemente a
medida que se acercaba a la costa el lunes por la noche y tocó tierra con
vientos máximos sostenidos de 250 kph.
Golpeó la costa a unos 45 kilómetros al sur de la ciudad
nicaragüense de Puerto Cabezas, también conocida como Bilwi.
Iota llegó a la costa a solo 25 kilómetros al sur de donde
el huracán Eta tocó tierra el 3 de noviembre, también como una tormenta de
categoría 4.
Las lluvias torrenciales de Eta saturaron el suelo de la
región, dejándolo propenso a nuevos deslizamientos de tierra e inundaciones,
advirtieron los meteorólogos.
“La situación se ve exacerbada por el hecho de que 'Iota'
toca tierra en casi el mismo lugar donde lo hizo el huracán 'Eta' de categoría
4 hace menos de dos semanas”, indicó el Centro de Huracanes en un comunicado.
Eta mató a más de 130 personas en la región debido a que las
lluvias torrenciales provocaron inundaciones repentinas y deslizamientos de
tierra en partes de América Central y México.
“Este huracán es definitivamente peor (que Eta)", dijo
Jason Bermúdez, un estudiante universitario de Bilwi, mientras los vientos
rugían antes de que Iota llegara a tierra.
“Ya hay muchas casas que perdieron sus techos, cercas y
árboles frutales que fueron derribados”, dijo Bermúdez.