Laboristas pierden en Nueva Zelanda y partidos conservadores llegan al poder
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Sábado 14 de Octubre de 2023 11:30 am
+ -Con el 97% de los votos escrutados, el Partido Nacional y su socio de coalición ACT lograron 61 escaños, suficientes para formar gobierno
Los neozelandeses votaron este sábado
a favor de un cambio de gobierno, y el primer ministro saliente, el laborista
Chris Hipkins, aceptó la derrota de su partido en las legislativas tras seis
años en el poder. El hombre que reemplazó a Jacinda Ardern este año, afirmó que
“no está en condiciones de formar gobierno” y felicitó a su rival, el
conservador Christopher Luxon.
“El resultado de esta noche no es el
que cualquiera de nosotros quería, pero quiero que estén orgullosos de lo que
hemos logrado en los últimos seis años”, declaró Hipkins a los partidarios
laboristas en Wellington.
Con el 97% de los votos escrutados,
el Partido Nacional y su socio de coalición ACT lograron 61 escaños,
suficientes para asegurar la mayoría en un parlamento de 120 escaños.
“Con las cifras actuales, parece que
el Partido Nacional y ACT estarán en posición de formar el próximo gobierno”,
señaló Christopher Luxon.
El antiguo ejecutivo de la aerolínea
Air New Zealand indicó que los neozelandeses habían “votado por el cambio”. La
campaña electoral estuvo dominada por la situación económica cada vez más
difícil y el aumento del costo de la vida que ha afectado a los neozelandeses.
Luxon, de 53 años, que hace cuatro
años trabajaba en el sector privado, prometió medidas para rebajar la presión
fiscal para impulsar la economía. El flamante ganador pasó siete años como
director ejecutivo de Air New Zealand, y fue aclamado como un futuro líder al
entrar en la política en 2019.
En sus primeros 100 días en el cargo,
el Partido Nacional planea una ofensiva contra la delincuencia juvenil, la
prohibición de los teléfonos celulares en las escuelas y eliminar los aumentos
de impuestos al combustible del gobierno laborista.
“Los neozelandeses se van a despertar
no solo en un nuevo día, sino con la promesa de un nuevo gobierno y una nueva
dirección”, aseguró Luxon a sus partidarios en Auckland, que incidió en que
conducirá al país de nuevo por el “buen camino”.
Tanto Luxon como Hipkins habían
intentado atraer a los votantes con promesas de reducir el alto precio de la
gasolina, arreglar la escasez crónica de viviendas y detener la subida
vertiginosa del coste de los alimentos básicos.
“Reduciremos el costo de la vida.
Restableceremos la ley y el orden. Ofreceremos una mejor atención médica y
educaremos a nuestros hijos para que puedan crecer y vivir las vidas que sueñan”,
recalcó Luxon.
En la pequeña ciudad de Waikanae, a
una hora en coche al norte de Wellington, el carnicero Terry McKee dijo que el
creciente costo de la vida era la cuestión electoral más importante.
“Las cosas están siendo difíciles.
Las tasas de interés, los precios del combustible, todo aumenta, pero no sé qué
va a hacer otro gobierno”, señaló.
El Partido Laborista, que consiguió
una victoria rotunda en 2020 bajo la dirección de la ex primera ministra
Jacinda Arden, apuntaba a una dura derrota en esta ocasión.
“Seguir a mi buena amiga Jacinda, no
iba a ser una tarea fácil”, admitió Hipkins. “Yo sabía cuando tomé este trabajo
que iba a ser una batalla cuesta arriba”, concluyó.