El éxito no puede lograrse a través de la delincuencia, dice hijo de Pablo Escobar

Miércoles 06 de Septiembre de 2023 7:10 am

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Comparte Sebastián Marroquín su experiencia con el narcotraficante más buscado de Colombia; decidí ser pacifista y no Pablo Escobar 2.0, dice

El éxito nunca puede lograrse a través de la delincuencia y de las malas decisiones, sino del esfuerzo, el trabajo y la educación, afirmó Sebastián Marroquín, hijo del narcotraficante colombiano Pablo Escobar.

Durante su entrevista con Diario de Colima, el conferencista señaló que la convivencia con su padre, siendo niño, le permitió tener una experiencia para mostrar a jóvenes las consecuencias de tomar un camino equivocado.

Sebastián Marroquín se encuentra en Colima para ofrecer un par de conferencias y trabajar con estudiantes en temas de prevención, en coordinación con el Ayuntamiento de Colima.

Inicialmente, Sebastián Marroquín refirió que ha viajado por 42 países con un mensaje de paz para la juventud; “además, en México he visitado alrededor de 28 estados”.

Mencionó que en esos lugares ha trabajado con gobernantes, empresarios, autoridades educativas y padres de familia, “tenemos unos 10 años ofreciendo pláticas y otras actividades con las nuevas tecnologías”.

Puntualizó que cuenta con aplicaciones de realidad virtual o simuladores que permiten a los jóvenes proyectar cómo serían sus vidas y las de sus familias si toman malas decisiones.

Especificó que uno de esos proyectos se denomina “No manejes si tomas”, mismo que consiste en tomar buenas decisiones y actuar de manera responsable en caso de acudir a reuniones o eventos sociales.

Abundó que otro programa consiste en detectar e inhibir tendencias a la criminalidad con base en juegos de realidad virtual; “aquí si toman decisiones equivocadas, pues hay consecuencias”.

Mencionó que participa en el juego ofreciendo consejos y compartiendo anécdotas personales a los participantes, “con el objetivo de mostrar a los participantes lo que sucede cuando no se actúa con responsabilidad”.

Por otro lado, aceptó que ser hijo de Pablo Escobar representa una experiencia que ha utilizado para inspirar a los jóvenes para que no repitan historias como la de su padre.

Subrayó que su progenitor mostró a todos un camino que no se debe recorrer, “se equivocó en la vida y no tuvo éxito, por más que se le muestre en diversas plataformas de streaming como exitoso”.

Recordó que su padre murió a los 44 años, “así que en este caso las plataformas glorifican una actividad criminal que lleva a los jóvenes a perder la capacidad de distinguir la ficción de la realidad”.

Manifestó que en sus conferencias demuestra al sector juvenil que se puede aprender de experiencias como las de sus padres, “pero en el sentido de lo que no debe hacerse”.

Apuntó que en su caso, es el primer convencido de que el éxito se logra a través del esfuerzo, la educación y otros elementos, “no a través de la delincuencia y las malas decisiones”.

Asentó que por más inteligentes que sean, quienes toman el camino equivocado nunca tienen éxito, “siempre terminan en la cárcel o el cementerio y arrastran a sus familiares”.

Más adelante, Sebastián Marroquín narró que a los 16 años le tocó decidir si quería ser Pablo Escobar 2.0; “desde entonces me declaré pacifista y lo llevo a la práctica todos los días”.

Abundó que ese mensaje transmite en todos los lugares donde las autoridades le abren las puertas, “pues busco decirles a los jóvenes que no necesitan vivir experiencias tan dolorosas como las de Colombia para aprender”.

Comentó que con sus estrategias se está logrando un impacto positivo en los participantes, “así que se trata de una buena actividad de prevención que las autoridades ya están entendiendo”.

Enfatizó que los recursos que se invierten en perseguir a un criminal podrían utilizarse para educar a un niño, evitando que se convierta en un criminal que genera violencia.

También explicó que los jóvenes que participan en sus dinámicas virtuales conservan su anonimato, “no quedan ningún registro de sus datos, solo se entregan a las autoridades elementos diagnósticos”.

Precisó que la estrategia se puede implementar con personas de aproximadamente 15 años en adelante, “aunque tenemos casos de menores que ya han delinquido; conozco un caso de un niño de 9 años que participó en un secuestro”. 

Ejemplificó que realizó la experiencia virtual en un municipio, con estudiantes de varias escuelas, a quienes se les preguntó si habían visto consumo de drogas; “de los 234 participantes, 230 dijeron que habían visto cristal en la última semana”.

Refirió que datos como esos permiten tomar acciones, “pues esta dinámica logró que se descubriera que un niño le estaba robando droga a su padre, un narcotraficante, para presumirla en la escuela”.

Subrayó que en ese caso logró atajarse el problema antes de que se convirtiera en una situación difícil de manejar, “es decir que estas herramientas tecnológicas ayudaron mucho con un diagnóstico certero”.

En otra parte de la entrevista, el conferencista estimó que el problema del consumo de drogas es un problema en muchos países de América Latina, “a este acceso contribuyen mucho las redes sociales”.

Precisó que una de sus cuentas fue bloqueada porque publicó una foto de cuando tenía 4 años, donde aparece su padre dándole un helado, “pero hay cuentas que ofrecen drogas abiertamente y no son bloqueadas”.

Refirió que la otra parte de la estrategia que implementa es el mensaje de amor y respeto que comparte, “en el que tratamos de concientizar a los jóvenes de que hay decisiones que cambian la vida y estas deben ser responsables”.

Asentó que se ha convertido en un defensor de la educación temprana de los jóvenes en materia de drogas, “porque es la mayor herramienta para decirle que no a estas conductas”.

Recordó que cuando tenía 8 años, su padre le describió varias drogas que tenía enfrente. “me contó las consecuencias de cada una y me dijo que una persona valiente es la que no prueba; también y como narcotraficante, me señaló que la cocaína era para vender pero no para consumir.

“Eso vino de un hombre que era el responsable del 80 por ciento del tráfico de drogas en el mundo, pero jamás me dijo que estaba bien lo que hacía, sabía el daño que estaba haciendo”, dijo.

Reconoció que el legado de su padre es muy triste por la violencia y las muertes que generó, “pero también por cómo ha sido reinterpretado todo eso por las grandes empresas de televisión”.

Criticó que han maquillado tanto la realidad que ya no se parece en nada a la que vivieron los colombianos y las víctimas de su padre; “muchos niños ven esas series y quieren ser como Escobar, en apariencia exitoso”.

Ejemplificó que en Netflix Pablo Escobar vive en mansiones, “pero en realidad no era así, pues mucho tiempo vivió en un lugar con piso de tierra, techos llenos de goteras, sin comida y otras carencias por estar escondido”.

Puntualizó que el éxito nunca podrá lograrse a través de la criminalidad, “ese no es el camino, hay otras formas de lograr riqueza, que es siendo útil a la sociedad, teniendo libertad, tranquilidad y paz, algo que mi padre no tenía”.

Además de las dos conferencias programadas para este miércoles, Sebastián Marroquín está trabajando en el área de prevención con estudiantes de varias escuelas del municipio de Colima.

Sobre el nombre que utiliza, precisó que a una persona la definen las acciones y no los nombres, “el apellido a veces es un condicionante, para mí no lo fue y nunca pensé en ser como mi padre”.

Apuntó que todo el mundo tiene el derecho a dudar de él, “puede pensarse que soy un gánster y que mato personas con la mirada, pero en vez de eso, tengo un comportamiento respetuoso con los demás; tengo un hijo de 10 años y no pienso dejarle un legado de violencia, como lo hizo mi padre conmigo”.

Finalmente, agradeció el apoyo de la alcaldesa de Colima, Margarita Moreno González, por su disposición para atender el tema de la prevención de la violencia; además que invitó a la población a sus conferencias de las 10 de la mañana y las 5 de la tarde que se realizarán en el Centro de Convenciones Allegra.

Mario Alberto Solís Espinosa

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