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A propósito...



FERNANDO MORENO PEÑA

Ni grilla ni chisme, es política


Sábado 14 de Septiembre de 2019 7:58 am


LA confrontación y las acusaciones de Claudia Yáñez Centeno contra Indira Vizcaíno, así como la respuesta de la delegada Vizcaíno y la defensa de su padre, Arnoldo Vizcaíno, son un tema político de interés estatal, porque se da entre actores políticos que ganaron la Presidencia de la República, militantes del mismo partido que gobierna a nivel federal.

En lo personal, analizaré lo dicho y publicado, sin suponer ni imaginar, pues no es mi costumbre cuando escribo o declaro, si no que desmenuzaré el asunto, para tratar de entender la razón subyacente en el conflicto.

La confrontación entre políticos integrantes de la coalición en Colima, Juntos Haremos Historia, que a nivel nacional llevó a la Presidencia de la República a AMLO, es algo destacable, pues no sólo se han separado sino que existe un enfrentamiento claro entre ellos.

Diputados locales que ganaron la elección gracias al voto de AMLO, renunciaron a los partidos que los postularon para transitar a otros institutos políticos, algunos optaron por ser independientes, inconformes por la forma dictatorial, según acusaron en su momento, de la toma de decisiones al interior de la mayoría legislativa, y a la falta de respeto a varias diputadas que vieron ofendida su dignidad como mujeres y a quienes se acusó de comportamientos indebidos.

Algunas legisladoras presentaron ante la Fiscalía estatal denuncias graves contra el diputado Vladimir Parra, denuncias que fueron ratificadas y que no han sido resueltas y que incluso, las diputadas de Morena dieron una conferencia de prensa en la Ciudad de México para denunciar las agresiones y el acoso de su compañero diputado Vladimir Parra.

El primer coordinador de la fracción de Morena, Miguel Ángel Sánchez, renunció a Morena y se fue al Verde, otros se fueron a otros abanderamientos, inconformes con Vladimir Parra, quien se convirtió en el coordinador de Morena al haber provocado la salida de sus excompañeros.

Los conflictos al interior de Morena han escalado en la jerarquía política y se han hecho evidentes las diferencias existentes entre la diputada federal Claudia Yáñez y la delegada federal Indira Vizcaíno, los conflictos entre la delegada y la senadora Gricelda Valencia, las diferencias con la alcaldesa de Manzanillo, Griselda Martínez, y con el senador Joel Padilla. 

Estas diferencias las confirmó recientemente Arnoldo Vizcaíno en la entrevista radiofónica donde arremetió contra las personalidades mencionadas e hizo evidente el enfrentamiento de su hija, Indira Vizcaíno, contra todos ellos.

En la disputa por la dirigencia nacional de Morena, Indira Vizcaíno y los diputados locales lidereados por Vladimir Parra y que hacen equipo con ella, no están respaldando al diputado federal Mario Delgado, quien a su vez es respaldado por el diputado Guillermo Toscano y otros más. Ello evidencia que en esa disputa por la dirigencia, la fracción legislativa de Morena en Colima está dividida, aunque en la toma de decisiones y en las votaciones, el diputado Vladimir Parra se impone al grupo de Guillermo Toscano y obtiene sus votos en el sentido que Vladimir lo decide.

Indira Vizcaíno, en su carácter de delegada estatal, al igual que la mayoría de los superdelegados, están jugando para la dirigencia nacional con Bertha Luján, quien preside el Consejo Político Nacional de Morena y aspira a la presidencia nacional, su operador político nacional es Gabriel García Hernández, quien a su vez coordina a todos los superdelegados y que fue ya denunciado, según lo publicado en la columna de Armando García Soto, de dar línea a los superdelegados que a su vez controlan “a los servidores de la Nación”, que son quienes realizan los censos y aterrizan los programas sociales de AMLO en los estados.

Por esa razón, el presidente AMLO recomendó y fue obedecido por su partido, que la contienda por la dirigencia nacional de Morena no fuera una consulta abierta a los militantes, sino mediante una encuesta, para que los superdelegados no utilicen los padrones de beneficiarios o de militantes para definir la presidencia de Morena a nivel nacional.

La dirigencia se va resolver por encuesta y es lógico, AMLO no se va a dejar arrebatar el partido, él dirá cómo hacer la encuesta, ya lo hizo una vez cuando le ganó a Marcelo Ebrard y lo hizo también cuando Claudia Sheinbaum le ganó a Ricardo Monreal. A AMLO le funcionan las encuestas y las consultas a mano alzada. 

Además, AMLO quiere evitar que haya denuncias de uso de recursos públicos en la contienda interna de Morena, porque él mismo impulsó y apoyó la ley que castiga con cárcel quien desvíe programas y fondos gubernamentales en elecciones.

Precisamente, la diputada Claudia Yáñez Centeno acusó a la delegada Indira Vizcaíno “de realizar labores proselitistas utilizando servidores públicos y becarios de los programas sociales, entre quienes se encuentran personas de la tercera edad, bajo la promesa de recibir apoyos”. Eso quiere evitar AMLO, por ser delito, por lo que la acusación en contra de la delegada Vizcaíno es muy seria y grave si es que la diputada Yáñez Centeno aporta las pruebas pertinentes para que se haga la investigación correspondiente, como anunció que, en breve, lo hará en la Cámara de Diputados.

Según parece, la diputada Claudia Yáñez Centeno estará jugando al lado de su líder, Mario Delgado, en la contienda por la dirigencia nacional; o sea, Indira y Claudia están en bandos contrarios en esa contienda, ello evidencia el origen político de su confrontación, que no es chisme y no es grilla, es la realidad política la que las enfrenta y nos dice que en la otra contienda por la candidatura de Morena a la gubernatura no jugarán juntas, estarán confrontadas, ambas quieren lo mismo, la candidatura, no es chisme ni grilla, es la candidatura a Gobernadora lo que las confronta.

Sobre la acusación que se hace a Indira Vizcaíno en el asunto de Altozano, donde se le pretende imputar un acto de corrupción, existe una denuncia ante el Ministerio Público, la 695-17 del 6 de noviembre de 2017; en consecuencia, no es chisme, sino una realidad, pues la denuncia existe y tiene contenido político, evidentemente. Otra cosa es que sean ciertos o no los hechos que se le imputan, será la autoridad judicial quien determine si existe irregularidad o acto de corrupción.

Sobre este tema, lo pertinente es que quien acuse pruebe, y quien está siendo acusada exija que la autoridad resuelva, y no lo tome a chisme o grilla, porque claro que es un tema político, que tiene que ver con la política y con la lucha interna entre los actores políticos de Morena, porque AMLO ya declaró que no es florero ni tapadera de nadie.

Esa es la razón por la que se hace una acusación de corrupción, aunque jurídicamente no esté acreditada, se hace con el propósito político de prender los “focos de alarma”, de conductas contrarias a lo que AMLO pregona.

EL MÉRITO, SER ENEMIGA DEL GOBIERNO

Otra de las acusaciones serias que hace Claudia Yáñez Centeno es adjudicar a Indira Vizcaíno tratar de imponer a María Elena Adriana Ruiz Visfocri como titular de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Colima, propuesta por Vladimir Parra, quien afirma que es abogada de Arnoldo Vizcaíno, papá de la delegada Indira Vizcaíno.

Vladimir Parra aseguró que Adriana Ruiz Visfocri puede ser integrada por tercera vez a la terna para presidir la CEDH, y afirma que Adriana Ruiz es idónea para el cargo porque es una luchadora social y está en contra del Gobierno del Estado, lo que la califica para ser Presidente de la CEDH.

En otras palabras, ese es su mérito, ser enemiga del gobierno y la pretensión de Vladimir y seguidores en el Congreso, es que sea alguien que tenga el mérito de ser enemiga del gobierno y confrontar al Gobernador. Para eso sirven las mayorías groseras, como dice AMLO, para torcer la ley y hacer nombramientos a modo, a conveniencia de un partido o de una persona. 

Cabe preguntar ¿si tienen la mayoría del Congreso y pueden tomar las decisiones que quieran, no les basta eso?, lo que quieren no es legislar, sino confrontar al Gobierno del Estado, como dijo Porfirio Muñoz Ledo a sus compañeros diputados, “¡chin... x$%&@..., qué manera de legislar!”.

Este tema repito, no es chisme ni grilla, y como la confrontación continúa, lo continuaremos el martes próximo.