Letras y números
JOSÉ ÁNGEL BRAMBILA LEAL
La batalla que viene
Lunes 14 de Octubre de 2019 7:09 am
NO se crea usted, pero ese asuntito de la política desde hace un buen rato se ha convertido en un objetivo cada vez más perseguido por un buen número de personajes que, aunque usted no les vea patas para jinete, ellos se sienten bordados a mano, como tocados por una varita mágica que, nomás porque sí, los llena de una sabiduría sobre todos los asuntos de la cosa pública, por lo que después de ocupar un puesto de diputado, alcalde, regidor o lo que sea, se consideran lo suficientemente capaces de ocupar la silla para gobernar nuestro estado. Aún y cuando faltan 600 días para el domingo 6 de junio de 2021, fecha en que estarán en juego 15 gubernaturas y más de mil 770 alcaldías a lo largo y ancho del territorio mexicano, aquí en Colima desde hace un buen rato ya se sienten las patadas que muchos aspirantes se tiran por debajo de la mesa, y créame que, como en la escalofriante lesión que sufrió Giovani dos Santos en el partido América contra Guadalajara, muchas de esas patadas se tiran con tacones muy puntiagudos y de un metal que arrasa con piel y músculo, y hasta puede llegar al hueso que tanto se pelean los políticos en escena. Como nunca antes, por todos lados aparecen nombres, apellidos y hasta apodos de quienes se han venido apuntando para ocupar la casona de la Calzada Galván, como si no se necesitaran más virtudes que tener un buen padrino y apuntarse a tiempo. Es cierto que la mayoría de los que se vienen mencionando provienen del partido del hombre que hoy gobierna la Nación, como suponiendo que con el solo hecho de ser del partido gobernante se tuviese garantizado el triunfo; sin embargo, el poder desgasta y Andrés Manuel ya no será candidato, por lo que la ola de 2018 es irrepetible, como nunca volvió a repetirse la ola Fox. Si bien en estos momentos, sólo del partido de Morena hay varios nombres que suenan al amparo y circunstancias que se están viviendo, como los de Mario Delgado, Indira Vizcaíno y Claudia Yáñez –cada uno de ellos en condiciones muy particulares–, hay varios integrantes de esa misma institución que sueñan con que ellos también tienen posibilidades, ya que, como lo decía líneas arriba, sus mismos colaboradores les hacen creer que mágicamente son capaces de llegar a la gubernatura. La batalla ni siquiera ha empezado, pero en los vestidores de los participantes éstos empiezan a estirar los músculos y a hacer ejercicios de calentamiento, mientras sus ayudantes sacan los guantes y los empiezan a revisar, tratando de adivinar qué tipo de guantes usarán los rivales, si no tienen sobrepeso y si no están sobre entrenados. La verdadera batalla se dará antes de que los contrincantes suban al ring, y cuando los que hayan superado las normas establecidas en el reglamento suban al cuadrilátero, sólo esperarán el silbatazo del réferi para abalanzarse unos contra otros. La batalla será campal. ¡Todos contra todos! De momento no se aceptan apuestas… ABELARDO TORRES LUGO ¿Quién no se acuerda de la época sesentera y sementera, cuando surgieron sensacionales grupos musicales que causaron furor en aquel inolvidable Colima de románticos noviazgos y batallas estudiantiles, que a veces pareciera que se van quedando en el olvido, pero que todos los que la disfrutamos la traemos tatuada en la memoria y en el corazón y nos negamos a que desaparezca entre la polvareda de los nuevos tiempos? El pasado sábado, Abelardo Torres, saxofonista del grupo Génesis (entre otros muchos grupos), organizó una hermosa reunión para celebrar sus primeros 70 apenas). Fue un espléndido festejo que nos permitió volver a escuchar aquellas voces de antaño y que merece una reseña acorde al esfuerzo realizado. Para su esposa Marichuy, hijos, nietos y toda la extraordinaria familia que hizo del evento una celebración imborrable, nuestro más extenso reconocimiento. ¡Felicidades amigo y que vengan muchos años más! PD. ¿Gusta opinar? Lo espero en Las Mentadas. jbrambilaleal@yahoo.com.mx
