En la ola de violencia que azota el estado en el presente año, siete policías han sido asesinados, uno de ellos era agente del Ministerio Público, y hubo dos más heridos de gravedad. Según reportes oficiales, en enero fue asesinado a balazos un comandante de la Policía Municipal de Villa de Álvarez. A principios de febrero, fue un agente de la Policía Municipal en Manzanillo. El 18 de marzo, también a balazos fue ultimado un agente del Ministerio Público de la Fiscalía General del Estado en Cuauhtémoc. Un día después, fue asesinado un agente de la Policía Estatal, jefe del área de investigación, afuera de una institución educativa en Colima. El 7 de abril acribillaron a balazos a otro elemento de la Policía Estatal al llegar a su domicilio en la colonia Villas de Oro, en Villa de Álvarez. El 22 de abril, otro elemento de la Policía Estatal fue asesinado y uno más herido de gravedad, en la avenida Constitución, en la colonia Lomas Verdes de esta capital, ambos adscritos al área de investigación. El 15 de mayo, una agente de la Policía Municipal resultó herida tras ser atacada a balazos en la colonia Higueras de El Espinal, en Villa de Álvarez. El 19 de mayo, otro agente de la Policía Estatal, también del área de investigación, que se encontraba de descanso, fue asesinado en un lote de autos en la avenida Constitución, en Colima.
