Periodismo ha evolucionado con las nuevas tecnologías: Raúl Ávila
Foto de Roxana Alanis Reyes
Miércoles 07 de Junio de 2023 11:55 am
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“Nací, crecí y viví entre el papel y la tinta, mi abuelo Fausto y mi
padre Raúl Ávila Andrade, fueron periodistas independientes, combativos,
justicieros de acuerdo a la versión de quienes, de alguna manera, recibieron su
ayuda, eran tiempos de alta moral, uso de armas de fuego a la cintura, del
caciquismo”, así lo expresó en entrevista Exclusiva, el periodista Héctor Raúl
Ávila Vázquez, esto con motivo al día de la libertad de expresión en México que
se celebra cada 7 de junio.
Nacido el 23 de mayo de 1957 en el municipio de Tecomán, Colima, y al
que le digo “Don Raúl”, es un gran icono del periodismo, reportero de antaño,
pues cerca del año de 1972, ha forjado este oficio, director de un medio de
comunicación que en su tiempo era impreso y comprado por miles de lectores locales.
Su primer trabajo lo adquirió en dicho Semanario, el cual dijo
“manejábamos la tipografía manual, esa que en un contenedor abierto colocabas
las letras de plomo volteadas, para que, al imprimir el papel salieran al
derecho, ejemplar de 8 páginas y para su elaboración una página por día”.
Don Raúl, se forjó en aquellos tiempos del fotograbado, placa metálica
encima de madera que, al imprimirla, aparecía la foto difusa. En la época de la
máquina Chandler, a tu lado derecho el papel, a la izquierda lo recibías luego
de la impresión.
Luego, laboró en la cobertura de la fuente policiaca, en los talleres
tipográficos del diario “Ocho Columnas”, se usó el teletipo, una máquina con
teclado inferior que ordenaba las letras de plomo que bajaban ya integradas en
pequeños lingotes. “El proceso era divertido”.
Llegó a Tecomán con el semanario “Monitor”, estuvo cuatro años y
enseguida ocupó la corresponsalía de 8 Columnas en Ciudad Guzmán por poco
tiempo, regresó a Colima y ahí también escribió hasta que confundó el periódico
“Avance Informativo”. En el semanario fue director por 16 años, enseguida
retomó el semanario “El Alacrán” que luego fue bisemanario, el cual tuvo
vigencia del 2001 al 2021.
Pues detalló que, en el ámbito del periodismo en el que se forjó por
muchos años como reportero y de las cosas que se ha tenido que enfrentar, es
estar al tanto de la evolución del periodismo, tuvo que emigrar a las plataformas
digitales, aprender a utilizar el blog, después la web y ahora, en redes
sociales de internet.
En cuanto al desarrollo que han tenido las tecnologías, comentó que los
tiempos para el periodismo cambian, evolucionan, los modernizan, pero la esencia
existe, el instinto lo conservas, lo aprendido lo mejoras, te superas segundo a
segundo.
En cuanto a los obstáculos de los que se enfrentó, es cuando cubría la
nota roja, pues mencionó que la fuente más riesgosa para un reportero es la
policiaca; “exhibes, evidencias sin conocer al protagonista que se puede
convertir en tu enemigo fantasma o desconocido; debes ser cauteloso, protegerte
porque nadie lo hará, proteger a la familia, ser centrado, fundamentar el
hecho, pues antes, la retroalimentación periodista- autoridades ministeriales
resolvían hechos delictuosos”.
De la misma manera, “Don Raúl” indicó que la fuente más cómoda es la
social, “ahí con nadie quedas mal, lisonjeas, alabas, nunca criticas ni
señalas, quedas bien y te aceptan”.
Al cuestionarle sobre las nuevas generaciones, las que han tenido la
oportunidad de recibir un título universitario en Letras, Periodismo o
Comunicación dijo, “dejan mucho por desear, sin ánimo de ofender ni causar
polémica, les falta mucho conocer y ampliar conocimientos en redacción, en
ortografía, en superación personal y ser independientes”.
Dijo no estar de acuerdo como se maneja el periodismo hoy en día; pues
subrayó que cualquier persona que usa un teléfono móvil inteligente se
considera periodista, “no se esmeran en aprender fotografía, nuevas formas de
periodismo, usan la comodidad del boletín gubernamental o de cualquier
institución, que le agregan al final el nombre y ya son héroes”.
Manifestó que un verdadero comunicador o periodista debe salir a buscar
la noticia exclusiva, personalizada, que obtenga méritos, “las redes sociales
se prestan mucho para eso, para quienes editamos periódicos no fue la
tecnología la sepultura, sino los costos en los insumos, cada vez más caro el
papel, la tinta, las láminas láser, agrégale la alza la gasolina que no te
permite traslados largos para entregar los ejemplares, los insumos los pagabas
en dólares y escasean mucho”.
En cuanto a los diarios que aún salen impresos, comentó que prevalecen
los que venden mucha publicidad gubernamental, aquellos que llegan a tener el
poder económico, social y político, pero necesitan de las redes sociales para
destacar.
Narró que nunca ha recibido un reconocimiento físico de las autoridades,
sus mentores le aconsejaron que el mejor mérito, es recibir los aplausos
callados de los lectores “y si lo creo, prefiero superarme, conocer más ser yo,
sin ataduras, libre de pensamiento y de actividad. Conservar la ética, recibir
lo que Dios te manda, lo material no te lo llevarás, vivir bien con conciencia
limpia y tranquila, es lo más deseable”.
Enfatizó el periodista que, a sus 66 años, “creo que cumplí compromisos
familiares, gozo de salud, pienso, actúo, me movilizo, hago lo que me apasiona
y si un lector me lee, para mí es la gloria”, finalizó.