Despacho político
ARMANDO MARTÍNEZ DE LA ROSA
Un acierto
Miércoles 23 de Septiembre de 2020 7:22 am
1.- La Secretaría de Salud federal ha tenido, por fin, un acierto. El vocero de la pandemia, don Gatell, informó ayer el adelanto de la campaña de vacunación contra la influenza. Empezará el jueves 1 de octubre la aplicación de 36 millones de dosis a adultos mayores de 60 años con enfermedades crónicas y a mujeres embarazadas. Después se inmunizará al resto de la población. Se necesitarán muchos millones, más vacunas. En años previos, la aplicación de ese antígeno se inició a finales o a mediados de octubre. Enfermedad estacional, la influenza reaparece en otoño e invierno por la baja de temperaturas en el hemisferio norte. 2.- La influenza estacional tiene dos subtipos, según el virus que la cause: AH1N1 y AH3N2. Los síntomas en el paciente afectado son similares a los de Covid-19: fiebre alta persistente mayor de 38 grados; dolor de cabeza y malestar general; fatiga extrema; dolor muscular, de articulaciones e irritación de ojos; dolor de garganta, tos y dificultad para respirar; nariz congestionada y estornudos. Se debe usar mascarilla siempre, como ocurrió en la anterior pandemia de H1N1, de lo que el Presidente se mofó hace unos meses, por cierto. En poblaciones de riesgo, la influenza puede causar la muerte del paciente. La diferencia fundamental respecto a Covid-19 es que se dispone de una vacuna, de modo que la tasa de mortalidad puede reducirse drásticamente respecto de la establecida por la pandemia presente. 3.- La reacción del gobierno ha sido adecuada. Adelantó la campaña de vacunación. Acaso trate de evitar el cruzamiento de influenza y Covid-19, así se trate sólo de evitarse la saturación de hospitales –que parece ser la verdadera, única preocupación de don Gatell en la pandemia– y la complicación de un panorama sanitario ya de por sí terrible. Como fuere, ha acertado la administración lopezobradorista al comenzar el 1 de octubre la aplicación del antígeno. Según la Secretaría de Salud, la distribución del antígeno está en curso y la recibirán los estados en el transcurso de la semana próxima. Respecto a Colima, se deben tomar las medidas de resguardo y conservación. Recuérdese que en noviembre de 2009, al comenzar el gobierno de Mario Anguiano, por un acto de negligencia de la Secretaría de Salud estatal se echaron a perder 2 mil 670 dosis de la vacuna contra el AH1N1. El secretario de Salud federal en ese tiempo, José Ángel Córdova Villalobos, lo denunció públicamente. Informó el secretario “que el 24 de noviembre se les remitió a los 32 estados un correo electrónico en el que se les anunciaba que la vacuna les llegaría el día siguiente por vía aérea. El 25 de noviembre se envió a cada una de las entidades un correo con número de guía, la aerolínea y hora de llegada, y en el caso de Colima se les mandó a tres personas. El problema fue que no recogieron la vacuna el día que llegó; se les buscó en el aeropuerto pero aparecieron hasta el día siguiente, cuando la temperatura estaba a 19 grados y la vacuna ya no se podía utilizar”. Las vacunas se repusieron y a nadie fincó responsabilidad el gobierno anguianista, laxo como siempre fue. Por lo menos, los negligentes debieron pagar de su dinero la pérdida. El gobierno de Ignacio Peralta Sánchez debe tomar desde ahora las medidas necesarias para la recepción, traslado, resguardo y distribución del antígeno. Mantener las dosis a la temperatura indicada, por debajo de 19 grados centígrados, es fundamental. Los refrigeradores y refrigerantes portátiles deben estar listos ya. 4.- Para que la campaña de vacunación sea más efectiva, la Secretaría de Salud debe garantizar que el personal que aplique las dosis esté libre de la misma influenza y sobre todo del virus de Covid-19. Se le debe aplicar pruebas previas. Y a la vez, proteger a doctores y enfermeras participantes en la campaña, pues estarán en contacto cercano con miles de personas receptoras de la vacuna. Será un riesgo más para ese personal sanitario que se ha convertido en ejemplo de profesionalismo y sacrificio durante la pandemia. No por menos, la población considera héroes a quienes se ocupan de las tareas de sanidad ahora mismo. MAR DE FONDO ** Persiste la indisciplina, la indolencia, la irresponsabilidad. Quien no quiere, simplemente deambula sin cubrebocas. Ocurre en la calle y sobre todo en muchos negocios en que se atiende cercanamente a los clientes. Desde tiendas de esquina hasta bodegas. ¿Quién revisa, quién fomenta usar mascarilla, quién sanciona la idiotez de los negligentes? ** “Paredes de luna detienen todos los relojes./ En los bosques más cansados de tus ojos/ anidé mi palabra, con inhóspito sigilo./ Pronuncio espejos con las manos delgadas de tristeza./ Es el limo de los verbos y la espuma de la carne,/ un sol de sílabas y claveles de bolsillo./ Con duda maestra navegué en silencio por tu ombligo” (Beatriz Hernanz Angulo, española, 1963-. Paredes de luna detienen todos los relojes…).
