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Instrucciones para un día de campo



Domingo 25 de Julio de 2021 6:39 am

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VACACIONES o no, para unos y otros, el día de campo se puede llevar a cabo en sábado o domingo. La pandemia no impide buscar lugares abiertos, al contrario, es lo recomendable, y entre más lejos de las personas, mejor.
LUZ Y LLANURA
Un día de campo es una expresión que abarca luz y llanura, y es una práctica tan antigua como el ser humano, desde las cavernas, cuando después de la caza se reunían alrededor del fuego en un espacio al aire libre.
La palabra día proviene del latín dies y este de la raíz indoeuropea dyeu (dios de la luz del día-cielo), por lo tanto, aunque el día tiene 24 horas, mañana, tarde y noche, el día de campo se refiere a la parte en la que hay luz.
Pronunciar la palabra campo (campus) es tan inmenso como su significado del latín, llanura, terreno plano de grandes dimensiones que se encuentra alejado de una ciudad o de un pueblo. Entre el cielo y la tierra: los campistas. Por lo tanto, se descartan techumbres, terrazas, sillas o cualquier elemento que se interponga en la unión de los humanos con la naturaleza.
Lo único que se podría considerar es una manta, colchoneta o cobija donde se colocarán los alimentos y será el asiento de los asistentes, es un elemento tradicional, pero tampoco infaltable.
DESTINO Y COMPAÑÍA
Un día soleado es el mejor clima. No lo piense dos veces y váyase de inmediato hacia el norte de Comala, busque el árbol más frondoso para evitar los fuertes rayos del sol y aminorar el intenso calor. Si amanece nublado, el espacio a elegir será menos complicado, con el cielo de cubierta. Si llueve diríjase a los árboles, y si hay truenos, métase al automóvil. Si andan a pie, alcanzar algún resguardo o simplemente déjese ir directo al pasto y mójese mientras ve el juego de luces.
Lo primordial en los días de campo es la compañía. Ante el contexto de la pandemia, por lo pronto se recomienda que sea sólo familia, si acaso se piensa invitar a alguien más externo, debe hacerse con rigurosa selección y aplicando los protocolos sanitarios.
¿Cómo elegir a los acompañantes? Primero debe asegurarse que no sean quisquillosos, es decir, que no sean delicados por el entorno agreste o la falta de confort de un restaurante. Segundo, es importante que se tenga una entera disposición a pasar el rato alegres, no se admiten tristezas o angustias, y menos a pendencieros. Si desean llevar juegos de mesa como baraja, dominó, ajedrez u otros, es opcional. Debe quedar claro que lo más importante es la charla, la risa, la convivencia familiar y el regocijo de compartir unos con otros. Cubriendo estos dos puntos, casi se garantiza que el día de campo será placentero.
¿A dónde ir? Gracias a nuestra rica geografía, hay una gran variedad de opciones, por lo que no tendrá que ir tan lejos. En Comala hay infinidad de lugares campestres, lo mismo Cuauhtémoc, Minatitlán, Tecomán, Coquimatlán, en todos los municipios. Si no desea manejar fuera de su ciudad, los parques y jardines arbolados y con pasto son otra alternativa.
¿Cuál será el día designado? Aquel en el que usted y su familia dispongan de tiempo libre. Si están de vacaciones, cualquiera –siempre y cuando no esté lloviendo antes de salir– en el que haya menos flujo de gente. De lo contrario, elegir el sábado o domingo, sin tener ningún compromiso más que tomar los alimentos y marcharse a la hora convenida. Se prohíbe trabajar mediodía y luego decir “allá los alcanzo”, “al rato llego”. De igual manera que se diga “ya me voy porque tengo un pendiente”. Si es domingo, evite pensar que al día siguiente es lunes y debe trabajar, o que debe terminar algunos asuntos (hágalos desde el sábado).
LOS ALIMENTOS
¿Qué alimentos llevar? Siga al pie de la letra: si los acompañantes son especiales para comer, que cada quien lleve lo que le gusta y punto. Si al contrario, todos son de buen diente, se pueden realizar dos cosas. Una, que cada quien lleve algo distinto (como sorpresa). Dos, se ponen de acuerdo para completar un menú, éste se lleva las carnes frías, aquel las frutas y servilletas, el otro atún y tostadas, alguien más los sándwiches y galletas.
Ojo: es preciso elegir cualquier alimento liviano y fácil de transportar en una canasta o recipientes, que no requieran de un proceso complejo de preparación. Lo recomendable es llevar todo listo para tomarlo con las manos (o cubiertos si es usted muy, muy) y directo a la boca. Las bebidas del gusto de cada quien, de preferencia agua fresca y evitar alcohol si tiene que conducir.
Si en el transcurso del día, hay transeúntes que saludan, silban, gritan o pitan desde el vehículo, no haga el mínimo caso. Concéntrese en su momento de divertimento y continúe como si el mundo fuera de ustedes y nadie más existiera.
Por último, lleve una bolsa para recoger la basura y los desperdicios que se hayan generado durante su estadía campirana. Luego, hágase señor su voluntad.

Julio César ZAMORA VELASCO



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