Militares de El Salvador cercan municipio para detener a pandilleros y maras
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Sábado 03 de Diciembre de 2022 5:09 pm
+ -El presidente Nayib Bukele había anunciado el 23 de noviembre que cercaría ciudades para que los militares busquen casa por casa y arresten a pandilleros
Cerca de 10 mil
militares y policías cercaron la madrugada del sábado el populoso municipio de
Soyapango, en la periferia de San Salvador, en el marco de la guerra contra las
pandillas lanzada en marzo por el presidente salvadoreño, Nayib Bukele.
“A partir de estos momentos, el municipio de Soyapango está totalmente cercado. 8 mil 500 soldados y mil 500 agentes han rodeado la ciudad” de 242 mil habitantes, situada en la periferia este de la capital salvadoreña, anunció Bukele en su cuenta de Twitter.
El Mandatario había
anunciado el 23 de noviembre que cercaría ciudades para que los militares
busquen casa por casa y arresten a pandilleros. Soyapango es la primera ciudad
en la que se aplica esta medida.
Los soldados y policías
se apostaron en las primeras horas de la madrugada en todas las calles de
acceso al municipio, sin permitir que nadie entrara ni saliera del lugar sin
antes ser registrado. Los uniformados se encargarán “de sacar uno a uno a todos
los pandilleros que aún se encuentran ahí”, dijo Bukele.
Tras varias horas de
iniciada la operación, el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro,
dijo que "ya son 12 pandilleros que se encuentran detenidos, todos con
antecedentes penales". La guerra contra las "maras", que Bukele
lanzó el 27 de marzo al amparo de un estado de excepción, ha llevado a la
detención de más de 58 mil 800 presuntos pandilleros, según Villatoro, pero ha
sido cuestionada por organismos humanitarios.
Soyapango ha sido
considerado por años como un municipio inseguro debido a la acción de
pandilleros. Hace unos meses, las autoridades comenzaron a borrar los grafitis
alusivos a las pandillas. Las acciones implementadas por el gobierno de Bukele
en Soyapango, en virtud del estado de excepción, ha conducido a "una
enorme mejora en su seguridad", reconoció a inicios de esta semana su
alcaldesa, Nercy Montano.
El estado de excepción,
que permite detenciones sin orden judicial, fue declarado por el presidente en
respuesta a una escalada de violencia que se cobró la vida de 87 personas del
25 al 27 de marzo. Cuestionado por organismos humanitarios, el régimen de
excepción fue prorrogado por el Congreso hasta mediados de diciembre.
A la
búsqueda de pandilleros
Las colonias en todo
Soyapango amanecieron con fuerte presencia de soldados y policías, quienes
buscaban pandilleros con caminar lento y con sus fusiles de asalto en mano.
Vehículos de combate del ejército y autos policiales recorrían las calles de la
ciudad. Desde el aire, drones de la Policía sobrevolaban la zona para intentar
ubicar a pandilleros.
El ministro de Defensa,
René Merino, precisó que son 40 "puntos de control" instalados en
Soyapango.
"Ha sido una
sorpresa (el operativo), lo están registrando a uno y nos piden el documento de
identidad para verificar en donde vivimos, pero está bien, todo sea para
nuestra seguridad", dijo a la AFP Guadalupe Pérez, de 53 años, quien vive
en una de las colonias del municipio.
Mientras tanto, policías
abordaban autobuses de transporte colectivo para registrar a los pasajeros.
"Los ciudadanos
comunes no tienen nada que temer y pueden continuar haciendo su vida
normalmente. Esta es una operación contra los criminales, no contra los
ciudadanos honrados", remarcó Bukele.
Apoyo
ciudadano a la medida
El montaje de los cercos
de seguridad en ciudades para la "extracción de pandilleros" es
parte, dijo recientemente Bukele, del denominado plan de seguridad
gubernamental Control Territorial.
"Las medidas que se
están tomando están dando resultados notorios y la población lo ha notado,
entonces no es de extrañar que la gente que ha sido afectada por las pandillas,
que es la gran mayoría, estén de acuerdo con lo que se está haciendo",
dijo el criminólogo Ricardo Sosa.
Una encuesta de la
Universidad Centroamericana (UCA) publicada en octubre mostró que el 75.9 por
ciento de los salvadoreños aprueba el régimen de excepción, y nueve de cada 10
salvadoreños aseguran que la delincuencia "ha disminuido" con la
política de Bukele.
Antes de marzo y previo
a que iniciara el régimen de excepción, en las cárceles de El Salvador había 16
mil pandilleros encarcelados. La mayoría de los detenidos son miembros de las
pandillas MS-13 y su rival el Barrio 18 en sus facciones sureños y
revolucionarios. Nacidas en Estados Unidos, en las calles de Los Ángeles, las
maras, según dijo recientemente Bukele, todavía tienen armas y "se están
financiando de la venta de droga".