Astrónomos identifican el “viejo y pobre corazón de la Vía Láctea”
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Jueves 22 de Diciembre de 2022 9:24 pm
+ -Un equipo del Instituto Max Planck de Astronomía identificó una población de estrellas que se formaron en la historia temprana de nuestra galaxia
Un equipo de
investigadores del Instituto Max Planck de Astronomía (MPIA) identificó, en las
regiones centrales de nuestra galaxia, el “pobre y viejo corazón de la Vía
Láctea”.
Estas fueron las
palabras que emplearon para referirse a una población de estrellas que se
formaron en la historia temprana de la Vía Láctea, hace más de 12 mil 500
millones de años.
Los astrónomos hicieron
este descubrimiento analizando la información más reciente publicada por la
misión Gaia de la Agencia Espacial Europea, utilizando una red neural para
extraer la metalicidad de dos millones de estrellas brillantes gigantes en las
regiones internas de nuestra galaxia.
La metalicidad es la
cantidad de elementos químicos más pesados que el helio que contiene la
atmósfera de la estrella (cuánto más baja es su metalicidad, más antigua es la
estrella).
En un mapa del cielo,
estas estrellas parecen estar concentradas alrededor del centro galáctico.
Las distancias
proporcionadas por Gaia (a través del método de paralaje) permiten una
reconstrucción en 3D que muestra esas estrellas confinadas dentro de una región
comparativamente pequeña alrededor del centro, de aproximadamente 30 mil años
luz de diámetro.
La detección de estas
estrellas, así como también las propiedades que se observaron, corroboran
simulaciones cosmológicas de la historia más antigua de nuestra galaxia.
Según explican los
investigadores del estudio, estas simulaciones predecían donde podrían
encontrarse las antiguas estrellas.
Aprendizaje
automático
Para realizar el
análisis, los astrónomos recurrieron a métodos de aprendizaje automático.
En este caso particular,
la red neuronal se entrenó utilizando espectros Gaia seleccionados como
entrada: espectros de Gaia para los que la respuesta correcta, la metalicidad,
ya se conocía a partir de otro estudio.
La red neuronal logró deducir
metalicidades precisas y exactas incluso de estrellas con las que nunca se
había topado.
Si bien la información
obtenida gracias al análisis de los datos de Gaia es innovadora dado que demuestra
la existencia continua del “pobre viejo corazón” de nuestra Vía Láctea, ese
descubrimiento genera nuevas preguntas, como por ejemplo, a qué galaxia
progentiora de la Vía Láctea pertenece cada una de las estrellas de esta región
central.
Los investigadores
confían en que podrán resolver esta y otras preguntas en el futuro.