Oráculo político
PEDRO CASTILLO VALDEZ
El perfil idóneo del nuevo Rector
Jueves 22 de Octubre de 2020 7:35 am
HACE unos días, el Congreso del Estado reconoció a la Universidad de Colima por sus 80 años de fundación, institución educativa que con el paso de los años y por la conducción de la misma, se ha convertido en un baluarte para los colimenses, no sólo en la formación de profesionistas y el despliegue de infraestructura moderna para el desarrollo educativo, sino que, además, se convirtió en un ente forjador incisivo de la clase política de nuestro estado. Hablar de la UdeC nos lleva inminentemente a hablar del Grupo Universidad, una generación de personajes que llevaron a esta institución a su desarrollo moderno y a los niveles de calidad y excelencia educativa que hoy la posiciona en el número 17 como la mejor Universidad pública del país, y en el lugar 135 de Latinoamérica. Con los rectorados de Humberto Silva Ochoa, Fernando Moreno Peña, Carlos Salazar Silva, Miguel Aguayo López, Arturo Cedillo Nakay y Eduardo Hernández Nava, la Universidad, en los últimos 41 años, ha podido transitar de manera tersa y unificada ante los diversos embates que ha sufrido en diversas etapas de su historia, los cuales fueron resultado del acontecer político estatal por la intentona de algunos grupos en el poder de transgredir la autonomía universitaria. Sin lugar a dudas, la Universidad representa un organismo de poder político e intelectual en nuestro estado, por lo tanto, está sujeto a los procesos de escrutinio, cambios y transformaciones sociales, culturales, económicas y políticas del contexto tanto local, nacional e internacional, que le permite mantener la vigencia y la legitimidad no sólo con la comunidad universitaria, sino con el pueblo colimense. Con el proceso de sucesión rectoral que dio inicio hace unos días, en donde se elegirá por medio del Consejo Universitario al nuevo Rector que habrá de suceder a Eduardo Hernández Nava, los universitarios estarán eligiendo no sólo a quien dirija los destinos de la institución en los próximos 4 años, sino que sentarán las bases de la transformación que requiere dicha Alma Máter acorde a la nueva realidad política y social que se vive en nuestro país. Si bien hasta este momento la Universidad de Colima se ha conducido de manera correcta permitiéndole dar resultados positivos, la nuevas condiciones y exigencias sociales obliga a los universitarios a redirigir sus esfuerzos en el fortalecimiento de la institución para atender aspectos que han quedado relegados; en segundo plano, el tema de la paridad de género, la accesibilidad y sentido popular universitario, junto con los procesos de transparencia y rendición de cuentas. Por lo tanto, el nuevo Rector debe representar un cambio generacional con visión a futuro, pero sin apartarse del presente, un Rector que forje nuevos cimientos que le permitan a la Universidad tener vigencia, sustentabilidad y estabilidad por otros 80 años más. Tomando como referencia a los seis aspirantes a rector registrados, Christian Torres Ortiz Zermeño es quien cumple con el perfil idóneo que actualmente requiere la comunidad universitaria, destacando además que, a lo largo de su vida académica y directiva, ha demostrado capacidad, lealtad y sensibilidad humana a favor de la Universidad de Colima. ¡Despierta, Colima! CLARABOYA Bocanada Los resultados electorales en los estados de Coahuila e Hidalgo se vuelven una bocanada de aire para el priismo, sin embargo, al igual que todos los demás partidos, no deben aún cantar victoria para 2021, ya que los escenarios serán muy localistas. ¡Hasta la próxima!
