Oráculo político
PEDRO CASTILLO VALDEZ
La salud en vilo
Jueves 18 de Julio de 2019 7:19 am
HACE unos días, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, anunció la creación del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, el cual sustituirá al Seguro Popular creado en 2003, que a decir del Presidente y sin presentar ninguna cifra, asegura que no ha funcionado porque ni es seguro y ni es popular; pero ante esta decisión, ¿será que los mexicanos estamos a un paso de transitar a un esquema de salud, comparado al de los países escandinavos, Canadá o Inglaterra? El sistema de salud pública en México es considerado como uno de los mejores y de mayor sentido social a nivel internacional, el cual consta de tres instituciones, una es el IMSS que se encarga de brindar los servicios al sector poblacional asalariado de la esfera privada; el ISSSTE, para el sector social dependiente del estado; y el Seguro Popular, destinado a la población que no es asalariada y que por ende no puede incursionar a alguno de los otros sistemas. En los 16 años que tiene de existencia, con sus aciertos y errores, el Seguro Popular afilió a más de 55 millones de mexicanos, quienes sumados a los afiliados al IMSS e ISSSTE, da una cobertura de salud del 82 por ciento a nivel nacional, y que en parámetros de la Organización Mundial de la Salud, México es considerado como un país con cobertura universal en los servicios de salud; además de que desde el año 2000 a 2019, el gasto público en materia de salud creció un 210 por ciento en términos reales, no sin mencionar los avances en índices de salud, que para dar un ejemplo, desde 1995 no hay un caso de sarampión en el país, mientras que a nivel mundial este año se cuadruplicaron. Este sistema de salud se sostiene bajo tres parámetros fundamentales: uno, es que el Estado es el rector de la salud pública, que significa que es la Federación quien marca la directriz, la evaluación y certificación; dos, el financiamiento es público, es decir, que las tres instituciones, IMSS, ISSSTE y SP reciben recursos públicos que son de todos los mexicanos para su sostenimiento bajo un instrumento equilibrado de presupuesto, basado en el número de personas afiliadas; y tres, la prestación del servicio es de carácter descentralizada, que se refiere a que los hospitales, consultorios y centros de atención son administrados por los gobiernos estatales e institutos no lucrativos de carácter público. Con el anuncio que dio hace unos días AMLO, de eliminar el Seguro Popular para dar paso a la creación del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, sosteniendo que en los últimos 30 años de políticas neoliberales en este país, el sistema de salud que ha imperado se encuentra derruido, desmantelado y en penumbras; llama la atención que el Presidente no hubiese presentado ninguna cifra estadística y ni tampoco una base de evidencia científica que pueda sostener esos dichos y esta decisión de política pública; que incluso sería interesante hacer la mención de que el Seguro Popular que AMLO tanto desprecia, fue referencia para que el entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presentara su programa de salud en ese país conocido como Obamacare. Durante campaña y ya como Presidente electo y en funciones, AMLO ha dicho que el esquema de salud de nuestro país debe ser como el de los países escandinavos, pero las decisiones que está tomando son muy alejadas al sistema de salud que opera en esos países, pues regresar a la Federación la centralización de la prestación de los servicios, como está proponiendo el Presidente a los gobernadores de los estados, es una señal más parecida a la que aplican los países como Cuba, Venezuela y Corea del Norte. Nuestro sistema de salud no puede ser regresivo, sino progresivo, y es la universalización de los servicios de salud el camino a seguir como sucede en los países escandinavos, Canadá e Inglaterra, donde el ciudadano decide dónde ser atendido y sea el recurso público el que siga al usuario y no viceversa. ¡Despierta, Colima! ¡Hasta la próxima! Facebook: Pedro FiFi Castillo Twitter: @pfedrie
