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Una tradición mexicana, romper la piñata en Nochebuena y Año Nuevo: Graciela Verduzco



Foto de Hugo Velázquez Roque

Sábado 25 de Diciembre de 2021 9:32 am

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El romper una piñata en forma de estrella con siete picos es símbolo de buenas cosas, pues se rompe con los siete pecados capitales, según la creencia religiosa: soberbia, pereza, gula, avaricia, lujuria, ira y envidia

Desde hace 6 años, la señora Graciela Verduzco Amezcua, comerciante del Mercado Álvaro Obregón, en la capital del estado, se dedica a la creación de piñatas para Navidad y Año Nuevo.

En entrevista, mencionó que se han vendido muy bien esta temporada, pues han sido solicitadas muchas con antelación para las posadas o adornar oficinas o casas.

“Se han vendido muy bien y más las de siete picos, que son la de los siete pecados capitales”, explicó sobre el significado de esta tradición mexicana de romper una piñata en esta época decembrina.

Detalló que, de acuerdo a lo que se cree, el romper una piñata en forma de estrella con siete picos es símbolo de buenas cosas, pues se rompe con los siete pecados capitales que atormentan a la humanidad, según la creencia religiosa: soberbia, pereza, gula, avaricia, lujuria, ira y envidia.

Mencionó que desde noviembre comenzó a realizar piñatas, previendo la temporada, algunas por pedidos, y hasta la fecha lleva vendidas más de 100 piñatas y sigue haciendo para terminar esta temporada el 31 de diciembre.

“Las mías llevan cántaro y me las buscan mucho porque llevan cántaro, casi la mayoría vienen y me dicen ‘señora, tienen cántaro’, pues yo sí las hago con esa olla”, destacó.

Agregó que por tradición es importante que una piñata de estrella debe ser hecha con la olla de cántaro, porque el romperse es parte de la creencia de quebrar con estos siete pecados capitales y que vengan tiempos mejores.

Sobre los costos de inversión, dijo que sí son muy altos, ya que los precios de la materia prima se han elevado bastante en los últimos tiempos, “pero yo trato de flexibilizar los precios, para que la gente la compre”, al mencionar que en promedio oferta sus piñatas en 160 pesos.

Relató que ella en promedio realiza una piñata de siete picos en menos de media hora; cuando recién iniciaba en este negocio, se tardaba hasta una hora en realizarla.

“Armarla no es trabajosa, pero ya vestirla, detallarla, es la parte más laboriosa de hacer una piñata. Yo sola las hago, nadie me ayuda”, comentó.

Al cuestionar si la venta de piñatas en Colima es realmente un negocio para vivir de él, “sí se vende, es negocio, es como todo, pero la gente ya conoce a uno; a mí me conocen como la Güera del Mercado Obregón que hace piñatas”.

Mencionó que fuera de la temporada navideña también realiza piñatas, de figura o de estrella, las hace sobre pedido.

Hugo Velázquez Roque



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