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Protestas



EDITORIAL


Viernes 10 de Septiembre de 2021 7:08 am


MAESTROS estatales se manifestaron ayer por la tarde afuera de Casa de Gobierno, debido al impago de la segunda quincena de agosto, así como la falta de servicios médicos y otros conceptos que el Gobierno Estatal les adeuda a los docentes adheridos a la Sección 39 del SNTE.

Los trabajadores exigen que se les cubra su salario y múltiples prestaciones que desde hace meses el gobierno de José Ignacio Peralta Sánchez les adeuda, incluyendo los pasivos que mantiene con instituciones sanitarias privadas, lo que provoca que no se preste el servicio a los maestros del estado.

Ante la pasividad del dirigente de la Sección 39, Heriberto Valladares, los trabajadores de la educación comienzan a organizarse por su cuenta para que sus exigencias se escuchen, dado que la situación es precaria y sus líderes no atinan a proceder con firmeza ante las autoridades estatales.

El Mandatario colimense explicó, al atender a los inconformes, que la nómina ya fue entregada a la Secretaría de Hacienda y solo está a la espera que esa dependencia entregue los recursos para iniciar con la dispersión a la burocracia estatal.

Sin embargo, ese discurso del titular del Poder Ejecutivo ya no tranquiliza a los maestros, pues la quincena ya se ha retrasado 9 días y es muy probable que no puedan cobrarla hasta el próximo lunes, cuando debería llegar el pago correspondiente a la primera quincena de septiembre.

A medida que el tiempo pasa, la inconformidad crece y es más factible que los docentes presionen mediante el paro de labores en sus escuelas, lo que afectaría a miles de niños que reciben educación, ya sea de manera presencial o a distancia.

El estado corre el riesgo de quedarse sin servicio educativo, lo que se añadiría a la advertencia de los elementos de la Policía Estatal y de la Fiscalía General del Estado, quienes advirtieron que si no hay pago en los próximos días, dejarán de laborar.

La situación de Colima es crítica, por lo tanto se espera que el mandatario Ignacio Peralta, así como la gobernadora electa, Indira Vizcaíno Silva, actúen a la altura de las circunstancias y eviten un desastre mayor.