Huelga de transportes contra la inflación paraliza París y Londres
Jueves 10 de Noviembre de 2022 2:02 pm
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Millones de personas en París y Londres tuvieron que buscar
alternativas para ir a trabajar, o simplemente quedarse en casa, el jueves
debido a una huelga en los transportes públicos para reclamar alzas salariales
en un contexto de alta inflación en toda Europa.
Toda la región enfrenta un aumento exponencial en los costos
de la energía en momentos en que se aproxima el invierno, provocando un alza
global de precios del 10 por ciento que genera preocupación en la población y
aviva las tensiones sociales.
En Francia, la huelga pretende también aumentar la presión
sobre el presidente Emmanuel Macron antes de que presente al Parlamento un
polémico proyecto de ley que busca retrasar la edad de jubilación de los 62 a
los 65 años.
"Queremos demostrar que si queremos movilizarnos,
sabemos cómo hacerlo", dijo Frédéric Souillot, secretario general del
sindicato francés FO.
El operador de transporte público de la capital francesa,
RATP, que transporta diariamente a casi 12 millones de usuarios, adelantó que
casi todas las líneas de metro estarían cerradas o funcionarían con un servicio
limitado en las horas punta, e instó a la gente a trabajar desde casa.
Muchos viajeros hicieron caso a los llamados a evitar tomar
el transporte público. En la línea 6 del metro, operativa sólo en un tramo, los
pocos vagones en marcha circulaban con poca gente este jueves, víspera de un
feriado en Francia.
Las calles de París registraron también un aumento de
vehículos, motocicletas y ciclistas, respecto a días anteriores.
En las últimas semanas, los sindicatos han convocado huelgas
en varios sectores para reclamar alzas salariales, en un contexto de
encarecimiento de la energía y de la alimentación por la guerra en Ucrania.
METRO DE LONDRES PARALIZADO
El metro de Londres, el más antiguo del mundo, estaba
también casi completamente paralizado: la mayoría de líneas suspendió
totalmente el tráfico mientras unas pocas mantenían un servicio muy reducido.
Sólo la moderna y automatizada Elizabeth Line, inaugurada en
mayo, funcionaba prácticamente con normalidad, aunque algunas de sus estaciones
permanecieron cerradas.
"Esta huelga bloquea toda la ciudad", dijo a AFP
el portugués Rodrigo Alex, peluquero de 21 años, en la estación de Kentish Town,
en el norte de la capital británica.
"Salí a las 06 horas 30, son las 09 horas (…) y todavía
tengo que andar una hora", para llegar al trabajo en el centro, se
lamentaba.
Otros londinenses, como Ashlyn Zunker y su amiga Jude
Thurman, ambas de 20 años, optaron por los autobuses, pero estos, que no
participaban en el paro, se veían superados por el alud de pasajeros.
"Hicimos unos 40 minutos de cola en la parada del
autobús pero llegó demasiado lleno para subir", explicaba Zunker de camino
a la universidad. "Salimos una hora más temprano" pero "aún nos
queda una hora de trayecto", agregaba, resignada a perderse la primera
clase.