CONCLUÍA su especialidad como Médico radiólogo cuando Carlos Romero Martínez, junto con Gabriela Carlota Leguer Retolaza, su esposa, iniciaron la búsqueda de alguna ciudad que aún no contara con el servicio de tomografía axial computarizada para iniciar con este emprendimiento. Al final decidieron que Colima sería el lugar ideal, ya que además tendrían a favor la cercanía de nuestra ciudad con su lugar de origen, que es Ciudad Guzmán, en el vecino estado de Jalisco. El primero en llegar fue el médico en el mes marzo, y para agosto llegó su esposa acompañada de Gabriela y Carlos Francisco, sus dos primeros hijos, y es en este mismo mes que abre sus puertas al público Tomografía Axial de Colima, una empresa que a la postre se convertiría en una herramienta revolucionaria y una gran aliada para los médicos, ya que gracias a las imágenes de una tomografía se podría complementar la valoración del paciente y por ende mejorar su diagnóstico. En un inicio, además del médico Romero y su esposa que se encargaba del área administrativa, eran sólo tres personas en la plantilla laboral: un técnico en rayos X, una recepcionista y una persona de intendencia. Actualmente en TAC, como se le conoce, laboran 48 empleados, siete médicos radiólogos, dos cardiólogos y dos anestesiólogos que se desempeñan en las sucursales de Colima capital, además de otros seis colaboradores que se encuentran en la sucursal de Manzanillo. En sus primeros días, los servicios eran solamente las tomografías axiales computarizadas, los ultrasonidos dopper color y los rayos x, actualmente además de estos se realizan: resonancias magnéticas, rayos X convencionales e intervencionistas, mamografías, ecocardiogramas doppler color, densitometrías, ortopantomografías, audiometrías, espirometrías, electrocardiogramas, pruebas de esfuerzo y laboratorio, análisis clínicos además del servicio de check ups que se les brinda a las empresas que lo solicitan, que consiste en realizar a su personal diferentes estudios médicos según propias necesidades. Además de la atención a particulares, desde sus inicios Tomografía Axial puso sus servicios a disposición de los beneficiarios de instituciones como IMSS, ISSSTE, Pensionados del Gobierno del Estado de Colima, DIF y de la Secretaría de Salud. En 1991 incursionan en el área de laboratorio clínico, así como en el estudio de mamografías; para 1993 se implementa el servicio de ambulancia, y en los siguientes años reforzaron su equipamiento con la biometría ocular y el ultrasonido Doppler Color, pero sin duda uno de sus grandes logros fue la adquisición y puesta en marcha de la Resonancia Magnética Nuclear, el Densitómetro y el Ortopantomógrafo. Cómo es del conocimiento general, en el tema médico la tecnología avanza a un ritmo impresionante, particularmente en los estudios de resonancia y tomografías, ya que estos se realizan cada vez en menor tiempo y con mejor resolución en las imágenes, lo que impacta de manera muy importante en un diagnóstico, es por eso que esta empresa mantiene ante todo su visión de estar a la vanguardia de los avances tecnológicos y traer esos sofisticados equipos a nuestro estado. A punto de cumplir en este año tres décadas de servicio, es inevitable mirar hacia atrás y ver el camino que se ha recorrido, porque además de consolidar de manera exitosa su empresa, han logrado algo que es quizá más difícil, porque hablamos no sólo de un éxito comercial, sino familiar, ya que ahora los hijos de Carlos y Gabriela, es decir: Gabriela, Carlos Francisco, Paulina y Eduardo, son parte de la empresa y se han integrado para desde su posición apuntalar este proyecto, una de las cosas que más orgullo causa a sus padres, quienes dicen, dan gracias a Dios por haberles permitido tener la oportunidad de ver a los dos y más grandes proyectos de su vida que son sus hijos y su empresa, nacer, crecer y consolidarse. Además, dicen sentirse gradecidos con Colima por todos los retos y satisfacciones que ha significado este largo recorrido, un agradecimiento que considero podría ser mutuo, porque en estos 30 años cuántos pacientes no tuvieron que trasladarse a otra ciudad porque aquí no se tenía el equipo necesario. En una situación en la que la salud se ve comprometida, en la mayoría de los casos no hay dinero que ajuste y el tener a la mano el equipo necesario para realizar un diagnóstico de calidad es a veces la diferencia que logra alargar la vida de los pacientes y un gasto menos por traslado. Enhorabuena para la familia Romero Leguer y en especial para sus dos grandes pilares que no solamente tuvieron la visión, sino que además pudieron, pese a seguramente muchos retos y desafíos, poder decir hoy: Lo logramos. Gracias a Silvia Palomares por la confianza y por ser mi aliada para iniciar con este proyecto editorial.
