Dimite primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, tras protestas estudiantiles
Lunes 05 de Agosto de 2024 9:20 am
+ -Hasina, de 76 años, llamada la Dama de Hierro, huyó del país; militares anuncian un gobierno provisional
La primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, huyó este
lunes del país que gobernó durante 15 años y los militares anunciaron un
"gobierno provisional" tras más de un mes de mortales protestas
antigubernamentales en esta nación del sur de Asia.
Hasina, de 76 años, llamada la Dama de Hierro, intentó
sofocar las multitudinarias manifestaciones que sacudían el país desde inicios de
julio, pero se vio obligada a huir tras una jornada de disturbios que dejaron
casi 100 muertos el domingo.
En un mensaje a la nación retransmitido por la televisión
estatal, el jefe del ejército, el general Waker-Uz-Zaman, declaró que Hasina
había dimitido y que los militares formarían un "gobierno
provisional".
“El país sufrió mucho, la economía se ha visto golpeada, muchas personas murieron, es hora de acabar con la violencia”, subrayó Waker. “Espero que la situación mejore después de mi discurso”, añadió.
Hasina, quien obtuvo un cuarto mandato en enero tras unos
comicios sin oposición real, huyó del país en helicóptero, indicó una fuente
cercana a la dirigente a AFP.
Poco después, cientos manifestantes irrumpieron en su
residencia oficial en Daca, la capital del país. La fuente, que habló bajo
condición de anonimato, precisó que Hasina trató primero de irse en un
vehículo.
Multitudes de personas ondearon banderas y algunos bailaron
encima de un tanque el lunes, tras más de un mes de violentas protestas en este
país musulmán de 171 millones de habitantes.
Las manifestaciones empezaron a inicios de julio, después
de la reintroducción de un sistema de cuotas que reservaba más de la mitad de
los empleos públicos a determinados grupos.
Al menos 300 personas murieron desde el inicio de las
movilizaciones el 1 de julio, según un recuento de AFP basado en informes de la
policía, autoridades y médicos en hospitales.
Estatua
derribada
El canal 24 de Bangladesh emitió imágenes de multitudes
corriendo hacia el recinto oficial de la primera ministra, saludando a las
cámaras y celebrando la huida de la mandataria.
Otros manifestantes derribaron una estatua del padre de
Hasina, el jeque Mujibur Rahma, héroe de la independencia del país en 1971.
Antes de que los manifestantes irrumpieran en el palacio en
Daca, el hijo de Hasina había instado a las fuerzas de seguridad a bloquear
cualquier intento de toma de poder.
“Su deber es mantener a salvo a nuestra gente y a nuestro país, y defender la Constitución”, escribió en Facebook Sajeeb Wazed Joy, quien reside en Estados Unidos.
Durante los disturbios, las fuerzas de seguridad apoyaron
al gobierno de Hasina. Ante la magnitud de las protestas, el Tribunal Supremo
suavizó el sistema, pero las manifestaciones continuaron y se convirtieron en
llamamientos a la dimisión de Hasina.
Al menos 94 personas murieron el domingo, entre ellos 14
agentes de la policía, en el día más mortífero del movimiento de protesta.
Manifestantes y partidarios del gobierno se enfrentaron en
todo el país con palos y cuchillos, y las fuerzas de seguridad abrieron fuego.
En enero de 2007, los militares habían declarado el estado
de emergencia tras una crisis política generalizada en el país, e instauraron
un gobierno provisional respaldado por el ejército durante dos años. Hasina
llegó al poder justo después, en 2009.
Grupos de derechos humanos acusaron a su gobierno de
utilizar las instituciones para afianzarse en el poder y acabar con la
disidencia, entre otros mediante ejecuciones extrajudiciales de activistas
opositores.
“La
protesta final”
Soldados y policías protegieron el lunes las vías de acceso
a la residencia de Hasina con alambres de espino, pero multitudes de personas
inundaron las calles y derribaron las barreras.
El periódico Business Standard calculó que había hasta
400,000 manifestantes en las calles, aunque la cifra no pudo ser verificada.
“Llegó el momento de la protesta final”, declaró Asif Mahmud, uno de los principales líderes del movimiento de protesta.
Durante su discurso el lunes, el jefe del ejército, el
general Waker-Uz-Zaman, subrayó que el papel de los estudiantes era ahora
"mantener la calma y ayudarnos".
Los soldados y la policía no siempre intervinieron para
frenar las protestas del domingo, a diferencia de lo ocurrido en el último mes,
en la que las manifestaciones se saldaron con muertos.