Semana turbulenta
MANUEL GODINA VELASCO
Miércoles 13 de Noviembre de 2019 8:01 am
COMO comentarista de temas políticos quisiera hablar de temas agradables, de aciertos y toma de decisiones que fueran motivo de reconocimiento y aplauso para los funcionarios, gobernantes y legisladores, pero por más que le quiera uno buscar el lado bueno a las acciones o hechos que ocurren en el escenario político mexicano de los últimos días, solamente encuentra uno situaciones criticables que como periodistas tenemos la obligación de expresar públicamente la opinión o punto de vista sobre tales situaciones. La pasada semana, del lunes 4 al domingo 10 de noviembre, podríamos clasificarla como una excepcional semana turbulenta, porque en escasos 7 días sucedieron graves acontecimientos que han despertado la conciencia de la ciudadanía mexicana, al mismo tiempo que la crítica internacional. Sobre la amenaza gringa de intervenir en México para acabar con la delincuencia hablaremos próximamente. Tras el cacareado “punto de inflexión” de la violencia criminal que el gobierno esperaba comenzara a disminuir, se diluyó un tanto por el fallido operativo en Culiacán, pero más por la masacre perpetuada el lunes 4 de noviembre contra un grupo de indefensos ciudadanos con doble nacionalidad, mexicana y norteamericana, cuya mayoría de integrantes de dicho convoy familiar eran mujeres, niños y hasta bebés, con ello se vino a demostrar una vez más que los grupos criminales no se tientan el corazón para asesinar y quemar vivos a todo aquel que por desgracia se les atraviese en el camino. El horror de esa sanguinaria masacre con saldo de 9 muertos fue condenado por la gran mayoría de los mexicanos, pero también se convirtió en dura crítica y escarnio de casi todos los grandes periódicos del mundo, que exhiben a un país cuyo gobierno no sabe, no quiere o no puede cumplir con la más importante de las funciones de un Estado: proteger a sus gobernados de la inseguridad y la violencia para el cuidado de la vida humana y salvaguardar el patrimonio de sus habitantes. Por ello se critica la insensibilidad del gobernante, que expresa un común pésame a los familiares y en lugar de visitar a los LeBarón dedica tiempo para recibir en Palacio Nacional al pitcher Luis Urquidi de los Astros de Houston. El martes 5 de noviembre, durante su conferencia mañanera, el Presidente se lanzó de nuevo contra los periodistas y medios, para él incómodos, a los que reprochó de que “muerden la mano del que les quitó el bozal”, pública ofensa que reporteros y comentaristas le critican fuertemente al Presidente. El miércoles 6 de noviembre, de nueva cuenta un grupo de vándalos normalistas bloquean vías férreas en Michoacán, secuestran varios autobuses como presión para el que gobierno les otorgue 947 plazas a los pasantes de las normales michoacanas, con lo cual el chantaje de delincuentes, vándalos y reclamantes sociales cuentan con una moneda de cambio para conseguir lo que quieran, sin que los infractores de la ley no sólo no sean castigados, siquiera ser reconvenidos de palabra. El jueves 7 de noviembre, el Presidente cita a senadores y diputados federales en Palacio Nacional, donde sin el menor rubor ordena a los legisladores “no quitarle ni una coma al presupuesto de egresos”, que ante el reclamo de algunos para disponer de recursos para diversas prioridades, los acusó diciéndoles: “hay aquí algunos que se están volviendo conservadores”, tras lo cual pierde la paciencia y se retira del salón sin despedirse, acompañado por una rechifla de varios diputados del PT, PES y uno que otro morenista, con lo cual se comprueba el ambiente de crispación que ya impera en la 4T. El viernes 8 de noviembre, se da a conocer el desaseo de la votación en el Senado para ungir a Rosario Piedra Ibarra, recomendada por AMLO como presidenta de la CNDH, quien sospechosamente ganó por los votos fantasmas de Monreal. El PAN exige repetir votación. Y para cerrar la semana, los militares en Bolivia destituyen al presidente Evo Morales, lo cual debe poner nervioso al gobierno mexicano, cuyas relaciones con el Ejército son ya críticas. *Analista político
