Muere a los 100 años Henry Kissinger, el hombre duro de la política exterior de Estados Unidos
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Miércoles 29 de Noviembre de 2023 8:59 pm
+ -El político estadounidense de origen judeoalemán ejerció como secretario de Estado durante los mandatos de Richard Nixon y Gerald Ford. También apoyó a las dictaduras militares en Chile, Argentina, Brasil y Uruguay
Henry Kissinger, el controvertido
secretario estadounidense de Estado en los Estados Unidos con dos presidentes
en el siglo XX falleció este miércoles en su casa, en Connecticut, a los 100
años de edad. Según un comunicado oficial.
El escrito donde se dio el anuncio no
informa las causas del deceso. En cambio resalta que Kissinger fue un respetado
estadista estadounidense.
Medios de Estados Unidos señalan que
el político se encontraba en su hogar en Connecticut.
¿Quién
era Henry Kissinger?
Nacido el 27 de mayo de 1923 en
Alemania, su familia huyó del régimen nazi y llegó a Estados Unidos en 1938.
Sirvió en la 84 División del ejército
estadounidense entre 1943 y 1946. Se le concedió la medalla de bronce por su
servicio.
En 1950 se graduó con honores en
Ciencias Políticas en la Universidad de Harvard. Con su reputación militar y
académica, el presidente Richard Nixon lo nombró asesor de Seguridad Nacional
en 1969 y secretario de Estado en 1973.
Juntos, Nixon y Kissinger definieron
un tipo de política exterior de Estados Unidos agresiva, polémica.
La guerra de Vietnam, los
desencuentros con la Unión Soviética en la Guerra Fría, todos llevan el sello
de Kissinger.
El poderoso secretario de Estado
también ha sido relacionado con la intervención de Estados Unidos en los golpes
de Estado que ocurrieron en América Latina en los años 70.
Al mismo tiempo, fue uno de los
grandes defensores de la política de distensión con China y a él se le atribuye
el restablecimiento de relaciones entre Estados Unidos y el gigante asiático,
en 1972.
Pese a las críticas por la guerra de
Vietnam, Kissinger logró establecer un alto el fuego temporal y fue clave en
los acuerdos de paz de París por los que Estados Unidos se retiró del
conflicto. Eso la valió recibir el Premio Nobel de la Paz, en 1973.
Reconocido estratega, Kissinger
también medió entre Israel y Egipto para poner fin a la guerra de Yom Kippur.
La principal polémica de su gestión
la marcó, sin duda, su relación con América Latina, una región sumida en la
inestabilidad en los años 70. Decidido a contrarrestar la influencia comunista
de la URSS, apoyó a las dictaduras militares en Chile, Argentina, Brasil y
Uruguay.
“La mano de Kissinger no solo fue
visible en su papel en el Cono Sur, sino también en Centroamérica. Creo que la
mayoría de la gente no se da cuenta de que Estados Unidos jugó un papel en la
desestabilización de los gobiernos de Bolivia y Uruguay, trabajando con los
brasileños”, señaló en su momento el historiador Stephen G. Rabe.
Así, tuvo un papel clave en la
Operación Cóndor, la campaña de represión y espionaje en estos países que
derivó en la desaparición y asesinado de opositores a los regímenes
dictatoriales.
Para algunos, Kissinger fue un
criminal de guerra que eludió la justicia. Otros lo consideran un estratega
brillante. Indudablemente, fue uno de las figuras políticas más influyentes de
Estados Unidos.
“Estados Unidos no tiene amigos ni
enemigos permanentes, solo intereses”, es una de sus frases más conocidas, y
una que definió su estilo político.
Apasionado del futbol, tras salir de
la política Kissinger fundó una empresa de consultoría internacional: Kissinger
Associates.
Kissinger jamás mostró atisbo de
arrepentimiento por sus acciones, menos se disculpó. Cuando un periodista de la
cadena estadounidense CBS le preguntó, con motivo de sus 100 años, sobre sus
acciones en Camboya, Kissinger se molestó. “Haces este programa porque voy a
cumplir 100 años. Y eliges un tema de algo que ocurrió hace 60 años. Tienes que
saber que era un paso necesario”.
Pese a que fue sometido a diversas
cirugías cardíacas, se mantuvo activo hasta el final, dando consejos sobre la
guerra entre Rusia y Ucrania, y la relación con China. Fue sobre este país que
lanzó una de sus últimas advertencias: “Ambas partes se convencieron de que la
otra representa un peligro estratégico. Vamos camino a una confrontación entre
grandes potencias”.