Regina cuenta cómo sobrevivió al accidente de Globo en Teotihuacán
Foto Internet
Martes 09 de Mayo de 2023 9:02 pm
+ -Regina recuerda cómo su madre cayó del globo poco después: “Mi mamá cae, cae a mi lado y no se levanta. Entonces me levanto y empiezo a gritar”
El 1 de
abril, el cielo de San Juan Teotihuacán se oscureció con una columna de humo
mientras un globo aerostático se desplomaba en llamas. A bordo iba Regina
Nolasco, una niña de 13 años, quien sobrevivió a esta tragedia que le arrebató
a sus padres. Su historia es una de valentía, resiliencia y una sorprendente
capacidad de superar un evento traumático.
Inmediatamente
después del accidente, Regina fue trasladada al Hospital General de Axapusco.
Tenía politraumatismo, fractura proximal del húmero derecho y quemaduras de
segundo grado en cuatro por ciento de la superficie corporal. A pesar de la
gravedad de sus heridas, prevaleció el deseo de Regina de vivir.
Posteriormente,
fue llevada al Hospital Para el Niño del Instituto Materno Infantil del Estado
de México (IMIEM) en Toluca. Allí, se le realizó una tomografía computarizada
de cráneo, que resultó normal. Los médicos programaron una cirugía para
corregir la fractura del húmero y reducir la luxación de cabeza humeral.
LA
LUCHA POR LA VIDA
Además, se
realizó lavado quirúrgico de sus heridas y quemaduras. La cirugía fue exitosa,
pero el camino hacia la recuperación sería largo y desafiante para la joven
Regina.
Durante su
estancia en el hospital, Regina mostró una fortaleza inimaginable. A pesar de
su juventud, enfrentó cada desafío con determinación, apoyada por el personal
médico y los seres queridos que la rodeaban.
Hoy, 9 de
mayo, casi un mes y medio después del accidente, Regina habla de su
experiencia. Sus palabras contienen un dramatismo y una sinceridad pocas veces
escuchados. "Mi vida cambió en un instante", dijo en entrevista con
Primer Impacto.
UN
DÍA DE CELEBRACIÓN SE CONVIERTE EN TRAGEDIA
Regina recuerda
cómo el viaje en globo era un regalo de cumpleaños para su madre, Viridiana. El
día que debía ser de celebración se convirtió en una tragedia cuando, justo
antes de aterrizar, el globo golpeó el suelo, provocando una fuga de gas que se
convirtió instantáneamente en un incendio.
"Arde,
te quemas por el impacto, y luego empiezas a quemarte", relata Regina.
Actuando por instinto, saltó de la canasta en llamas antes que sus padres.
Regina
recuerda cómo su madre, Viridiana, cayó del globo poco después: "Mi mamá
cae, cae a mi lado y no se levanta. Entonces me levanto y empiezo a gritar a la
gente '¡ayuda, ayuda!' todos me miran sorprendidos. Pasaron dos minutos,
escucho los gritos de mi papá, veo el globo en llamas arriba, y fue un dolor
sorprendente porque era consciente de que mi mamá ya había muerto", contó
la joven.
PREGUNTAS
SIN RESPUESTAS
El
cuestionamiento sobre qué pasó con el piloto y cómo logró salir ileso permanece
en la mente de Regina: “Varios me preguntan '¿viste al piloto?' No, no lo vi,
no sé en qué momento saltó. Fue antes que yo, supongo, porque cuando yo estaba
abajo, él no saltó".
El recuerdo
del sufrimiento de su padre, quien al parecer saltó después de su madre, es
particularmente doloroso para Regina: "Porque escuché sus gritos, escuché
cómo pedía ayuda, cómo sufría", agregó.
A pesar de
los horrores de ese día, Regina ha demostrado una fuerza y una resiliencia
notables. Ha encontrado en sí misma una capacidad para seguir adelante que
inspira a todos los que escuchan su historia.
UN
FUTURO LLENO DE ESPERANZA
Las secuelas
emocionales que Regina lleva tras este evento son profundas y van más allá de
las quemaduras de segundo grado y la dislocación de hombro que sufrió en el
accidente.
A poco más de
un mes de la pérdida de sus padres, Regina reflexiona: “No le tengo miedo a la
muerte, sé que mis papás están ahí, esperándome en algún momento. Mi mundo
puede cambiar así", concluyó.
Regina sigue
adelante, llevando consigo la memoria de sus padres. A pesar de la tragedia que
ha marcado su vida, se mantiene firme y valiente, un verdadero testimonio de la
resiliencia humana frente a la adversidad.
Mientras
Regina continúa su camino hacia la recuperación, su historia se convierte en un
poderoso recordatorio de la fragilidad de la vida y la fuerza del espíritu
humano.