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Indicador político



CARLOS RAMÍREZ

De Echeverría a Alito


Viernes 27 de Mayo de 2022 7:35 am


MIENTRAS el presidente nacional priista, Alejandro Moreno Alito, y el gobernador oaxaqueño, Alejandro Murat, están jaloneándose los restos del partido para apartar desde ahora la candidatura presidencial de 2024, el PRI avanza a dos derrotas inevitables: Oaxaca e Hidalgo.

Las dos plazas representarán nuevas caídas electorales que significarán la pérdida de posiciones territoriales importantes, aunque la parte fundamental radica en los mensajes nada subliminales: los Murat terminan el dominio priista en Oaxaca y a lo largo de tres y medio años, el Murat Jr. convirtió a su Gobierno priista en una sucursal de Morena.

El caso de Hidalgo ilustra los enredos oligárquicos en los que ha caído el PRI: la candidata Carolina Viggiano es esposa de Rubén Moreira. El exgobernador coahuilense, Humberto Moreira, denunció al matrimonio como profesionales del fraude electoral; y por si fuera poco, la derrota del PRI-Viggiano-Moreira en Hidalgo perfilaría un colapso en las élites priistas de Coahuila.

El hundimiento del Presidente priista no es más que la consecuencia de la acumulación de contradicciones y la ausencia de algún grupo priista hegemónico. 

El camino ineluctable del PRI hacia su colapso final en 2024 ha pasado por cinco estaciones políticas de disputa por el poder:

1.- 1975. El presidente Echeverría rompió el ritmo político del partido para imponer como candidato presidencial a Portillo, quien carecía de formación política en el PRI y que a su vez le entregó el poder al tecnócrata Miguel de la Madrid Hurtado como principio del desplazamiento de los políticos por los economistas.

2.- 1987. Salinas de Gortari culminó la captura del PRI para beneficio de la clase tecnocrática neoliberal y provocó la fractura del partido con la salida de Cárdenas, entregando el aparato partidista en manos de los tecnócratas.

3.- 1992. Salinas de Gortari y Luis Donaldo Colosio enterraron al PRI de la Revolución Mexicana y lo convirtieron en el partido del neoliberalismo.

4.- 1994. Colosio fue asesinado en medio de una disputa por el poder entre los tecnócratas y los políticos. Ernesto Zedillo entregó la Presidencia de la República al PAN en 2000.

5.- 2018. El presidente Peña Nieto impuso como candidato a José Antonio Meade, y el resultado electoral colocó al PRI en el tercer lugar partidista del que no ha salido hasta la fecha.

Los audios con afirmaciones estridentes del actual presidente nacional son una mera anécdota picaresca del viejo PRI. El PRI terminó su ciclo como partido político y quedó en una mera oficina al servicio de un puñado de políticos sin sentido político.