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Colima, el latido de sus años. La edición conmemorativa por los 500 años de la fundación de Colima



Karla Patricia Valdovinos Mendoza

Jueves 27 de Julio de 2023 8:54 pm

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 El pasado 25 de julio, se conmemoró, con la edición del libro Colima, el latido de sus años, los 500 años de la fundación de Colima, fecha que vivirá en la memoria colectiva y será un parteaguas de la narrativa de nuestros pueblos indígenas, por lo tanto, de nuestras raíces, cuyos pasajes de su historia conocemos gracias a textos y vestigios que de generación en generación han llegado hasta nuestros días.

La importancia de la escritura radica en testificar, guardar y transmitir lo que somos, por lo tanto el libro siempre trasciende, es el encargado de generar debate y conocimiento crítico. Umberto Eco lo dice así: “Ha superado sus pruebas y no se ve cómo podríamos hacer nada mejor para desempeñar esa misma función. Quizá evolucionen sus componentes, quizá dejen de ser de papel. Pero seguirá siendo lo que es”. A su vez destaca que “El libro es como la cuchara, el martillo, la rueda, las tijeras. Una vez que se han inventado, no se puede hacer nada mejor. No se puede hacer una cuchara que sea mejor que la cuchara”.

Los libros nos cuentan pasajes de nuestra historia, menciono pasajes porque los misterios sobre nuestro pasado, radican justamente en que no tenemos toda la historia escrita, por ello, este libro conmemorativo, funge por hoy, y seguirá fungiendo por años, tal vez décadas, como parte de la memoria e identidad de nuestra tierra, como una huella de lo que hemos sido y de lo que somos actualmente, será, sin duda alguna, algo así como una carta de presentación de nosotros para con las nuevas generaciones.

Cabe señalar que de manera paralela deja grandes aprendizajes, en primer lugar y de modo personal, me llevó a comprender la profundidad de la frase de la maestra Griselda Álvarez Ponce de León, cuando expresó: “No todo es curar a través de los hospitales, sino prevenir por medio de una buena higiene mental”. Ella, la maestra Griselda, poseía la certeza de que en temas como educación y cultura, no pueden escatimarse ni recursos, ni esfuerzo; recursos y esfuerzo que fueron necesarios para la edición de esta obra, por ello, es importante resaltar el mecenazgo de la Asipona, Manzanillo, a través de su director general, el almirante Salvador Gómez Meillón, así como al arduo trabajo y gestión del maestro Horacio Archundia y de los coordinadores, el doctor José Miguel Romero de Solís y la maestra Irma López Razgado; sin dejar de mencionar desde luego, y aunque sea de manera colectiva, a los más de 150 participantes de este libro que compartieron su visión sobre Colima, ya sea con sus ensayos e investigaciones, sus crónicas o su sentir a través de sus expresiones literarias o artísticas, mediante la plástica o la fotografía; por esto es importante recalcar que el camino de la cultura y los libros requiere de trabajo y convicción, es como un salto de fe al vacío, pero un salto de fe que debe realizarse con un solo objetivo: aportar, no sólo para el momento, sino para la posteridad representada en las nuevas y futuras generaciones.

El trabajo de edición, impresión y diseño estuvo a cargo del equipo de Puertabierta Editores.




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