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Presupuesto



EDITORIAL


Miércoles 01 de Diciembre de 2021 8:48 am


EN la sesión de ayer, los diputados aprobaron por mayoría el Presupuesto de Egresos 2022, mismo que contempla un gasto de 18 mil 565 millones 434 mil 132 pesos, lo que representa un aumento de mil 19 millones de pesos, o 5.8 por ciento respecto a los 17 mil 546 millones 68 mil pesos que se ejercieron este año.

El documento avalado por todos los legisladores, a excepción de la fracción del PAN, incrementa en 600 millones de pesos las partidas destinadas al desarrollo social; por el contrario, hay una disminución importante en dependencias como la Oficina de la Gubernatura.

En el presupuesto se contempla un aumento del 39 por ciento de los recursos destinados a la Universidad de Colima, mismos que ascenderán a 475 millones 245 mil 633 pesos, es decir, 133 millones 640 mil más que los 341 millones 605 mil 272 pesos que se debieron haber entregado este año.

La gobernadora Indira Vizcaíno Silva no tuvo mayores problemas para que el Congreso aprobara el presupuesto que elaboró y que destina buena parte de los recursos a gasto social, para fortalecer los programas asistenciales y apoyar a las familias que menos tienen.

Se observa que el Gobierno Estatal siguió la línea trazada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, de primero los pobres, lo cual es importante, porque se necesita ir borrando la enorme brecha de pobreza y desigualdad que se formó durante décadas por el abandono gubernamental.

Sin embargo, es igualmente importante que parte del presupuesto se dedique al fomento de las inversiones, porque para que el gobierno tenga dinero, se requiere que la iniciativa privada invierta, genere derrama económica y empleos bien remunerados.

Es plausible que Indira Vizcaíno aplique desde ahora el plan de austeridad prometido en campaña, que se cuide el gasto y que se busque hacer un gobierno eficiente con menos recursos.

Por las malas experiencias de los gobiernos anteriores, en especial el que acaba de terminar, los colimenses esperan un escrupuloso manejo del presupuesto, que el dinero se ejerza puntualmente, con honestidad y transparencia, para que los resultados se traduzcan en mayores beneficios, obras y servicios para la población.