La ignorancia es felicidad
EDUARDO RUIZ-HEALY
Jueves 26 de Mayo de 2022 8:02 am
EL dicho inglés ignorance is bliss (la ignorancia es felicidad) se origina en un poema del inglés Thomas Gray (1716-1771), que en uno de sus versos dice: “Donde la ignorancia es felicidad, es una locura ser sabio”. Se usa para describir a alguien que por no saber que existen cosas mejores acepta como normales y hasta buenas las que conoce. Hace unos años, una persona que colaboraba conmigo y que nunca había salido de México, me dijo que no entendía por qué me quejaba de que hubiera tantos baches en las calles y que las banquetas estuvieran deterioradas. “Ni que las cosas fueran diferentes en otros países”, aseguró. Le contesté que en muchos países los baches y las banquetas derruidas no eran usuales. Me respondió que no lo creía y así concluyó nuestra plática. Meses después, se le presentó la oportunidad de ir a visitar a unos familiares radicados en California. Lo animé a que fuera a verlos y decidió viajar al extranjero por primera vez. Días después de que regresara a México le pregunté qué le habían parecido los sitios que visitó. “Muy bonitos y tenía usted razón, no todo es como aquí. Allá las calles no estaban llenas de hoyos”, me contestó. Le dije que los viajes ilustran. Y así piensan hoy millones de mexicanos que nunca han tenido la oportunidad de experimentar en carne propia los servicios públicos de países en donde hay más desarrollo, y que consideran que son buenos los servicios públicos que les proporcionan las autoridades federales, estatales y municipales. Lo anterior queda en evidencia con algunos datos que arroja la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental 2021 en noviembre y diciembre del año pasado por el INEGI. El 71.3 por ciento de la población está satisfecha con el servicio de educación pública y lo está porque desconocen la alta calidad de los sistemas educativos de otros países e ignoran la baja calidad del sistema mexicano. A los gobernantes mexicanos les ha sido muy conveniente aprovecharse de la inocente ignorancia de la mayoría para proporcionarles servicios públicos malos. Han entendido muy bien que la ignorancia es felicidad y que la mejor manera de perpetuar la primera es manteniendo un sistema educativo mediocre.
