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Colimenses por el mundo



Domingo 15 de Agosto de 2021 6:54 am

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Un espíritu aventurero


COLIMENSES por el mundo inicia hoy, como un espacio para conocer a nuestros paisanos que en algún momento de su vida tomaron la decisión de cruzar nuestras fronteras, para ir detrás de sus sueños y anhelos, viajando miles de kilómetros y ubicándose en diferentes partes del mundo frente a otras costumbres, otros colores, otros sabores y otras formas de vida.
Para este primer número compartiré la historia de Renato González Hernández, quien desde hace varios años fijó su residencia en Canberra, Australia.
Canberra es la capital de Australia y su nombre significa “lugar de reunión”, cuenta con una población superior a los 350 mil habitantes y se encuentra ubicada aproximadamente a 300 kilómetros al sudoeste de Sídney.
Canberra es una ciudad que fue construida desde cero, es decir, su origen fue completamente planificado gracias a un concurso que seleccionó el proyecto de los arquitectos Walter Burley Griffin y Marion Mahony Griffin, en 1913. El diseño de la ciudad tuvo la influencia del movimiento “ciudad jardín”, que incorpora en diferentes áreas vegetación natural y que llevó a Canberra a ser conocida también como “la capital del arbusto”.
Sede del Parlamento Australiano y de la Suprema Corte, esta localidad sufrió los embates de las dos guerras mundiales y la Gran Depresión, sin embargo, a partir de la Segunda Guerra Mundial logró convertirse en una ciudad moderna y próspera.
En esta ciudad fijó su residencia desde hace varios años Renato González Hernández, quien habiendo nacido en Colima cursó sus estudios de preescolar en el Jardín de Niños Cuauhtémoc; los primeros 2 años de primaria en la escuela Valentín Gómez Farías, para luego ingresar al Colegio Fray Pedro de Gante, en el que cursó hasta segundo año de secundaria, misma que concluyó en la Secundaria Manuel Sandoval Vallarta, mejor conocida en ese entonces como “la ochenta”.
El bachillerato lo hizo en la preparatoria José Vasconcelos, para finalmente cursar la carrera en la Universidad de Colima, obteniendo su título de Licenciado en Ciencias Políticas y Sociales.
Ya egresado y por invitación de unos amigos, viajó a Canadá en lo que pensó sería un viaje de 3 meses, sin más pretensiones que conocer y regresar a Colima. Sin embargo, los 3 meses se convirtieron en 5 años, en los cuales además de trabajar, pudo continuar sus estudios de Maestría, sin imaginar que este primer viaje lo llevaría de la mano por otras partes del mundo.
Justo en ese tiempo decide trasladar su residencia a Australia, donde decide también, por el consejo de una asesora universitaria, estudiar una segunda carrera en Geografía, Información y Sistemas, lo que a la postre sería un parteaguas en su vida profesional.
Al referirse a Canberra, Renato comparte que una de las cosas que más disfruta de vivir en esta ciudad cosmopolita, es que sus habitantes no tienen prejuicios con las personas que llegan de otros lugares del mundo y son respetuosos de la variedad de pensamientos, cuenta que su experiencia como mexicano ha sido buena, pues el trato hacia él siempre ha sido cálido, ya que nuestro país es siempre respetado y admirado.
Comentó que las oportunidades existen y las puertas se abren para quienes demuestran en el trabajo disciplina y honradez, sea cual sea su país de origen.
Menciona que en Australia, aunque no existe una ley que lo establezca, el hecho de que en tu currículo muestres trabajo voluntario en favor de grupos menos beneficiados siempre es tomado en cuenta y valorado a la hora de solicitar un trabajo, con lo que se promueve una sociedad comprometida y solidaria con su comunidad.
Al estar tan lejos es claro que las añoranzas llegan, pues dice extrañar mucho a sus padres Regino González y María Elena Hernández, así como a su tres hermanos: Erick, el mayor; Juan Carlos y Ana Hazael.
Extraña los amigos y, desde luego, como buen mexicano añora nuestra comida, en especial los tacos de arrachera, pero servidos “en un plato redondo, envuelto con bolsa de plástico y acompañados de cebolla, cilantro y su salsa verde”.
De espíritu aventurero, Renato ha viajado por Francia, Italia, Grecia, Turquía y 20 países más, además de haber vivido durante 4 años en Beirut, lugar del que guarda gratos recuerdos, pues fue ahí en donde logró ganar un concurso internacional de Jiu-jitsu, gracias a su disciplina y constancia.
Actualmente Renato labora en Positioning Australia Offers, oficina gubernamental que maneja una red de estaciones de referencia terrestre del Sistema Satelital de Navegación Global (GNSS, por sus siglas en inglés), que básicamente se encarga de proveer a sus clientes de herramientas con un altísimo nivel de precisión para que puedan posicionar sus equipos y sistemas.
Renato dice estar satisfecho con las decisiones que ha tomado a lo largo de su vida, así como contento por todas las experiencias que ha vivido. Por eso realizó una invitación a los jóvenes para que salgan a conocer el mundo y al volver, puedan regresarle a México las cosas buenas que se aprenden al vivir en otro país, tal y como él planea hacerlo en un futuro.
“México es un gran país y el ser mexicano es parte de mi historia, de mi identidad y es algo que me llena de orgullo en cualquier parte del mundo en la que me encuentre”, dijo para finalizar nuestra muy amena charla.
Si conoces a alguien que viva en el extranjero y quiera compartir su historia, este es mi contacto: nana_cortes@hotmail.com

ADRIANA CORTÉS ÁLVAREZ



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