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Apuntes



MARIO CÁRDENAS DELGADO (ACPE)

Regreso a clases


Jueves 06 de Agosto de 2020 7:03 am


DE acuerdo con lo que informó el lunes pasado Esteban Moctezuma Barragán, titular de la Secretaría de Educación Pública, el 24 de agosto próximo 30 millones de estudiantes de preescolar, primaria, secundaria y bachillerato iniciarán las actividades académicas correspondientes al ciclo escolar 2020-2021. La novedad es que debido a la epidemia del Covid-19, las clases serán a distancia, por lo menos hasta que el semáforo epidemiológico esté en verde.

El funcionario comentó al respecto que el modelo pedagógico que prevalecerá en este proceso será híbrido, es decir, se utilizarán tanto la educación a distancia como la presencial, de acuerdo con las necesidades de cada uno de los sistemas educativos estatales. En este caso, explicó el político y economista, se aplicarán las siguientes medidas para asegurar el bienestar de las comunidades escolares:

Activar los comités participativos de salud escolar; garantizar el acceso a agua y jabón en todos los planteles escolares; establecer el cuidado especial que recibirán los profesores pertenecientes a grupos vulnerables, quienes recibirán atención prioritaria en los servicios de salud; uso obligatorio del cubrebocas en los planteles; mantener la sana distancia en las entradas, salidas y recreos, y la asistencia del alumnado en forma alternada.

Asimismo, maximizar el uso de los espacios abiertos; suspender actividades que generen congregaciones; detección temprana de enfermos; cierre completo del centro escolar por 15 días, en caso de existir algún caso positivo en la comunidad, y brindar apoyo socioemocional a docentes y estudiantes. Estas medidas, reitero, son para la etapa presencial, que se dará solo en caso de que el semáforo esté en verde, lo que podría tardar varios meses, de acuerdo a la tendencia actual.

Mientras tanto, las clases se darán a distancia, a través de las redes sociales, de seis canales televisivos y de la radio, respecto de lo cual Moctezuma comentó que las sesiones por estos medios tienen base pedagógica y contarán con valor curricular, por lo que los alumnos serán evaluados sobre su contenido por los maestros, que son “insustituibles”, enfatizó, en el proceso de aprendizaje.

Qué bueno que Moctezuma reconoce esto, porque si bien es digna de reconocimiento la concertación que el Gobierno de México hizo con los concesionarios de TV Azteca, Televisa, Imagen Televisión y Grupo Multimedios para trasmitir las clases, la experiencia nos dice que la mayor parte del éxito del proceso educativo se finca en la interacción entre los maestros y sus alumnos. Es positivo que se vayan a producir y trasmitir más de 4 mil 500 programas de televisión y 640 de radio, entre otras emisiones, pero está claro que se trata de una medida emergente, obligada por la pandemia.

En tal contexto deben considerarse otros factores que podrían incidir de manera desfavorable en el proceso educativo, como el hecho de que muchos padres de familia no tienen conocimientos, tiempo ni disposición para apoyar a sus hijos, porque consideran, erróneamente, que esta es tarea exclusiva de los maestros, a lo que deben agregarse otras situaciones que abonan a la inequidad educativa, como la desigualdad social, la falta de equipos, conectividad e incluso de energía eléctrica en algunas comunidades del país, entre otros.

En el terreno laboral, de acuerdo con el artículo sobre “La escuela que se nos fue”, publicado ayer por el académico y periodista Carlos Ornelas en el periódico Excélsior, mientras que el Comité Nacional del SNTE apoya las medidas gubernamentales y demanda respeto a los derechos de los maestros, capacitación digital y entrega de equipos al 30 por ciento del magisterio de educación básica, los líderes de la CNTE, fieles a su estilo, impugnan el programa o le ponen barreras y se montan en la ola para exigir plazas e interinatos, veremos si otra vez cede el Presidente a sus caprichos.

En otro punto de su texto, el doctor Ornelas lanza esta certera advertencia: “¡Qué bien que el gobierno haya firmado acuerdos con las televisoras! ¡Qué bueno que empiecen las clases y se disminuyan las pérdidas! Pero me parece un desacierto que el secretario Moctezuma haya dicho que ‘se trata de un esfuerzo equitativo, ya que el 94 por ciento de las familias mexicanas tiene acceso a la televisión, lo que garantiza que el programa llegue a casi todos los hogares del país’. El 6 por ciento restante son los desfavorecidos de siempre.

“Al contrario, si entendemos equidad en los términos de Amartya Sen, de ofrecer más a quienes menos tienen, de tratar desigual a los desiguales, entonces con este proyecto la disparidad social crecerá. Donde las familias tienen computadoras u otros medios y conexión a la red, los niños tendrán más contacto, aunque sea virtual, con sus maestros, podrán hacer sus tareas y juntar sus experiencias. Espero que, tras la emergencia, demos pasos hacia la verdadera equidad, porque, de ésta, los segmentos pobres saldrán más dañados”.

Estoy de acuerdo con la apreciación sobre la inequidad del investigador, pero pondero el hecho de que el gobierno de López Obrador haya buscado una alternativa de solución real para un problema real. Ojalá este hecho marque un nuevo derrotero en la 4T. Ojalá.


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