A un año de la pandemia, Wuhan recupera su festival de los cerezos en flor
Lunes 22 de Marzo de 2021 11:04 am
+ -Un año después del inicio de la pandemia de COVID-19, habitantes y turistas vuelven a disfrutar en Wuhan del festival de los cerezos en flor
Un año después del primer confinamiento mundial por
COVID-19, la ciudad china de Wuhan, en la que se registró el primer brote de la
enfermedad que causó la pandemia, puede celebrar de nuevo su festival de los
cerezos en flor, una de sus señas de orgullo.
En total, en la ciudad hay más de 500 mil cerezos, aunque
los turistas suelen elegir dos parques en concreto para pasear entre ellos: el
de la Universidad de Wuhan y el del Lago del Este.
En el parque del Lago del Este, cuyos responsables aseguran
que está a la altura del de Hirosaki (Japón) y el de Washington merced a sus 10
mil cerezos repartidos en más de 28 hectáreas, cientos de personas se dieron
cita pese a la fría bruma matinal y a una llovizna que hizo que los árboles
perdieran pétalos más rápido de lo habitual.
La ocasión lo merecía: Wuhan sufrió uno de los
confinamientos más estrictos del mundo desde el 23 de enero al 8 de abril del
año pasado, por lo que sus habitantes se quedaron sin celebrar el Año Nuevo
lunar, la principal festividad del año en el país, y el festival de los cerezos
en flor, su orgullo local.
El año pasado los árboles solo recibieron visitas virtuales,
con más de 4.5 millones de personas participando del primer día de una serie de
emisiones en directo en las que los internautas de otras partes del país menos
afectadas quisieron enviar mensajes de ánimo a los wuhaneses.
Y los pasados 13 y 14 de marzo, con el virus como un amargo
recuerdo por el que los habitantes de la ciudad no quieren volver a pasar, los
parques de la ciudad quisieron homenajear a los médicos que acudieron a ayudar
en los primeros compases de la pandemia con visitas especiales a los cerezos en
flor.
La directora del parque del Lago del Este, Zou Hui, explicó
a Efe que estas flores no solo son un anuncio de la llegada de la primavera
sino que, con ello, también “representan la esperanza”.
El año pasado, muchos chinos mostraron en redes sociales su
intención de visitar Wuhan para ayudar a la recuperación económica de la
ciudad, y Zou explica que en su parque ya están recibiendo hasta 80 mil
visitantes al día con el florecer de los árboles.
Lejos de allí, más de 50 cerezos adornan el jardín del
antiguo hotel Qingchuan -hoy controlado por la cadena estadounidense Holiday
Inn-, el primer hotel que aceptó extranjeros en Wuhan.
Wallace Wang no solo es el gerente del establecimiento sino
que él mismo fue quien plantó, en 1983, algunos de esos árboles que reinan
sobre una histórica colina situada a orillas del imponente río Yangtsé.
“Todos los años tenemos muchos turistas que vienen a Wuhan
para ver los cerezos. Los fines de semana tenemos en el hotel una (tasa de)
ocupación del 60 o el 70 por ciento. Es muy importante para nosotros”,
reconoce.
Wang asegura que la llegada de turistas desde otras partes
de China ya está en cifras de hace dos años y se muestra “optimista”:
“Personalmente, tengo confianza en que vayamos a mejor a pesar de haber pasado
por tiempos duros el año pasado”.