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El espejo donde se mira el que cambia



AVELINO GÓMEZ


Viernes 05 de Agosto de 2022 8:42 am


EN una de las páginas del libro Apuntes de un aburrido (Puertabierta, 2012), el poeta Víctor Manuel Cárdenas escribió un texto sobre ideologías políticas. Han pasado diez años de su publicación, pero parece que fue escrito esta mañana. Lo transcribo, no de manera íntegra por motivos de espacio, pero respetando completamente su sentido:

“Hubo un tiempo en que la derecha era la derecha y la izquierda, la izquierda. La derecha era una y la izquierda otra. Cada una tenía su barco, el mar era extenso y cada una domesticaba sus olas. El asunto se complicó cuando las izquierdas y las derechas aumentaron su ambición y avanzaron frente a frente. El mundo se redujo a uno solo. Desde entonces, a diestra y siniestra, el mar es un naufragio permanente. La lista de ahogados es impresionante”. 

Mañana se cumplen cinco años de la partida de Víctor Manuel Cárdenas (1952-2017). Pero no se fue del todo —cuando los poetas dicen que se van, no les crean—. Lo único cierto es que a él, que militó en las izquierdas, le tocó la suerte de no ver cómo las ideologías, en su naufragio, se redujeron al comadreo en las redes sociales. Quienes decían ser luchadores sociales ahora quieren ser influencers. Y ni modo, así corren los tiempos.

Mejor conmemorar el buen ánimo de Víctor. Su atrevida generosidad con las palabras. El puñado de poemas que nos dejó para recordarnos que la poesía no cambia nada, es el espejo donde se mira el que cambia. Y acudo, otra vez, a su Apuntes de un aburrido, porque también entre esas páginas se adelantó a responder las eternas preguntas sobre las ausencias:

“El sitio a donde voy no existe, por lo tanto, las nubes son la sensatez donde podremos fumarnos un cigarro. De entre todas las comedias posibles, la farsa de compartirnos fue la empresa más bella. A partir de ahora, las flaquezas se convertirán en privilegiado contrafuerte de la melancolía y la fugacidad será la herida donde los instantes se reivindican. Que no todo sea tragedia, porque los dramas se han convertido en noticias baratas; que sólo duela el relámpago de una cara deslavada, el abismo que por más esfuerzos no aprendimos a llenar entre una soledad y otra.”