Hijo de expresidente de Panamá se declara culpable de lavado de dinero en EE.UU.
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Jueves 02 de Diciembre de 2021 7:38 pm
+ -Luis Enrique Martinelli estaba acusado de lavado de dinero en un tribunal de Nueva York
Luis Enrique
Martinelli, hijo del expresidente de Panamá Ricardo Martinelli, se declaró este
jueves culpable ante un tribunal neoyorquino de conspiración para lavar dinero
por su papel en el caso de corrupción de la constructora brasileña Odebrecht,
anunció la fiscalía.
En la
audiencia admitió que había conspirado junto a su hermano Ricardo y otros para
"abrir cuentas bancarias en paraísos fiscales en nombre de empresas
fantasma para recibir y ocultar más de 28 millones de dólares de sobornos"
de Odebrecht, aseguró el tribunal en un comunicado.
El objetivo
principal era "beneficiar a un familiar cercano, un funcionario de alto
rango en Panamá".
Martinelli
reconoció que parte de esos fondos los utilizó para comprar un yate y una
propiedad inmobiliaria en Estados Unidos.
La sentencia
está prevista para el 20 de mayo de 2022.
La
declaración de culpabilidad acortará la condena del hijo del expresidente
panameño.
Luis Enrique
Martinelli, de 39 años, fue extraditado a Estados Unidos el pasado 15 de
noviembre.
Se lo acusa
de recibir fondos de Odeberechet junto a su hermano Ricardo Alberto (42), que
permanece en Guatemala a la espera de ser extraditado a Nueva York.
Parte de ese
dinero transitó por cuentas estadounidenses antes de acabar en otras,
principalmente en Suiza.
Los hermanos
Martinelli fueron detenidos el 6 de julio de 2020 en el aeropuerto
internacional de Guatemala cuando intentaban viajar a Panamá.
La
extradición de Luis Enrique fue aprobada por un tribunal guatemalteco en mayo
pasado y la de su hermano a principios de noviembre.
Panamá
también los reclama por un escándalo de corrupción igualmente relacionado con
sobornos a cambio de obras, conocido como "Blue Apple".
El 21 de
diciembre de 2016, Odebrecht se declaró culpable ante el tribunal federal de
Broklyn de haber distribuido más de 700 millones de dólares en sobornos a
gobernantes, funcionarios públicos y partidos políticos latinoamericanos para
conseguir y retener obras de infraestructura.