La Casa del Archivo: 30 años de historia
Domingo 12 de Febrero de 2023 8:21 am
+ -
EN 2001 conocí a una persona imponente que llegó en un preciso momento de mi vida. Es una persona con mirada frágil, paciente, pero rígido en su convicción. Anhela, sueña, descubre e interpreta el pasado de los documentos virreinales. Es el doctor José Miguel Romero de Solís, un genio en las letras, investigador emérito y fundador del Archivo Histórico del Municipio de Colima, quien llegó en 1968 desde Sevilla, España, para quedarse en nuestro estado.
Él y un grupo de intrépidos aventureros profesionales, a principios de los años 80 del siglo XX, colocaron las primeras cajas de cartón Ag12 y anaquelería para acomodar todos los legajos que se encontraban en malas condiciones y sin ningún orden de clasificación archivística.
En 1993, el Archivo adquiere la autonomía del Ayuntamiento de Colima, con personalidad jurídica y patrimonio, primero en la República Mexicana, un gran logro para el desarrollo de esta institución. Con la nueva imagen de la Casa del Archivo —como se le designa popularmente— se convirtió en un espacio libre de expresión, donde las letras se escuchan y se leen a diario en uno de los recintos más representativo del quehacer histórico del estado. Los vecinos de Colima recurren a diario a observar exposiciones, presentaciones de libros, seminarios, coloquios, visitas guiadas, conferencias, eventos culturales, entre otros.
Sí, ha pasado mucho tiempo desde que José Miguel Romero de Solís me invitó junto con otros alumnos a ser partícipes en un proyecto institucional a través del Fondo Ramón Álvarez Buylla de Aldana, para organizar el Fondo Balbino Dávalos, donado en 2001 por su nieta Yvonne Sánchez de Armella.
Fuimos varios compañeros de clase de la asignatura Sociedad Mexicana, impartida por Romero de Solís en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Colima, con el fin de acomodar cartas, diplomas, reconocimientos, anecdotarios, sonetos, fotos, recorte de periódico, artículos y revistas del poeta y diplomático colimense.
Después de 22 años todavía recorro los pasillos de los repositorios documentales, los cuales están debidamente ordenados de acuerdo a las normas internacionales de Archivística. La estantería del lugar recrea un espacio como si fuera una capsula del tiempo que se detienen entre los papeles antiguos. Ahí se encuentra la memoria de las instituciones y pobladores de la Villa de Colima de hace 500 años. Al interior hallarás una riqueza de datos en espera de ser explorados por los usuarios que buscan redescubrir el pasado histórico.
En el acervo encontrarás lo más valioso que tenemos de registros, cartas, testamentos, venta de esclavos, limpieza de sangre, juicios verbales, actas de Cabildo, oficios de autoridades, escribanos públicos, padrones, actas del Registro Civil, asuntos del mercado público, listas de entradas y salidas de presos en la cárcel, permisos por el degüello de reces y cerdos, concesiones de pajas de agua para el uso público y privado, regulación de pesas y medidas, escrituras de adjudicación de solares, mapas, planos, minutas, registro de fierros, entre otros asuntos. Los expedientes están custodiados por los archivistas, guardianes de la memoria documental del municipio.
El 8 de febrero cumplió 30 años como un organismo garante de la información pública, dedicado a la conservación, administración y rescate del patrimonio documental. Gran número de personas han recorrido los rincones de la Casa del Archivo, entre trabajadores, investigadores, prestadores de servicio, practicantes, profesionistas y becarios, que seguramente formaran parte de la historia laboral del Archivo Histórico del Municipio de Colima.