Cargando



Malas compañías



MARIO ALBERTO SOLÍS ESPINOSA

Otra legislatura perdida 


Miércoles 14 de Septiembre de 2022 8:34 am


LOS diputados locales de la 60ª Legislatura concluyeron su primer año de ejercicio el pasado 31 de agosto. Los saldos no podrían ser peores, y las expectativas más sombrías, pues la actuación de los tribunos responde solo a intereses de grupo y partidistas, y no a los de la sociedad colimense. 

Escasos son los aciertos de los actuales legisladores, entre ellos la despenalización del aborto y la reprobación de la cuenta pública del gobierno estatal correspondiente a 2020 por múltiples irregularidades cometidas por Ignacio Peralta Sánchez; no hay mucho más que decir. 

Durante un año la mayoría de Morena y sus aliados, con el control del Congreso del Estado, han deambulado entre la sumisión total a su jefa política, la gobernadora Indira Vizcaíno Silva, y la superficialidad absoluta, dedicando tiempo y recursos a temas que solo sirven para la foto y la corrección política. 

No están reflejados en la tribuna parlamentaria los asuntos que inquietan a los colimenses, pues no se habla de salud, seguridad ni economía, a menos que los diputados de oposición inicien la discusión, generalmente también por cálculos políticos, lo que contamina cualquier esfuerzo por aportar soluciones. 

La bancada oficialista, integrada por Morena, Nueva Alianza, Movimiento Ciudadano, PT y PVEM privilegia la pose, las apariencias, se asumen como feministas y no han fijado ningún posicionamiento respecto al grave incremento de los feminicidios y transfeminicidios en la entidad. 

Se llaman democráticos y votaron para que la revocación de mandato no se aplique durante el actual periodo gubernamental, una brutal incongruencia de los mismos personajes que hace apenas unos meses eran los principales promotores de esa figura de participación ciudadana en el ámbito federal. 

La banalidad con que actúan los diputados no es lo más lamentable, sino su omisión en temas fundamentales como el juicio político a Ignacio Peralta Sánchez y Leoncio Morán Sánchez. 

Tampoco hay seguimiento puntual a las denuncias penales por desvío de recursos interpuestas contra esos mismos exfuncionarios, mucho menos un eficaz trabajo de fiscalización que evite la repetición de prácticas corruptas en el ejercicio de los recursos públicos. 

En su primer año de gestión, los diputados colimenses dieron la espalda a las expectativas de la sociedad colimense; se convirtieron en simples peones de un grupo político que desde Colima explota la imagen del presidente Andrés Manuel López Obrador y la enarbola como escudo ante las críticas y los justos reclamos de amplios segmentos de la población. 

Poco se puede esperar de los diputados en el futuro, seguramente pasarán al basurero de la historia como eslabones de la larga cadena de impunidad que ha protegido a malos gobernantes y sobre todo, como una generación que fue incapaz de llevar a la práctica el discurso de la transformación que ilusionó a los colimenses. 

 

BREVE HISTORIA PARA CAMILA En días pasados murió Javier Marías. Ese lamentable deceso me recordó que el último libro del autor, titulado Tomás Nevinson, y que hace unos meses adquirí para su lectura, lo destruyó el Tiberius; es el único libro que ha quedado entre sus fauces. Una tarde me distraje apenas unos segundos y cuando me percaté, el inquieto can había despachado la mitad del ejemplar. Para rendirle homenaje al escritor español, tendré que comprar esa obra de nuevo y cuidarlo mejor de mi peludo amigo.