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¿Persuadir o pervertir?



RAÚL PÉREZ OSORIO


Martes 06 de Abril de 2021 12:00 am


“México sería uno de los países para vivir, una potencia mundial si sus ciudadanos se unieran y destituyeran a los políticos que han robado por años”, José Mujica, ex presidente de Uruguay.

He aquí la cuestión. Lo único que pudiéramos corregir a la anterior cita, es que no han sido por años, son centurias totalmente dedicadas al pillaje y saqueo de nuestro país, aunque pudiera decir que en esta época del neoliberalismo, robaron más que los ladrones que los antecedieron.

Si el humanista ex presidente uruguayo estuviera en la Presidencia de México y pronunciara esas palabras, estuviera siendo aborrecido por todos los voceros de los emporios corruptos, políticos y periodistas del mismo bodrio, porque menciona que hay que destituir a los políticos que nos han robado.

Para ellos es un ataque letal a la infraestructura de la corrupción, moral, mental y económica en la que viven. Hablar de persuadir y pervertir nos llevará a lo que está aconteciendo en nuestro país. Persuadir es el objetivo principal en la contienda política, si nos fundamentamos en un ambiente democrático y político, de un nivel cultural y social que quisiéramos ver materializado el próximo 6 de junio.

Mediante el lenguaje, la persuasión es la llave que utiliza el ser humano para convencer a la otra parte, que con fundamento en razones, emociones, argumentos, sinceridad y congruencia, tomemos decisiones que nos hagan vivir lo que es la justicia.

Pervertir consiste en estigmatizar a los demás, todo esto fundamentado en el odio, racismo, comercialización, extorsión y prejuicios, pero nos consideramos intelectualmente superiores a los demás, por lógica les negamos la inteligencia, porque consideramos que nuestra virtud bañada en la hipocresía no les permite ver nuestros intereses mezquinos, sean políticos o de cualquier tipo, que nos llevan a una descomposición. Convertir a los demás a nuestra imagen y semejanza, es ser hipócritas, cínicos y perversos.

El lenguaje de los medios de comunicación es movido por intereses que financian la prevaricación, el torcimiento y todo aquello que descompone el espíritu humano, a través de la mentira, la incultura y la necesidad de la gente; esto florece en una sociedad que ha quedado lacrada por la perversión del lenguaje político para roer huesos.

Todos somos responsables de tener gobernantes o representantes oprobiosos que han ultrajado la historia de nuestro país, cuando depositamos nuestra voluntad manipulada, si así le podemos llamar a las contiendas fraudulentas recientes, desde Salinas a Peña Nieto. A lo que queda de esos resabios partidarios que tenían el poder absoluto en 1968, que hicieron polvo a los estudiantes, debería darles vergüenza llegar al día 10 de mayo.

De manera cínica desvergonzada, propia de personas sin moral, hoy dicen que apoyarán a los adultos mayores, cuando se opusieron radicalmente a que se extendiera la pensión a todas las personas adultas que dejaron una parte de su vida por el país; ellos, los políticos cínicos, se llevaban todo ese dinero a los paraísos fiscales. Esos son los privilegios de robar, que no soportan que les quiten.

Lleguemos seguros al 6 de junio, con una consciencia clara y definida. Este es un ejemplo histórico de un Presidente que tomó una decisión de estado, que pulveriza materialmente la mentalidad priista: “Pueblo de México, los dispenso de toda obediencia a sus futuros gobernantes que pretendan entregar nuestros recursos energéticos a intereses ajenos a la Nación que conformamos. Sólo un traidor entrega su país a los extranjeros; los mexicanos podemos hacer todo mejor que cualquier otro país. Cuando un gobernante extranjero me pregunta si hay posibilidad de entrar al negocio de los energéticos o a la electricidad, le respondo que apenas estamos independizándonos de las invasiones extranjeras que nos vaciaron el país. Los recursos energéticos y los yacimientos petroleros son a perpetuidad propiedad única y exclusiva del pueblo mexicano. Les dejo la misión de no permitir que vuelva a caer en manos de extranjeros”, palabras de Adolfo López Mateos.

Guiémonos con estas estrellas para llegar a buen puerto este 6 de junio.