Trump indulta dos pavos por Acción de Gracias y bromea con anular los perdones que dio Biden
Martes 25 de Noviembre de 2025 1:50 pm
+ -Trump cumplió con la tradición de indultar a dos pavos que se salvarán de acabar en la cena por el Día de Acción de Gracias
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cumplió con la tradición de indultar a dos pavos por Acción de Gracias, salvándolos de ser parte de la cena del Día de Acción de Gracias, y bromeó con que anula los perdones otorgados a pavos por su antecesor, Joe Biden, por haber sido firmados, dijo, con un “bolígrafo automático”.
Las aves afortunadas son Gobble (“engullir”) y Waddle (“pavonearse”), nacidas en julio en una granja de Carolina del Norte y con un peso de 24 y 23 kilos, respectivamente.
Acompañado de la primera dama, Melania Trump, el presidente perdonó a los pavos en un acto celebrado en la Rosaleda de la Casa Blanca, un jardín que Trump ordenó pavimentar.
“Gobble, quiero decirte algo muy importante: estás indultado de forma incondicional”, dijo Trump ante el pavo, que glugluteó al saberse perdonado.
El otro ejemplar, Waddle, que ejerce como suplente, no estuvo presente. “Waddle está desaparecido, pero no importa. Fingiremos que está aquí”, añadió el mandatario.
Esta ceremonia es una de las tradiciones más pintorescas de la Casa Blanca por Acción de Gracias, donde los presidentes suelen combinarla con bromas políticas. Trump aprovechó para criticar a sus rivales y bromeó sobre los indultos presidenciales de pavos firmados por Biden, asegurando que su uso del “autopen” los hacía “totalmente inválidos”.
El mandatario también comentó en tono de broma que los pavos de Biden, Peach y Blossom, estaban en camino de ser “procesados”, pero finalmente decidió perdonarlos. Incluso mencionó que pensó en bautizar a los pavos de este año con los nombres de los congresistas demócratas Chuck Schumer y Nancy Pelosi, pero desistió.
Los dos pavos, de plumaje blanco y cabeza azul, fueron seleccionados en el concurso anual de la Federación Nacional del Pavo, durmieron en un hotel cercano a la Casa Blanca y, tras recibir el indulto presidencial, pasarán el resto de sus vidas bajo el cuidado de la Universidad Estatal de Carolina del Norte.
Cada año, aproximadamente 46 millones de pavos son sacrificados en Estados Unidos para la cena de Acción de Gracias, festividad que recuerda el banquete compartido entre colonos ingleses e indígenas en 1621 para celebrar una buena cosecha.
El indulto presidencial de pavos se popularizó en 1989 con George H. W. Bush, quien bromeó al perdonar a un pavo en respuesta a una protesta ambiental frente a la Casa Blanca, iniciando así la tradición que se mantiene hasta la actualidad.
