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Apuntes



MARIO CÁRDENAS DELGADO (ACPE)

Reunión fructífera


Jueves 06 de Diciembre de 2018 7:54 am


EL gobernador José Ignacio Peralta Sánchez publicó en su cuenta de Facebook, el domingo anterior: “Instalamos el Grupo de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz. El Gobierno del Estado refrenda su disposición a conjuntar esfuerzos por el bien de sus habitantes”. En el acto estuvieron presentes Indira Vizcaíno Silva, coordinadora estatal del Gobierno Federal y virtual secretaria técnica del nuevo organismo; el general Celestino Ávila Astudillo, comandante de la 20ª Zona Militar, así como varios funcionarios federales y estatales.

Lo anterior dejó clara la disposición del Mandatario estatal y la representante presidencial, de trabajar en forma coordinada para recuperar la paz y tranquilidad en Colima, porque los dos se identifican con el espíritu de servicio y además se conocen desde hace varios años. Así que, reitero, no había reticencia de Nacho para que Indira desempeñara su labor, aunque sí, acorde con algunos de sus homólogos, expresó reservas sobre la inclusión de los “superdelegados” en los grupos de coordinación.

Dos días después, en la reunión que los integrantes de la Conferencia Nacional de Gobernadores tuvieron con el presidente Andrés Manuel López Obrador, Enrique Alfaro Ramírez, que hoy rinde protesta como Gobernador de Jalisco, expuso con argumentos contundentes la oposición de los mandatarios estatales de que los delegados federales para Programas Sociales asumieran la Secretaría Técnica de los grupos de coordinación, postura que el Presidente aceptó, y de inmediato dispuso que los delegados no desempeñen la función citada.

Tres cosas quedan claras con este hecho: el liderazgo que gana Enrique Alfaro al interior de la Conago, porque tras 2 horas de diálogo de sordos, convenció a López Obrador de cambiar una decisión tomada, lo que no era sencillo; la disposición de éste para rectificar una decisión, si se le convence con razones, y lo más importante, que se sientan las bases para mantener, e incluso ampliar, el diálogo entre los mandatarios de los dos niveles, lo que fortalecerá la implementación de políticas públicas y permitirá aclarar “malos entendidos” por falta de información, como explicó en conferencia de prensa el desacuerdo con los gobernadores.

En este contexto se inscribe la disposición de AMLO para seguir reuniéndose con ellos, y la ratificación de algunos temas importantes, como el referente a que “ya no habrá discrecionalidad de que si un Gobernador se porta bien, hasta le dan recursos por anticipado, y si se porta mal, se los retrasan”. Además, no se utilizarán los instrumentos que tiene el gobierno para tomar represalias contra gobernadores, ni se retrasarán los fondos que por ley corresponden a los estados, por el contrario, se mantendrán los recursos conforme a la ley, con incremento de 10 por ciento nominal y 7 por ciento real, y no subirán los impuestos.

Otro tema de interés para las entidades, en particular para Colima, es el de la creación de 100 nuevas universidades, postura que varios gobernadores no comparten, porque consideran que es mejor apoyar las que ya existen, postura que comparto, porque en el caso de nuestro estado, por ejemplo, la Universidad de Colima o la Tecnológica de Manzanillo, que tienen experiencia, personal capacitado, infraestructura y un trabajo acreditado, pueden abrir un campus en Armería, que es donde se tiene proyectado crear la nueva institución.

Es conveniente que la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) haga un planteamiento al respecto, que podrían apoyar los gobernadores, considerando que cuenta con el soporte técnico y académico para hacerlo, y por otra parte, que sus integrantes entregaron a López Obrador el documento “Visión y acción 2030. Propuesta, para renovar la educación superior en México”, que plantea, entre otros, los siguientes ejes de transformación de la educación suprior:

Mejor gobernanza para el desarrollo del sistema de educación superior; ampliación de la cobertura con equidad y calidad, lo que demanda un acuerdo entre los gobiernos estatales, el Gobierno Federal y las universidades, para reducir la deserción y ampliar la oferta educativa; mejora continua de la calidad de la educación superior, mediante el diseño de un nuevo modelo de calidad, la creación del sistema nacional para la evaluación y acreditación y un impulso a la internacionalización; certeza jurídica y presupuestal para el desarrollo de la educación superior, y ejercicio pleno de la responsabilidad social.

Como el lector puede colegir, la propuesta de la Conago sobre las 100 universidades podría fructificar si, como ocurrió con el tema de la seguridad, se muestra al Presidente otra alternativa viable, para lo cual deben involucrarse las universidades y los gobernadores. El mandatario Nacho Peralta y el rector de la UdeC, José Eduardo Hernández Nava, tienen la palabra.

En cuanto a la reunión AMLO-Conago, reitero que me parece fructífera, porque abre la posibilidad de que las divergencias entre los actores que intervienen se resuelvan de manera tersa, como en esta ocasión, mediante el diálogo inteligente y bien intencionado. Ojalá así sea, por el bien de México.

 

apuntesmario@hotmail.com